28 de abril de 2011

Utopías y distopías conviven cotidianamente

El mundo está lleno de miseria, pobreza, sufrimiento, ignorancia, y toda clase de barbaries y anacronismos. O bueno, se dan en nuestro tiempo, pero no deberían. Sin embargo, no creo que sentirse culpable por todo el mal del mundo resulte en algún tipo de solución o redención. Yo llegué aquí y ya estaba de la fregada, y modestamente, y sin haber yo intervenido más que muy pero muy marginalmente en este teatro loco, el mundo hoy está mejor en muchos sentidos que cuando yo nací. Dicen que tan sólo el NewYork Times publica a la semana más información de aquella a la que hubiera tenido acceso alguien de hace tres siglos en toda su vida, ya no digamos hace seis, quince o veinte siglos. Pero eso es una sola publicación semanal, en realidad la información que se genera constantemente en nuestros días, en la internet y todos los demás medios, y que está disponible prácticamente para todos, es tanta que hoy en día, todos los que estamos conectados a la world wide web tenemos más, miles o millones de veces más, que nuestros antepasados.

Esto me hace pensar en dos cosas, la primera, que personajes como Platón o Aristóteles, o como Galileo, Spinoza, Descartes, Newton, etc, eran de verdad megadotados intelectuales, y con relativamente poca información (pero selecta) hicieron magia y maravillas y le regalaron a la humanidad condensados de sabiduría. La segunda, es que hoy hay acceso a los regalos de esos sabios sin necesidad siquiera de desplazarse. Si quiero leer a cualquiera desos sabios autores nomás entro al Gutemberg Project, los busco, y están disponibles. Con lo que podría no ser yo un genio de la talla de Aristóteles, pero puedo subirme en los hombros de tantos gigantes, que aunque sea un enano puedo ver más lejos quellos. Esa es la belleza de nuestra época de internet. Para mí es muy difícil, por ejemplo imaginar mejoras a lo que hay hoy porque ya me siento como viviendo en una película de ciencia ficción, con sus lados paradisiacos y sus lados distópicos, but hey, dicen sabios contemporáneos que nunca ha habido buenos tiempos en los que vivir y yo les creo.

Tal vez, si logramos expandir el acceso a internet a más y más sectores de la población logremos también más adelante dejar atrás la ignorancia, el sufrimiento, la pobreza, la miseria... tal vez.

No hay comentarios.: