30 de abril de 2010

Por qué el software no debería tener dueños (2 de 8)

Las tecnologías digitales son más flexibles que la imprenta: cuando la información adopta una forma digital, la puedes copiar fácilmente para compartirla con otros. Es precisamente esta flexibilidad la que se ajusta mal con un sistema como el del copyright. Esa es la razón del incremento de medidas perversas y draconianas que se emplean en la actualidad para hacer cumplir los derechos de autor del software. Considera estas cuatro prácticas de la Asociación de Editores de Software (Software Publishers Association o SPA):

  • Propaganda masiva que dice que está mal desobedecer a los dueños del software para ayudar a tus amigos.
  • Pedirle a las personas que se conviertan en soplones y delaten a sus colegas y compañeros de trabajo.
  • Redadas (con ayuda policiaca) en oficinas y escuelas, en las que se exige a las personas que prueben su inocencia respecto de hacer copias ilegales.
  • Procesos judiciales (por el gobierno de los EEUU, a petición de la SPA) a personas como David Lamacchia, del MIT, no por copiar software (no se le acusa de copiarlo), sino meramente por dejar sin vigilancia equipos de copiado y no fiscalizar su uso.

Cada una de estas cuatro prácticas son similares a aquellas usadas en la antigua Unión Soviética, donde todas las máquinas copiadoras tenían un guardia para evitar copias prohibidas, y donde las personas tenían que copiar información en secreto y pasarla de mano en mano como «samizdat». Por supuesto hay una diferencia: el motivo para el control de información en la Unión Soviética era político; en los EE.UU. el motivo es el beneficio económico. Pero son las acciones las que nos afectan, no el motivo. Cualquier intento de bloquear el compartir información, sin importar por qué, lleva a los mismos métodos y a la misma dureza.

29 de abril de 2010

La mafia es un gobierno chiquito

Hace algunos días vi la de El Padrino II, la pasaron en no sé qué canal y me absorbió. Me gustó que hubiera dos líneas narrativas, la de Michael Corleone a final de los cincuenta, y la de su padre, Don Vito Corleone (interpretado por un Robert De Niro jovencísimo) desde su llegada a los E.U. a principios del siglo hasta poco antes de lo sucedido en la primera parte de la trilogía. Hay un momento en que Vito, tras perder su empleo y cometer su primer robo, es abordado por Don Fanucci, el mafioso local, para pedirle dinero y así dejarlo trabajar en paz (ya sea legalmente por cien dólares tras cada venta o ilegalmente por el doble tras cada golpe). Por supuesto Vito caza a Don Fanucci y lo mata durante una fiesta popular en el barrio. Después del asesinato, incluso sin haberlo buscado intencionalmente, Vito se vuelve el "protector" del barrio, y así es como empieza la famiglia Corleone.

Ahora bien, en la escena en que Don Fanucci intenta extorsionar a Vito, le da a entender que si le entra va a poder ejercer en paz, y si no, le mandará a la policía. Relaciono eso con lo que está sucediendo en el norte del país (y lo que cuentan que hace ETA en España) en que bandas del "crimen organizado" van y le piden cooperacha a los comerciantes establecidos a cambio de "protección", que es un eufemismo de "no madreárselos", y mientras que deben castigar a los que se niegan a pagarles precisamente "dejando" que algo les pase, también deben hacer valer su protección de facto e impedir que otras bandas anden merodeando su territorio. Y es lógico, los gobiernos son entidades demasiado grandes y amplias y porosas y sueltas como para de verdad garantizar seguridad, mientras que los tiranuelos locales sí pueden, y si no pueden, por lo menos pueden ejercer algún tipo de venganza contra quienes cruzaron a su territorio para hacer fechorías sin permiso.

Viéndolo así me di cuenta de que hay un paralelismo entre mafia y gobierno, al menos el gobierno como lo conciben los derechistas neoliberales, que es una entidad exclusivamente reguladora y cuidadora del orden. Sin seguro médico ni educación pública, nada, sólo una gran policía a la que se le paguen impuestos para "protegernos"... El gobierno, puesto que hace su trabajo de cuidarnos de los maleantes pésimamente, ha dado espacio para que haya toda clase de extorsiones por parte de banditas locales y secuestros y lo que se quiera, con lo cual yo preferiría pagarle a un capo local pero estar más seguro, que seguir pagando mis estratosféricos impuestos y recibir a cambio solamente comerciales propagandísticos pagados a las televisoras públicas, que glorifican a políticos poco diestros y fraudulentos.

28 de abril de 2010

Mantenerse informado hoy en día, ¿se puede?

Los periódicos suelen ser compilaciones de noticias elaboradas en las grandes agencias noticiosas del mundo como AFP, AP, Reuters, Ansa, Notimex, etc. De modo que por lo común las notas de asuntos políticos y sucesos internacionales son copiadas y pegadas (a lo sumo traducidas, si no es que la agencia contratada por los cotidianos las pre-traduce) en el diario de nuestra preferencia. Suelen tener una redacción "neutra" que pretende cierto grado de objetividad, con un resumen, el recuento de hechos y alguna que otra entrevista al respecto hecha con analistas o personas directamente involucradas que dan su opinión sobre tales hechos. Que los periódicos sacan la info integra de ahí es fácil de corroborar, sólo es menester leer dos o más diarios del mismo día, y se descubrirá que aparte del título, si la fuente es, por decir algo: AP, entonces el contenido será el mismo.

Por lo tanto, como estamos en la era de la información y la red, tal vez sea mejor meterse a leer las noticias directamente al sitio web de Reuters, o de AFP (por lo general respecto del mismo tema no variarán mucho entre sí), mientras que de los diarios locales lo mejor es leer tan sólo las notas de opinión, de crítica, y alguno que otro encargo o entrevista hechos directamente por personal del periódico que más nos guste. En realidad lo que yo hago es seguir a periodistas o escritores que considero veraces y/o acertados, si estos últimos se cambiaran de medio o de periódico seguiría buscándolos en su nueva sede.

Recuerdo que en La misteriosa llama de la reina Loana Yambo se encuentra con los periódicos de su abuelo de la época de la segunda guerra mundial, eran propaganda estatal descarada y ofrecían noticias alentadoras y optimistas en los peores momentos de las derrotas italianas, pero el abuelo del personaje principal podía oír por las noches también a Radio Londres, de modo que al lado de cada noticia italiana él anotaba con un lápiz rojo la información hecha pública por el aparato de propaganda inglesa, y vaya que contrastaba, y así es como se mantenía al tanto.

Pero ahora hay tal uniformidad, tal consenso, entre los grandes consorcios noticiosos que para contrastar la información y poder matizar y entender mejor, hay que leer sitios underground, sitios de activistas y de sociedades de activistas, sitios del estilo de zmag, red voltaire, the real news, truthout, etc. Hoy en día para estar informado de la realidad cotidiana pues, hay que saber francés e inglés, y hay que ser muy suspicaz.

27 de abril de 2010

¿Mata el rencor al rencoroso?

He escuchado con frecuencia desde hace algún tiempo, respecto de los enfermos de cáncer, que les dio el mal por envidiosos, rencorosos, amargados o angustiados. Y eso me parece un juicio horrible, una especie de "se lo merecían, por eso les cayó el chahuistle" o un "por eso no sales del hoyo" que le gritan a los taxistas cuando se le cierran a los otros automovilistas o no recogen el pasaje. Ahora bien, es cierto que somos criaturas psicosomáticas y que nuestro estado de ánimo afecta nuestra salud, pero igual es al revés, nuestra salud afecta nuestro ánimo; aunque después se diga que no, que si uno tiene un ánimo fuerte puede ignorar los males y portarse de todas formas sereno y sabio frente al dolor y la adversidad. La cosa es que si a mí hoy me llegaran a decir que me quedan dos semanas de vida, con las ganas que tengo de ver crecer a mi pequeña seguro que me volvía un amargado envidioso rencoroso de mierda con todos los demás que no tuvieran esa condena de muerte, y que sí tuvieran, si no la certeza, por lo menos sí muchas más posibilidades de ver crecer y desarrollarse a sus seres queridos. Pero no sólo eso, si me diera un cáncer terminal (o cualquier otra enfermedad), seguro mi organismo cambiaría, segregaría hormonas o enzimas que antes no, la química interna de mi cuerpo se alteraría, y probablemente, incluso sin saber que me acecha una terrible enfermedad y muerte "prematura", mi estado de ánimo también se alteraría.

Ya he posteado con anterioridad eso de correlation is not causation. Lo que quiere decir es que podría ser al revés, podría ser que el cáncer provocara una actitud ojete, y entonces la envidia o el rencor o la amargura o la angustia fueran síntomas, más que causas. También podría ser que no estuvieran relacionados de ningún modo, por ejemplo, si todo aquel que sintiera envidia se enfermara de cáncer, ya podría yo creer que están relacionadas la enfermedad con el pecado capital, pero si encuentras a personas envidiosas que llegan hasta los 90 años y mueren durante su apacible sueño, entonces ya se fregó el asunto, porque se podrá decir que sólo algunos de los que tienen envidia se enferman de cáncer, pero entonces ya no es una regla de causalidad. Podría ser que la relación fuera con respecto a otro problema de fondo, alguien afectado por una central de transmisiones de microondas cercana a su casa, que le modificara tanto el carácter como la salud... etcétera.

La verdad es que en esta, como en muchas otras cosas, es cuestión de suerte medible con estadísticas. Por ejemplo, dicen que 1 de cada tres adultos que vivan más de 60 años tendrá cáncer. Eso quiere decir que si llego a esa edad hay bastantes probabilidades de que me enferme. Pero luego está esa otra estadística que dice que si me detectan tempranamente el mal mis posibilidades de salvarme son mucho mayores, etc. Y sí, hay casos de niños con cáncer, uno en mil o más, y dentre esos, los que son incurables y/o no se detectan a tiempo son uno en cien, por decir una cifra sacada de la manga; por lo tanto, que a uno le toque el boleto de la macabra lotería de ser un niño que morirá joven es algo muy desafortunado, sí, pero no atribuible a la envidia, rencor, odio, amargura o angustias del pequeño. En realidad querer encontrarle una explicación simple al azar es poco fructífero. Se le puede llegar a encontrar una explicación particular a cada caso específico, pero remontar causas en sistemas abiertos para encontrar reglas generales no suele dar resultados lineales ni mucho menos sencillos como una causa única (actitud negativa) para un abanico de males (cáncer de n tipos).

26 de abril de 2010

Parecon - Parte 1 (44 de 48)

El socialismo de mercado


El socialismo de mercado es un nombre sumamente usado para un sistema que utiliza mercados, una división laboral jerárquica o corporativa, remuneración deacuerdo a la productividad, y propiedad ya sea social, pública o estatal de los medios de producción.

El socialismo de mercado, según nuestra visión, es mejor que el capitalismo al eliminar la propiedad privada de los medios productivos y de ese modo eliminar también a la clase capitalista. Pero en el socialismo de mercado vemos, en lugar de eso, que una clase coordinadora se eleva en altura y poder, utilizando su monopolio relativo del trabajo intelectual y la toma de decisiones sostenido por su propio trabajo y el trabajo de sus subordinados, para alcanzar una posición de mando. Los capitalistas han desaparecido y por lo tanto el más significativo factor conducente al diferencial de ingresos también se ha ido, pero sigue habiendo división y mando de clases. Sigue habiendo enajenación, mala distribución, y bases inmorales para la remuneración, intrínsecas a los mercados, y sigue habiendo una división laboral que relega a la mayoría de los actores a un tedio mayor que el justificado, reservando para unos relativamente pocos mayor poder y más recompensas.

Se pueden imaginar un rango de variaciones en tales economías, por supuesto. El balance de poder entre coordinadores y trabajadores puede variar. Si los trabajadores acumularan más poder, podrían poner en marcha reformas estructurales para mejorar los males del mercado, redistribuir la riqueza, etc. Si los coordinadores acumularan más poder, podrían poner en práctica lo opuesto. Las dinámicas de mercado internas del sistema promueven esto último. La lucha valerosa promueve lo anterior.

Claramente, sin embargo, aún con cualquier mejora lograda sobre el capitalismo al alcanzar el socialismo de mercado, el socialismo de mercado sigue sin ser una economía que por sus operaciones intrínsecas promueva la solidaridad, la equidad, la diversidad, y la auto-gestión participativa al mismo tiempo que cumple eficientemente funciones económicas. En lugar de eso, todos los padecimientos intrínsecos de los mercados --particularmente, las divisiones laborales jerárquicas, la remuneración de acuerdo a la productividad y al poder de negociación, la distorsión de las personalidades y los motivos, y la mala evaluación de bienes y servicios, etc.-- persisten, mientras que sólo la presencia agravante del capital privado ha sido transcendida.

¿Es este sistema económico aptamente llamado socialismo? Si lo llamamos "socialismo", entonces esa palabra no puede significar simultáneamente gobierno por los trabajadores sobre sus propias labores, porque eso está ciertamente ausente en este sistema. Si no llamamos a este sistema "socialismo", entonces vamos en contra de las etiquetas populares y del nombre elegido por sus defensores. El factor decisivo en esta tensión para mí, después de algunos años de ambivalencia, es que demasiadas personas perfectamente razonables asocian la etiqueta "socialismo" con este modelo y con el modelo centralmente planificado para que valga la pena intentar separar a la etiqueta de dichos sistemas. En cambio parece ser más instructivo y productivo:
  1. dejar claro que esos sistemas tienen división de clases y son gobernados por coordinadores,
  2. dejar claro cómo nuestro sistema preferido difiere de ellos, y
  3. dejar atrás la etiqueta socialismo como un descriptor positivo de lo que deseamos para evitar culpabilizaciones por asociación y las confusiones que tiene aparejadas.
Y ese es el por qué la economía presentada en este libro es llamada "economía participativa".

25 de abril de 2010

Astrología y Ética, ¿pueden convivir?

El jueves pasado fui a que me leyera la cartilla una endocrinóloga, vio mi análisis de sangre y me dijo que tengo alto el colesterol, el ácido úrico (y eso que casi no como carne), los triglicéridos, etc. Mi tiroides sigue viva pero necesito hacerme más pruebas y análisis para ver bien su estado. Todo eso porque tanto a mi papá, como a mi mamá, como a mi hermana les diagnosticaron hipotiroidismo, y como estoy algo obeso mi madre se preocupó y me solicitó atentamente que me revisara.

Me acompañó mi papá a la consulta, pero mientras estábamos en la sala de espera conversamos largo rato sobre una paciente suya, o cliente, o como pueda decírsele, en los temas de la astrología. Una mujer que va con mi papá periódicamente, y tras algunos cálculos que él hace y unos mapas astrales que traza, recibe los sabios consejos de mi veterano padre para ir resolviendo cosas que la preocupan de su vida. Resulta que esta fémina tiene severísimos problemas de muchos tipos, y se los ha contado todos a mi papá, y él a su vez estaba narrándomelos a mí con lujo de detalle y no sé con qué objeto, tal vez tan sólo para hacerme plática... De cualquier modo, a mí me escandalizó no tanto la vida privada de la persona que lo consulta, tan problemática como cualquiera, sino que mi papá me diera a mí toda esa información.

¿Será que mi viejo padre no sabe del secreto profesional que es parte de la deontología de cualquier profesional que reciba información privada y confidencial?, ¿o lo sabrá pero no sabe guardar un secreto?, ¿o le gusta el chisme?, ¿por qué no podía platicar conmigo del último libro que leyó, del que está leyendo ahora, o de conceptos abstractos de su afición astrológica o de sus negocios en lugar de ventilar sus juicios sobre información recibida de alguien que confiaba en que nunca se divulgara de ningún modo?

En mi caso no hay bronca, porque como la vida desa persona me tiene totalmente sin cuidado no tendrá mayores repercusiones, pero ¿y si esta misma info se la diera a alguien dispuesto a explotarla sin escrúpulos en perjuicio de su dueña? Total que me pregunto si hay una deontología del astrólogo. Me pregunto si será o no bueno reprocharle a mi papá su falta de profesionalismo, decirle que con lo que me contó, independientemente de que sea su hijo y esté bien que confíe en mí, yo no iría con él a preguntar sobre mis astros, y me cuidaría mucho de tratar detalles de mi vida privada, no vaya a ser que luego se entere hasta la sirvienta de la casa, o sus vecinos o sus empleados. ¿Es un astrólogo un profesional?, ¿tiene algún contrato de confidencialidad el profesional de la astrología? ¿No debería plantearlo desde el inicio de las sesiones con sus clientes, así como lo hace un psicólogo?

24 de abril de 2010

Anarquismo triunfante (14 de 36)

El estado de la industria del cómputo a lo largo de los años 60 y 70, cuando se establecieron las normas fundamentales de la programación sofisticada de computadoras, ocultaba la tensión implícita en esta situación. En ese periodo, el hardware era caro. Las computadoras eran colecciones cada vez más grandes y complejas de máquinas, y el negocio del diseño y la construcción de tal arreglo de máquinas para uso general era dominado, para no decir monopolizado, por una compañía. IBM regaló su software. Siendo más preciso, IBM era dueña de los programas que sus empleados escribían, y registraba bajo Copyright el código fuente de los mismos. Pero también distribuía los programas --incluyendo el código fuente-- a sus clientes sin cargos adicionales, y los animaba a hacer y compartir las mejoras o adaptaciones de los programas que distribuía. Para un fabricante de hardware dominante, esta estrategia tenía sentido: con mejores programas se vendían más computadoras, que era donde se basaba la rentabilidad del negocio.

Las computadoras, en este periodo, tenían tendencia a aglomerarse dentro de organizaciones particulares, pero no a comunicarse ampliamente unas con otras. El software necesario para operar se distribuía no por medio de una red, sino con bobinas de cinta magnética. Este sistema de distribución llevaba a centralizar el desarrollo de software, por lo que aun cuando los clientes de IBM eran libres de hacer modificaciones y mejoras a los programas, esas modificaciones eran compartidas en primera instancia con IBM, la cual consideraba entonces si y cómo incorporar dichos cambios en la versión del software desarrollada y distribuída centralmente. Por lo tanto en dos modos importantes el mejor software de computadoras del mundo era libre: no costaba nada adquirirlo y los términos con los cuales se proveía, lo que permitía y alentaba la experimentación, los cambios, y las mejoras [13]. Que el software en cuestión fuera propiedad de IBM bajo la ley de Copyright prevaleciente ciertamente establecía ciertos límites teóricos respecto de la habilidad de los usuarios para distribuir a terceros sus mejoras o adaptaciones, pero en práctica el software de mainframes era desarrollado cooperativamente por el fabricante de hardware dominante y sus usuarios técnicamente sofisticados, empleando los recursos de distribución del fabricante para propagar las mejoras resultantes gracias a la comunidad de los usuarios. El derecho de excluir a terceros, una de las más importantes "varas en el atado" de los derechos de propiedad (en una metáfora amada por la Corte Suprema de ls Estados Unidos), practicamente no tenía importancia, o era incluso indeseable, en el corazón mismo del negocio del software [14].

13. Esta descripción deja de lado algunos detalles. Para mediados de los años 70 IBM habia adquirido competencia significativa en el negocio de las supercomputadoras, al mismo tiempo que el gran juicio antimonopolista llevado en contra de dicha compañía por el gobierno de los E.U. condujo a la decisión de "separar", o cobrar por separado el software. En este sentido de menor importancia el software dejó de ser libre. Pero --sin entrar en la ahora muerta pero entonces acalorada controversia respecto de las políticas de precios del software de IBM--, la revolución de la "separación" tuvo menores efectos en las prácticas sociales de la manufactura de software de los que se hubieran podido suponer. Como uno de los colegas responsables de las mejoras técnicas de un lenguaje de programación de IBM entre 1979 y 1984, por ejemplo, fui capaz de tratar tal producto como "casi libre", es decir, de discutir con los usuarios los cambios que ellos propusieran o hicieran a los programas, y de involucrarme con ellos en el desarrollo cooperativo del producto para beneficio de todos los usuarios.

14. Esta descripción está sumamente comprimida, y le parecerá tanto demasiado simplificada como indebidamente rosada a quienes también trabajaron en la industria durante ese periodo de su desarrollo. La protección con copyright del software de computadora fue un tema controvertido en los años 70, lo que llevó a la famosa comisión CONTU (Commission on New Technological Uses of Copyrighted Works -- Comisión para los Nuevos modos de Uso Tecnológico de Trabajos con Copyright) y sus blandas recomendaciones pro-copyright de 1979. IBM parecía mucho menos cooperativa para con sus usuarios en ese entonces de lo que este esbozo describe. Pero el elemento más importante es el contraste con el mundo creado por las PCs, la internet, y el dominio de Microsoft, con el ímpetu resultante del movimiento del software libre, y estoy aquí concentrándome en las características que expresan dicho contraste.

23 de abril de 2010

Y nos dieron las diez y las once

Mi amada es super fans del Joaquín Sabina, ella tenía muchas ganas de ir al concierto quel cantautor español dió acá en Mexicalpán de las tunas la semana pasada y esta que acaba de terminar. Yo me hice menso porque con los pañales y las toallitas limpiadoras y las leches y todolodemás, mi presupuesto está permanentemente archirrecortado. Un día en la oficina me preguntó de repente Nacho: "Oye, ¿te interesa ir al último concierto de J.S.?, es que en el departamento x están regalando entradas y les quedan unas cuantas..." Por supuesto dije que sí, emocionado por poder emocionar a mi musa. El día que me entregaron los boletos llegué a casa después del trabajo y se los mostré a mi compañera, quien sonrió sorprendida pero (aah sí, un pero) no tan emocionada pues ella acababa de comprar por internet otros boletos un piso más abajo (o sea, más cerca), de cualquier modo habría familiares y/o amigos a los que seguramente les interesaría ir con nosotros al toquín...

El día del evento fuimos a dejar a Loana con una de mis cuñadas para que nos la cuidara, nos acompañaron al concierto otras dos cuñadas (sólo faltó una para involucrar ese día a todas las hermanas de mi amada), tras una accidentada y lenta travesía hacia el Auditorio, llegamos ante la puerta de donde nos tocaba entrar a la sala la tercera vez que daban la tercera llamada, y una señora con cara de pocos amigos nos llevó hasta nuestro lugar justo cuando empezaba a cantar el astro español. Fue una velada agradable, el viejo Sabina demostró la potencia de su ronca voz, hizo comentarios en verso y chistes de actualidad, adaptó "al vuelo" sus canciones para complacer a su audiencia mexicana, y agradeció feliz los aplausos y las ovaciones. Llevaba un escenario colorido que cambiaba dependiendo de la iluminación, y a virtuosísimos músicos de larga trayectoria profesional a su lado. El sonido fue impecable pues entendí cada palabra de cada canción, cosa que nunca antes en un concierto me había sucedido.

El espectáculo duró dos horas y media, me percaté que el estilo de varias de las rolas de J.S. tiene algo más que un aire a mariachi. De hecho, podría cantarlas cualquier mariachi y sonarían perfectamente en su lugar. Saliendo pasamos a comprar una taza y una playera de rigor, y corrimos a recoger a nuestra beba, a quien extrañamos durante el concierto y la cual según nos contaron también nos extrañó. En cuanto estuvimos con ella se despertó y se puso de platicadora con su mamá, Y así estuvo, animada y alegre hasta que a la una y media finalmente se durmió.

22 de abril de 2010

El exilio español y longevidad de los escritores

En esta momento estoy leyendo de los ensayistas del exilio español, esto es, escritores españoles que durante la guerra civil o una vez que llegó Franco al poder tuvieron que salir por patas de su padre matrio debido a que permanecer allá constituía un considerable riesgo para su integridad física, y en la mayoría de los casos vinieron a parar a américa latina, pero sobre todo a México, porque más al sur había toda clase de guerras civiles y golpes de estado (eventos que también produjeron sus exiliados refugiados en México) mientras que aquí, existía cierta estabilidad aparente, y los intelectuales extranjeros podían encontrar empleo en la prensa o la academia y tener una vida más o menos digna. Los primeros escritores que leí se deshacen en elogios y exploraciones de las tierras, la gente y los acentos que los recibieron a su llegada. Pareciera que cuando huyeron dejaron atrás también su militancia política, si es que alguna vez la tuvieron, porque no rechazan a Franco ni sus métodos, no denuncian ni mencionan a sus muertos o desaparecidos, etc. Como que dan por concluida la lucha, y se dedican a mirar hacia el frente. Al menos así me parece en cuanto a los primeros cinco ensayistas.

Por otro lado, como en mi selección de lecturas ponen fechas de nacimiento y muerte de la mayoría de los escritores, noto que los que practican este bello oficio de las letras suelen ser longevos, el que menos vivió de los ensayistas del exilio fue Pedro Salinas con sesenta años. En el capítulo sobre la generación escindida hay muchos autores que no tienen fecha de muerte a pesar de haber nacido en los primeros años del siglo XX, pero eso es por un error: la primera edición de mi libro de texto universitario se hizo en 1997 y aunque hubo reimpresiones en 2007, 8 y 9, no le hicieron correcciones. De ese modo tenemos a un Pedro Laín Entralgo vivo, de 102 años (en realidad falleció a los 93 en el 2001), a un José Ferrater Mora con actualmente 98 años de edad (pero en realidad murió a los 79 en 1991, lo que hace aún más flagrante el error de mi selección universitaria de lecturas), y a un Julián Marías de 96 años (cuando en realidad murió en el 2005 a los 91). Como sea, excepto un par que vivieron tan sólo al rededor de sesenta años, gran parte de los escritores del siglo pasado citados en mi libro fueron por lo menos octogenarios. ¿Será que el oficio de escritor fomenta la longevidad? "Llegue a viejo, escriba."

21 de abril de 2010

Por qué el software no debería tener dueños (1 de 8)

Continúo con la tradición según la cual usaré esta categoría de "trabajo" para publicar correcciones de traducciones de textos sobre el Software Libre. El software libre es una de las ideas más importantes de nuestra época, es un movimiento en el que participan millones de programadores y usuarios a nivel mundial. A continuación el escrito titulado Por qué el software no debería tener dueños. Dejo links al original: Why Software Should Not Have Owners, así como a la traducción oficial que corrijo (¿o debería decir adapto?) más abajo: Por qué el software no debe tener propietarios.

Por qué el software no debería tener dueños

por Richard Stallman

Las tecnologías digitales de la información aportan al mundo puesto que hacen que sea más fácil copiar y modificar información. Las computadoras prometen facilitarlo para todos.

No todo el mundo quiere que esto sea más fácil. El sistema de derechos de autor le pone "dueños" a los programas de software, quienes en su mayoría pretenden privar al resto del mundo de los beneficios potenciales del software. Los «dueños» quisieran ser los únicos capaces de copiar y modificar el software que usamos.

El sistema del copyright se desarrolló con la imprenta, una tecnología usada para la producción masiva de copias. El copyright se ajustaban bien a esa tecnología puesto que sólo restringía a los productores masivos de copias. No privaba de su libertad a los lectores de los libros. Un lector cualquiera, que no poseyera una imprenta, podía copiar libros con tan sólo pluma y tinta, y pocos lectores fueron demandados por eso.

20 de abril de 2010

Despido de ñora

Me considero extremadamente quisquilloso y cuidadoso en cuanto a los asuntos relacionados con Loana. Es decir, lavo personalmente sus biberones, hago sus papillas, le cambio el pañal y la limpio a fondo, la cargo, la arruyo, etc. Sin embargo creo que su mamá tiene el doble, o el triple, si no es que más celo respecto al bienestar de nuestra hermosa enjendrita. Por lo mismo, mi amada ya lleva un rato molesta con la señora que nos viene a hacer el quehacer. Hasta hace dos semanas yo aún toleraba de buen grado las hipocresías y barbeadas de la doña esa, pero sus últimos actos de negligencia (si no es que fueron de agresión deliberada) han colmado mi paciencia.

Recién comprada una sabanita super linda y suave, y unos vestiditos preciosos, decoloró y percudió la sabanita y quemó con la plancha la ropita. Le hemos dado cobijitas a lavar y las dobla y guarda en el closet sin haberlas lavado, lo sé porque antes de usarlas las huelo, y las que fueron lavadas huelen a limpio... Le pedimos que cuando lavara las manzanas para las papillas les quitara las etiquetas con mucho cuidado y sí, se las quitó, pero junto con un pedazo de piel y de pulpa que parece que les hubieran dado una mordida.

El otro día le encargamos un momentito a Loana mientras comíamos mi musa y yo, y en cuanto la tuvo entre sus garras fue a cambiarle el pañal. No pongo en duda que la bebé se hubiera mojado, pero cuando hice el siguiente cambio encontré el pañal que ella le puso demasiado apretado, todo chueco, y misteriosamente la bebé se había rozado; no sé si fue porque no le limpió la orina o porque no le puso pomada nueva... Total que en las pasadas dos semanas me he ido haciendo de mala leche para con esa ñora y creo que el lunes la despediremos.

Me queda por resolver un dilema: ¿debo decirle porqué la corremos o bien presentarle la fachada de que nos falta dinero y por lo tanto es mejor que la dejemos ir? Supongo que la segunda opción es la buena, pues la primera equivale a regañarla, y se regaña a alguien para que corrija su actitud o rumbo, pero en el caso desta señora ya no necesita corregir nada porque si la despedimos ya no la volveremos a ver... De cualquier modo ojalá que se corrija y sea mejor en su siguiente chamba, en cuanto a la persona que la sustituirá, ya está apalabrada, esperemos que no nos quede mal porque si no, será el continuose del empezose.

19 de abril de 2010

Rezaremos por ti o por quien tú quieras

Hace no mucho vi un video en youtube titulado You May as well Pray to Aliens (o aprox: Lo mismo podrías rezarle a los extraterrestres), sobre lo estúpido de los rezos y de las esperanzas que albergan quienes rezan, y de aquellos que creen que por haber rezado se salvarán o salvaron de la muerte en algún momento o circunstancia. Son tres partes de 10 minutos, y está muy bueno porque menciona estadísticas y probabilidades, explica que, salir con vida de un cáncer por poner un ejemplo, es estadísticamente posible, y que suponiendo que todos los que hubieran enfermado de un tipo de cáncer particular hubieran rezado, y que de entre todos los enfermos fuera normal que un 1% se salvara: a) de nada les habría servido al otro 99% haber rezado y tampoco podrían solicitar la devolución de sus rezos porque ps habrían muerto, y b) aquellos dentro del 1% que sí la hubieran librado estarán convencidos de que se salvaron gracias a sus rezos, sin importar que les demostraran que ellos forman parte del porcentaje que suele sobrevivir y/o que los demás, aquellos que murieron, también rezaron.

Luego dese video vi algunos de Richard Dawkins (hablo dellos aquí) y me parecieron geniales y que me dejan pensando. Todo esto finalmente desembocó en una idea de negocio que, si para cuando tenga tiempo de ejecutarla aún nadie la ha concretado, seguramente me dejará muchas ganancias, bruajajar. Mientras tanto dejo aquí el bosquejo.

Se trata de un sitio web de rezos. Sí, supongamos que te da cáncer, y sientes que tus propios rezos no son suficientes y tu salud se deteriora (o que andas detrás de un negocio, una chica, un empleo; o que quieres que gane tu equipo el mundial; o lo que sea que creas que merece que se rece por ello), pues entonces puedes entrar a mi página de rezos, llenar un formulario en el que das tus datos y las oraciones que quieres que digan por tu causa, salud, empeño, esperanza, o lo que sea, y pagas la cuota correspondiente a tu pedido, que puede ir desde rezar sólo un padrenuestro, hasta una letanía completa con puesta de velitas en alguna milagrosa iglesia del mundo. Una vez que yo reciba el dinero, contrataré a algún devoto ardiente de fe y piedad para que vaya a hacer la diligencia, le pediré que grabe lo rezado, que tome fotos de la vela comprada y encendida, etc; y le daré una fracción de lo pagado por el cliente. El resto del dinero es para suservilleta, myself, así como el mantenimiento y la mejora del sitio web...

Sí, lo sé, yo no tengo fé, pero no la necesito, no estaría engañando a nadie, sino que estaría vinculando a quienes tienen necesidad de rezos ajenos con quienes por su necesidad económica y devoción y creencias están dispuestos a rezar por otras personas a las que ni conocen. Ya busqué en internet y hay sitios que ofrecen rezar, pero no dan garantías de que alguien lo hará, ni cobran. Supongo que es porque aún no se percatan del potencial del nicho.

18 de abril de 2010

Franqueza y obviedades peligrosas para México

Respecto de F.C. y su guerra contra el Narco, Joaquín Sabina dijo: "A mí me pareció un ingenuo bien intencionado, en el mejor de los casos. Ahora me parece un insensato,..." En realidad me parece ingenuo creer que F.C. es "bien intencionado", pero pasemos a la sensatísima conclusión del autor de la hiper-cursi Contigo: "¡que urge la legalización! Cuando se acabó con la ley seca en Chicago siguió habiendo borrachos, pero dejó de haber muertes y gánsteres. Entonces, lo que uno haga con su vida, su salud y su cuerpo no es patrimonio del Estado, sino patrimonio irrenunciable de uno mismo.”

Esos comentarios, aún cuando son vox populi y toda persona con un gramo de materia gris dentro del cráneo concuerda con ellos, y aún cuando fueron hechos por un show-man y no un representante de una nación o un estado (por lo que no pueden ser considerados ingerencistas, sino tal vez opiniones libres y personales de un particular), desataron una serie de justificaciones por parte del gobierno que más que ingenuas me parecen ridículas.

Le escribe el secretario de gobernación G.M. al cantautor español que "niega que el gobierno hubiera actuado con ingenuidad", y claro, negar es demostración suficiente de lo que se niega. Omite por completo el ejemplo mencionado por Sabina sobre la ley seca de Chicago, y defiende el combate al "crimen organizado", del cual, el narcotráfico es sólo uno, y probablemente el más pequeño, de sus cientos de diversos negocios y giros perversos. Por lo mismo legalizar las drogas no resolverá nada, no les quitará a los Criminales Organizados S.A. de C.V. una de sus principales fuentes de ingresos, ni reducirá la compra e importación de armas, ni los asesinatos de ciudadanos de a pie por parte del ejército, ni las ejecuciones ni las balaceras por zonas de influencia entre cárteles, ni nada de nada.

Es más, pensar en la posibilidad de la legalización equivale a "no hacer nada", cosa que por supuesto el gobierno no puede permitirse, porque si no luego tal vez tendrían que cobrar impuestos sobre el consumo y la exportación de la marihuana, en lugar de gastarse los impuestos que acaban de subir en comprar armas y vehículos para "hacer algo", y eso sería inaceptable.

Bah, no me consuela saber que la estupidez en este tema no es exclusiva de México, pues el vecino país del que somos patio trasero, y la mayoría de los países de la civilizadísima Europa, siguen manteniendo políticas estúpidas prohibicionistas para según esto proteger a sus habitantes, los cuales han de ser imbéciles a más no poder que no saben protegerse solos de sustancias que misteriosamente tienen gran demanda. Con lo que no sólo generan un mercado negro violento que mata a un montón de gente, sino que logran además que los traficantes adulteren sin restricciones el producto que contrabandean matando así a más consumidores gracias a la excelente protección que proporciona el gobierno al prohibir en lugar de regular y reglamentar.

17 de abril de 2010

Parecon - Parte 1 (43 de 48)

El capitalismo

El capitalismo usa la propiedad privada y los mercados. Remunera la propiedad, el poder, la productividad, y, como resultado, ha producido algunas de las mayores disparidades en ingresos y riqueza que pueden encontrarse en la historia de la humanidad. La división laboral dentro del capitalismo es jerárquica. Los capitalistas dominan a los trabajadores mientras que los coordinadores ocupan el terreno entre la mano de obra y el capital, en parte administrando en beneficio de los capitalistas y en parte intentando incrementar sus propios intereses a expensas de ambos: los capitalistas que están arriba de ellos, y los trabajadores que están por debajo.

Dentro de este amplio término hay ciertamente variaciones. Los trabajadores pueden o no tener sindicatos y otras formas de organización que les ayuden a manifestar sus preferencias, y lo mismo puede ser verdad para la clase coordinadora que puede haber amasado mayores o menores medios de acumular riquezas y poder para si misma a expensas ya de capitalistas ya de trabajadores. En su estado más opresivo, está el capitalismo degollador, de barones ladrones con poder corporativo gigante e irrestricto dominando todas las opciones y elecciones sociales. En su modo menos opresivo, existe un sistema mejorado de capitalismo llamado democracia social en el cual la fuerza laboral y los consumidores tienen un poder local y estatal considerable y lo usan para protegerse de las peores consecuencias de los mercados y la propiedad privada.

En cualquier caso, el modelo básico llamado capitalismo, por sus tendencias intrínsecas de propiedad privada de los medios de producción, divisiones laborales corporativas jerárquicas, y mercados competitivos, no sólo no facilita la solidaridad, la diversidad, la equidad y la auto-gestión participativa, sino que viola cada uno de esos valores produciendo virtualmente sus opuestos exactos. Como el tremendamente influyente economista Británico ganador del Nobel John Maynard Keynes (1883-1946) lo puso:
[El capitalismo] no es un éxito. No es inteligente, no es hermoso, no es justo, no es virtuoso, y no entrega los resultados esperados. En resumen, nos desagrada, y estamos empezando a despreciarlo. Pero cuando nos preguntamos qué poner en su lugar, quedamos extremadamente perplejos.
Reducir esa perplejidad ocupa mucho de este libro.

16 de abril de 2010

With the embarrassment (¿shame/grief?)

Hartos ya de que aquellos que nos rodean dijeran barbaridades como "hace sentido" o "por lejos", que son traducciones literales del inglés pero que en español son incorrectas y demuestran la ignorancia y poca educación de quienes las profieren; los amigos de la oficina (pero desde antes de trabajar en ella) y yo, empezamos una sutil campaña para contrarrestar la barbarie en la cual traducimos literalmente oraciones que tienen aún menos sentido, como: "me está conduciendo nueces", o "se reventó el culo trabajando", o "déjenme solo", o "no creo que fulano tenga todos sus mármoles", etc. También tenemos otra campaña en la que traducimos literalmente expresiones mexicanas al inglés, pero desa habla extensamente y con muchos ejemplos el choco; el título deste post es solamente otro ejemplo más, y "the she net" el superpost del chocos está buenísimo, "it beats me peanuts".

Otro error que he escuchado principalmente entre personas de marketing, es cuando pronuncian "target", lo hacen como si el final de la palabra fuera un "jet"... No creo que se deba a que quienes así pronuncian ignoren completamente el inglés, porque según tengo entendido son personas que hasta vivieron en los E.U. por algunos años y etc. De modo que me deja super sorprendido esa mala pronunciación, sobre todo porque no creo que digan "jet your ass over here", o "forjet it", etc.

En mi lucha en contra de estos errores el problema al que me he enfrentado es que la mayoría de los que cometen las arriba mencionadas barrabasadas, a) están por encima de mí en la cadena jerárquica y por no querer herir susceptibilidades no los he corregido frontalmente; b) ninguno le ha agarrado la onda ni ha preguntado siquiera por la campaña que mis compañeros y yo mantenemos, ni se inmutan de oir nuestras expresiones erradas, ni se dan por enterados, ni tampoco intentan corregirnos; c) a aquellos a los que les he dicho que en español es incorrecto decir que algo "hace sentido", de todas formas siguen usando esa misma expresión cotidianamente porque sus jefes la usan, y ellos tampoco quieren herir susceptibilidades y como no pueden con el enemigo se le unen.

Con lo que probablemente, y a pesar de toda la resistencia de las personas cultivadas (of course that I am one of them), las cosas empezarán a "hacer sentido" en español y dentro de no mucho todos haremos el sentido, y en las calles se hará el sentido de la circulación, pero, ¿acaso cuando algo carezca de sentido se podrá empezar a decir que eso "deshace sentido"?, ¿o "hacer" ya no tendrá como contraparte a "deshacer", sino simplemente a "no hacer"? Bah, Mundus senescit.

15 de abril de 2010

Anarquismo triunfante (13 de 36)

Cómo creamos el enredo del microcerebro

Así que la historia de los lenguajes de programación refleja directamente la necesidad de encontrar formas de comunicación humano-máquina que fueran eficientes también para transmitir ideas complejas a lectores humanos. La "expresividad" se volvió una propiedad de los lenguajes de programación, no porque facilitara los cómputos, sino porque facilitaba la cración colaborativa y el mantenimiento de los cada vez más complejos sistemas de software.

A primera vista, esto parece justificar la aplicación del pensamiento tradicional de copyright para los trabajos resultantes. Aunque involucran sustancialmente elementos "funcionales", los programas de computadora contenían características "expresivas" de importancia capital. La doctrina del Copyright reconoció la fusión de función y expresión como algo característico de muchos tipos de trabajo registrados. El "código fuente", que contenía tanto las instrucciones para la máquina necesarias para su operación funcional como los "comentarios" expresivos dirigidos a los lectores humanos, fue un candidato apropiado para el tratamiento del Copyright.

Cierto, mientras se entienda que el componente expresivo del software estaba presente solo para facilitar la elaboración de "trabajos derivados". Si no fuera por la intención de facilitar la alteración, los elementos expresivos de los programas serían completamente innecesarios, y el código fuente no sería más copyrighteable que el código objeto, el output del procesador del lenguaje, purgado de todo excepto de las características funcionales del programa.

14 de abril de 2010

Beba creciendo a todo dar

Loana hace espectacularmente bien lo que deben hacer todos los bebés, engordar y crecer y aprender a usar sus extremidades. Ahora ya se rueda sobre su costado hasta quedar casi bocabajo; sube sus piernitas y con el peso destas gira su torso hacia un lado. El problema es que se atora con el brazo que le queda abajo y no sabe impulsarse más para quedar sobre su panza. Por otro lado, si la ponemos bocabajo no sabe regresar a la posición de espaldas, supongo que sus bracitos todavía están muy débiles o que aún no sabe usarlos para empujarse. Además deso, si la levanto de las axilas y pongo sus piecitos sobre una superficie, estira las piernitas y se sostiene por algunos segundos de pie (ayudada, por supuesto, no es cosa de que azote).

Vocaliza cada vez más, con más sonidos, más fuerte, confiriéndole tonos a sus vocalizaciones que nos hacen entender a su mamá y a mí lo que le pasa y/o lo que necesita. Claro, a veces hacemos hipótesis descabelladas y resulta que no, que no es lo que pensábamos; pero en la mayoría de los casos, ante los gestos y sonidos de Loana mi musa y yo nos miramos, alguno de los dos dice lo que cree que nuestra beba tiene, y el otro confirma: "estaba pensando justo en eso", y la revisamos o le damos su biberón o la cambiamos de posición o de ropa, y acertamos (o bueno, leemos la tranquilización como una señal de nuestra hija de que acertamos).

El sábado compramos una licuadora para hacer las papillas de verduritas con pollo, antes de llegar a los seis meses, Loana ya se está comiendo al medio día un licuado de calabaza-chayote-zanahoria-y/o-papa con caldito de pollo. Claro, además de sus papillas de fruta en la mañana y la tarde. Cada vez incrementamos el menú según instrucciones del pediatra, que me parece bastante bueno y experimentado.

13 de abril de 2010

Un revistero desbordante

El revistero del baño está lleno de publicaciones (periódicas y no) respecto de bebés: Mi bebé y yo, El bebé, guía de cuidados del Seguro Social, Cómo cuidar a su bebé de la Dra. Miriam Stoppard, etc. Ya saqué de ahí el de La conquista de la felicidad de Bertrand Russel, pues ya lo leimos tanto mi musa como yo (está buenísimo, quiero leerlo en inglés), el pobre libro estaba siendo maltratado por los demás impresos que manipulamos cotidianamente. Dentro del revistero está también la selección de lecturas de Ensayo español del siglo XX de la Unam.

En el último post de "lecturas" comenté sobre las dos primeras unidades de dicha selección: Hacia un concepto del ensayo español y Generación del noventa y ocho (1898). Las siguientes dos unidades (tercera y cuarta) son sobre: Novecentismo español y La generación escindida; en la tercer unidad autores como Ortega y Gasset, Manuel Azaña y Américo Castro, entre otros, escriben sobre la generación del 98, sobre el interiorismo resultante de las derrotas españolas en sus últimas colonias americanas, y sobre un patriot(er)ismo que busca renovarse y generar una identidad española orgullosa... La cuarta unidad se titula La generación escindida, que también es conocida como la generación del treinta y seis (1936), justo después de la guerra civil. Los textos de dicha unidad no son tan patrioteros como los del novecentismo, sus autores se retraen y analizan a los de las generaciones anteriores (y cómo podría ser de otro modo), destacan menciones al paisajismo-paisanismo-costumbrismo en/de España, un distanciamiento de las formas exaltadas, así como un enfoque principalmente literario (análisis del quijote, etc) y un toque existencialista.

Desta última generación es Julián Marías, al final de la unidad viene un texto dél que quiero leer ya, sobre todo porque en algún capítulo de Rayuela Perico Romero y Horacio Oliveira tienen una discusión sobre dicho autor, y sé que los escritores citados o mencionados por mis narradores favoritos son dignos de lectura (ya si los desdeñan, como si los alaban, para ver por cuenta propia los méritos que mis ídolos tomaron en cuenta al emitir sus comentarios al respecto).

12 de abril de 2010

Hago mi trabajo en Software Libre

Hace nueve posts terminé de publicar una serie en siete fragmentos titulada El software libre y los manuales libres, que fue una corrección de la traducción de otro texto. Me ha dado por publicar en la categoría "trabajo" textos relacionados con el software libre, y eso se debe a que trabajo todos los días en linux construyendo aplicaciones para la www, a que creo en la superioridad moral del software libre respecto de las opciones privativas, así como en la superioridad técnica del modelo abierto de desarrollo permitido y promovido por el software libre. Además, no quiero comentar específicamente sobre mi empleo porque mis jefes podrían tener temores infundados de que fuera a divulgar secretos internos de la compañía y tratarme con recelo, y no me gusta que me traten con recelo. Y también porque me es más fácil corregir una traducción ya hecha (esto es, hacerla de corrector de estilo), que aventarme otra más (ya estoy haciendo la de Parecon y la de Eben Moglen) from scratch.

De modo que seguiré trabajando del mismo modo: la próxima corrección de estilo de una traducción de un texto sobre el software libre empezará a salir en el siguiente post de "trabajo", con título: "Por qué el software no debería tener dueños". Ojalá que lo disfrutes, estimado lector.

11 de abril de 2010

Las redes sociales, ¿contra el resto de la web?

Hace poco los directores del área a la que pertenezco en la oficina se encontraban angustiados porque en una de sus montones de juntas cotidianas otro directivo les dijo que las páginas de internet ya estaban obsoletas frente a las redes sociales, que ya no tenía sentido hacer sitios de internet porque lo de hoy era generar un perfil en facebook y/o twitter y ponerse a hacer ruido para ganar miles de adeptos. Que los blogs, el mail, las páginas web, el messenger, los erreeseeses (rss's), etc, iban a ser gradual pero inexorablemente sustituidos por twitter.

Lo anterior es un temor bastante tonto que empieza a permear en las capas gerenciales de compañías dedicadas a hacer cosas en internet. Hacer una nueva red social está bastante difícil, tal vez tendría que ser temática, o tal vez tendría que hacerle guerrilla a las redes sociales de hoy en día, pero si google, que es el gigante que es, no ha logrado levantar al buzz, su propia red social, ¿cuántos órdenes de magnitud más difícil lo será para empresas con recursos limitados y personal no tan genial como el contratado por google?

Es curioso que quienes se dedican a la web quieran competir en un terreno en el que obviamente los que ya acapararon el mercado tienen tanta ventaja que intentarlo siquiera represente una pérdida garantizada. Todos aquellos que se dedican al desarrollo web han tenido el sueño guajiro de hacer el siguiente facebook, el siguiente twitter, o de copiarlo y tropicalizarlo y volarse al menos el pedazo de mercado correspondiente al país de donde son. Creo que la mentalidad debería de ser más bien estudiar el potencial de las redes sociales, y luego integrarlas inteligentemente con los sitios que uno haga.

Ni los sitios web, ni el mail, ni el chat, ni los blogs, ni casi ninguna otra herramienta de internet va a desaparecer por culpa de las redes sociales. ¿Por qué?, pues porque son aplicaciones complementarias y para usos distintos cada una. La televisión a color vino a reemplazar a la que era en blanco y negro pero porque las dos servían para lo mismo, recibir una señal y trasmitirla por la pantalla; sin embargo cuando el medio es diferente no sustituye al otro, e.g. cuando llegó la tv no sustituyó a la radio. En este caso un blog es muy distinto de un microblog como twitter, una página corporativa con la imagen de una compañía es indispensable se esté o no en facebook, enviar un mail es un tipo de comunicación específica y privada entre personas, nada que ver con myspace... O sea, son herramientas tan distintas que dudo mucho que los sitios web se vuelvan obsoletos.

O sea, Las redes sociales VS las páginas web: falso debate porqué no son cosas enfrentadas sino más bien complementarias.

10 de abril de 2010

Cotidianidad cargada igual a ejercitar más la voluntad

En este momento tengo trabajo para aventar parriba, en la oficina los jefes opinaron que vamos muy lentos así que nos presionaron un poco más. No que vayan a obtener mejores resultados, pero al fijar los objetivos para los viernes nos obligan a quedarnos un poco más de tiempo los demás días de la semana para terminar pendientes que de otro modo podrían esperar un poco más.

Los mismos jefes me encargaron, aparte y para hacer en mi tiempo libre (por fuerita, suele decirse), otros sitios web pequeños muy interesantes. Además están otros dos desarrollos en puerta, un portal para el INE (Instituto Nacional de Ecología) que es bastante seguro aunque se concretará en un mes más o menos, y otro menos seguro para la feria de la ciudad, evento que acaba de terminar pero para el que solicitan un CD memoria con toda la info que generaron en su página web.

Por si eso fuera poco, mi papá ya quiere que concluyamos su sitio, además de otro para otra línea de productos que ya está comercializando, así como otro más de astrología. Ahora bien, de todo lo anterior, excepto de mi empleo, todavía no veo ni un centavo ni lo veré en un largo rato; falta que se concrete todo, que termine los trabajos, los entregue y me los paguen, o sea que ¡¡¡uuuuuuuuuu!!!.

Pero eso no es todo, Loana requiere atención materno-paterna las 24 horas del día, estoy a dieta, y con la tenencia de mi coche y la compra de pañales-fórmula-toallitaslimpiadorasdetraseros-y-aguapurificada, mis gastos han estado ultimamente por encima de mis ingresos. Por lo que he agotado hasta la más escondida reserva que tenía y ahora ando sin un quinto en el bolsillo. Buena la hacemos si se me presenta una emergencia (toco madera).

Creo que leí por ahí que la voluntad es un recurso limitado. Que cuando te embriagas, te drogas, o estás cansado, eres más indulgente contigo que cuando tienes toda tu energía y/o conciencia: la voluntad se debilita. El hecho de que sea limitada también influye en el reparto que uno hace de las activiades cotidianas, porque puedo darle biberón y cambiar a Loana cada que sea necesario, pero eso va en detrimento de otras actividades, etc. Por fortuna (o desgracia, com quieran verlo), no puedo darme el lujo de disminuir mi voluntad en ningún frente. Algunas veces soy indulgente y juego farmville en facebook, mea culpa...

9 de abril de 2010

Nuestra irredimible especie

Ayer supe de un caso espeluznante. En julio de 2007, Reuters perdió a un reportero y a su chofer en Irak debido a fuego norteamericano. La dirección de la agencia de noticias de origen alemán pidió la información correspondiente, utilizaron todos los recursos legales para obtener más datos, porque querían saber qué le había pasado a sus empleados, sin respuesta satisfactoria. Los gringos respondieron que los pilotos de los helicópteros que habían matado a los periodistas habían respondido a fuego enemigo y habían actuado apropiadamente según sus reglas de enfrentamiento (ROE - Rules of engagement).

Acaba de salir un video en wikileaks, un sitio que publica toda la información que se filtra de los centros estadounidenses de poder, en el cual desde el helicóptero se graba la acción en que murieron los reporteros. No sólo se nota que el equipo que llevaban los empleados de Reuters era fotográfico (y no armas), sino que nadie de entre los del grupito que los escoltaba disparó un sólo tiro hacia los gringos. Por si eso fuera poco, en la grabación se ve que una camioneta negra se detiene para intentar ayudar a los que quedaron heridos después de las primeras ráfagas gringas; los helicópteros también la desbaratan a tiros. Pero eso no es todo, el chofer de la camioneta que se detuvo a ayudar llevaba en ella a la escuela a sus hijos, los cuales fueron gravemente heridos en la acción... Por supuesto el papá también fue asesinado en el "incidente".

Ver ese tipo de grabaciones me hace sentir un coraje tremendo contra los que inician guerras y contra los que las ejecutan y contra los que las apoyan y contra los que las permiten y toleran. Leí algunos comentarios de gringos pro-guerra que me dieron un asco infinito, eran del tipo: "pues quién manda a esos terroristas a llevar niños a la acción"; o bien: "el ejército está ahí para acabar con los insurgentes, ¿por qué regañarlos por hacer su trabajo?"; o también: "esas ratas merecen muertes más lentas".

Yo solía creer que a pesar de todas las barbaries que la humanidad ha perpetrado contra las otras especies y contra sí misma, el arte, la cultura y la filosofía, de algún modo redimían al homo-sapiens-sapiens. Ahora dudo profundamente de esa creencia, si hubiera un Dios y llamara a cuentas hoy mismo a nuestra especie, incluso poniendo a Mozart y Michel Angelo, hasta con los mejores jazzistas y escritores del mundo, tomando en cuenta desde los presocráticos hasta Umberto Eco, y hasta con el famoso amor-que-todo-lo-vence, la balanza se inclinaría del lado que nos condena a desvanecernos en el olvido como un mal sueño que se disipa en los primeros segundos de vigilia. Un mundo en el que pasa lo que en ese video no es el que yo quisiera heredarle a mi pequeña y divina Loana.

8 de abril de 2010

Parecon - Parte 1 (42 de 48)

El resultado de dichos puntos es que el pie invisible opera a la par con la mano invisible. El grado de ineficiencia distributiva debido a las externalidades es significativo. La esperanza de correcciones "Pigouvianas" es una fantasía psicotrópica. Los precios relativos divergen aún más ampliamente de las mediciones acertadas de los costos y beneficios sociales totales cuando los consumidores ajustan sus preferencias endógenas para beneficiarse individualmente de las tendencias inevitables del mercado. En suma, los tratos convenientes con beneficios mutuos para comprador y vendedor no deberían confundirse con la eficiencia económica. Cuando algunos tipos de preferencia son consistentemente sub-representados por causa de los costos de las transacciones y hay problemas de "vividores" (en donde algunos obtienen beneficios de los bienes públicos sin pagar por ellos), cuando agunos recursos son consistentemente sobre-explotados porque son comunes en vez de propiedad privada, cuando los consumidores ajustan sus preferencias a los sesgos del sistema de precios, y cuando los lucros o excedentes vienen tanto por un mayor poder como por mayores contribuciones, la teoría predice que los intercambios de libre mercado resultarán en una mala distribución de recursos. Y cuando los mercados no son perfectos (condición que siempre se cumple), y no logran alcanzar un equilibrio instantáneamente (lo cual siempre pasa), los resultados son aún peores.

Mientras que los mercados son hoy en día ampliamente alabados, tal vez antes de seguir adelante deberíamos señalar que no somos los únicos detractores del mercado. Consideremos las observaciones del economista de E.U. ganador del premio Nobel Robert Solow de que:

Pocos mercados pueden haber sido alguna vez tan competitivos como aquellos que florecieron en Inglaterra en la primer mitad del siglo XIX, cuando infantes fueron deformados mientras trabajaban duramente hacia sus tempranas muertes en las minas y fábricas del Black Country. Y no faltan ejemplos hoy en día para confirmar también el hecho de que los mercados funcionales no tienen tendencias innatas a promover la excelencia de ningún tipo. No ofrecen resistencia a fuerzas que llevan hacia un descenso a la barbarie cultural y la depravación moral.
O la observación del economista de E.U. ganador del premio Nobel James Tobin de que:
El único resultado seguro [de la Reaganomía de libre mercado] ... es la redistribución de los ingresos, la riqueza, y el poder, del gobierno a las empresas privadas, de los trabajadores a los capitalistas, y de los pobres a los ricos.
O la observación del novelista estadunidense Edward Bellamy (1850-1898) de que:
De acuerdo a nuestras ideas, comprar y vender es esencialmente anti-social en todas sus tendencias. Es una educación en el egoísmo a expensas de los otros, y ninguna sociedad cuyos ciudadanos sean entrenados en tal escuela puede elevarse por encima de un muy bajo grado de civilización.
O el reciente comentario del archi-mercadólogo economista estadunidense ganador del Nobel Milton Friedman de que:
El mayor problema que enfrenta nuestro país es la separación en dos clases, aquellos que tienen y aquellos que no tienen. Las crecientes diferencias en ingresos entre aquellos calificados y los menos calificados, entre los educados y los no educados, representa un peligro muy real. Si esa grieta sigue ensanchándose, vamos a estar en terribles problemas. La idea de tener a una clase de personas que nunca se comunica con sus vecinos --aquellos mismos vecinos que asumen la responsabilidad de proveer a sus necesidades básicas-- es extremadamente desagradable y desalentadora. Y no puede durar. Tendremos una guerra civil. En verdad no podemos permanecer como una sociedad democrática y abierta, si estamos divididos en dos clases. A la largta, ese es el mayor y único peligro.
Un resumen de nuestros descubrimientos respecto a las ineficiencias del mercado es que las propiedades distributivas, de incentivos, y cibernéticas de los mercados tienen una penetrante inclinación en contra de descubrir, expresar, y desarrollar necesidades que requieran actividades sociales en lugar de individuales para lograr satisfacciones. Los mercados no proveen información concreta acerca de cómo las decisiones de las personas afectan los prospectos de vida de otros y viceversa. Ni siquiera proveen resúmenes certeros de los beneficios y costos sociales asociados con lo que las personas deciden hacer puesto que los mercados estiman erradamente las externalidades --y las externalidades son la regla y no la excepción. Las distribuciones reales hechas por medio del mercado sub-abastecen bienes y actividades sociales, y sobre-abastecen bienes y actividades individuales. Los mercados establecen incentivos para que los individuos se alejen de las necesidades que requieren comunicación coordinada socialmente y acentúan necesidades que pueden ser alcanzadas individualmente. Es más, los mercados recompensan la conducta competitiva y penalizan la conducta cooperativa.

En suma, los mercados no sólo erosionan la solidaridad, sino que también cobran mal sistemáticamente a los compradores lo que hace que con el tiempo las preferencias individualmente racionales que desarrollan las personas se combinen con los sesgos inherentes a la distribución de mercado para dar resultados cada vez más alejados de aquellos que hubieran maximizado las satisfacciones humanas. Y encima de todo, los mercados generan enormes desigualdades económicas, influencias en las tomas de decisiones severamente distorcionadas, y división y mando de clases. Al final, los temores de los críticos "utopistas" que denuncian los efectos enajentantes socialmente de los mercados se demuestran más certeros que las promesas de los llamados economistas "científicos" acerca de que los mercados son instituciones de distribución ideales. Respecto a los mercados, el abolicionismo nos parece una actitud apropiada.

7 de abril de 2010

Mexico City Emergency Reality Shows

Durante el periodo de semana santa estuvimos en alerta roja en casa porque anunciaron que harían reparaciones en el sistema de abasto de agua Cutzamala y nuestra guarida está en una de las zonas que según esto iban a ser de las más afectadas por la carestía del líquido vital. En el edificio en que vivimos hay una sisterna de buenas dimensiones por lo que no tuvimos problemas, pero por si acaso mi amada previno posibles desastres de desabasto y compró y rellenó con anticipación unos bidones de 80 litros, los cuales hemos ido vaciando para limpieza y otras tareas domésticas tras concluir la angustiante emergencia.

Al final gracias a un artículo de prensa que tuve que buscar, me enteré que terminaron las obras de mantenimiento antes de lo previsto, pero no sé ni cual es el estatus actual, ni si habrá más interrupciones al suministro próximamente, ni casi ningún otro detalle... y mi ignorancia al respecto no se debe a falta de interés, porque he buscado más información, sino a que los medios masivos no suelen propagar noticias en las que todo salió según lo planificado.

Así que se me ocurrió lo siguiente: ¿Que pasaría si se televisaran, si se hiciera una especie de reality shows, con cobertura de días (los que duraran los eventos), de las reparaciones críticas de la ciudad? Omitamos la respuesta obvia de que nadie vería esos programas por aburridos, porque además, dado el suficiente amarillismo creo que muchos estarían pegados al televisor dando seguimiento al drama del que también ellos forman parte.

Supongamos que por ejemplo lo del Cutzamala se hubiera anunciado como un evento con un 40% de riesgo de salir mal, con lo que se hubiera puesto en peligro indefinidamente el suministro de agua a toda la capital, pero impostergable porque de no llevarse a cabo el riesgo de desabasto hubiera sido del 70%. A continuación que se anunciara la cobertura en vivo del drama urbano: "vea, las reparaciones al sistema Cutzamala, no se pierda este momento crítico en la vida de la ciudad de México, etc".

Finalmente, que se hiciera un programa entretenido en el que se intercalaran momentos críticos en que maquinaria pesada colocara tubos gigantes en su lugar y equipos de hombres conectaran entre sí dichos tubos sin descanso, con entrevistas a participantes de distintos niveles (obreros, ingenieros, personal de logística, transportistas, vecinos del lugar, etc), con explicaciones dadas por expertos acompañadas de maquetas y gráficos de computadora, todo dirigido por un conductor (o grupo de conductores) que le pusiera el suficiente dramatismo al desarrollo de la acción. Tal vez hasta con un problema planificado (un tubo roto por un accidente, gente corriendo, gritos de pánico, angustia por la espera de la refacción por llegar...), para que los televidentes se emocionaran y subiera en ciertos momentos el rating, etc.

Al final final final, el conductor agotado cantaría las glorias de la administración del defe, de cada nivel de la cadena de mandos, de las decisiones acertadas, y daría gracias a Dios porque todo salió bien. Con uno de estos programas que tuviera suficiente éxito entre la audiencia local (y entre la del interior, con trasmisión vía youtube), se podría vender publicidad y hacer redituable el concepto.

6 de abril de 2010

Anarquismo triunfante (12 de 36)

Un segundo enfoque, ilustrado característicamente por el lenguaje COBOL (que significa COmmon Business Oriented Language, --Lenguaje Común Orientado a Negocios), era hacer que el programa en sí se pareciera a una serie de instrucciones en lengua natural, escritas con un estilo oscuro pero en teoría legible para humanos. Una línea de código de COBOL podría decir, por ejemplo, "MULTIPLY PRICE TIMES QUANTITY GIVING EXPANSION” (multiplica precio veces cantidad dando expansión). En un principio, cuando los expertos del Pentágono y de la industria comenzaron el diseño conjunto de COBOL en los primeros años de la década de 1960, este enfoque parecía el más prometedor. Los programas de COBOL aparentemente se documentaban a sí mismos, permitiendo tanto el desarrollo de equipos de trabajo capaces de colaborar en la creación de programas grandes, como el entrenamiento de programadores que, aunque eran trabajadores especializados, no necesitaban comprender la máquina tan íntimamente como los programas de ensamblador. Pero se eligió erróneamente el nivel de generalidad con el cual estos programas se documentaban a sí mismos. Una expresión más comprimida y en formato de fórmula de los detalles operativos, como por ejemplo, “expansion = precio x cantidad”, resultaba más conveniente incluso para las aplicaciones financieras y de negocios, en donde tanto los lectores como los escritores de programas estaban acostumbrados a expresiones matemáticas, mientras que los procesos de describir tanto las estructuras de datos así como un más amplio contexto operacional del programa, no se volvían innecesarios, no obstante la verbosidad del lenguaje en que los detalles de la ejecución estaban especificados.

Por consiguiente, para el final de esa misma década los diseñadores de lenguajes comenzaron a experimentar con formas de expresión en que la mezcla de los detalles operacionales y de la información no-funcional necesaria para la modificación o reparación, era más sutil. Algunos diseñadores eligieron el camino de los lenguajes altamente simbólicos y comprimidos, en los cuales el programador manipulaba los datos de manera abstracta, de modo que "A x B" podría significar la multiplicación de dos enteros, dos números complejos, dos enormes arreglos, o cualquier otro tipo de dato capaz de algún proceso llamado "multiplicación", para ser llevada a término por la computadora con base en el contexto de las variables "A" y "B" al momento de la ejecución [12]. Puesto que este enfoque resultó en programas extremadamente concisos, se pensó, que el problema de hacer código comprensible para aquellos que luego buscarían modificarlo o repararlo se había simplificado. Al esconder los detalles técnicos de la operación de la computadora y enfatizar los algoritmos, se podían inventar lenguajes que fueran mejor que el inglés u otras lenguas naturales para la expresión de procesos paso a paso. Los comentarios serían no sólo innecesarios sino distractores, tal como las metáforas usadas para comunicar conceptos matemáticos en inglés logran más confundir que esclarecer.

12. Este, debo decirlo, fue el camino que siguió la mayor parte de mi investigación y desarrollo, en gran parte relacionado con un lenguaje llamado APL ("A Programming Language" --Un Lenguaje de Programación) y sus sucesores. No fue, sin embargo, el enfoque finalmente dominante, por razones que serán expuestas a continuación.

5 de abril de 2010

Turisteando por la ciudad

El jueves santo fuimos al turibús que sale en frente del Auditorio Nacional. Íbamos en bola, la familia de mi musa, mi musa, mi musita, y yo. Llegamos al cuarto para la una y nos formamos en una fila kilométrica para enterarnos después de 20 minutos bajo el rayo del sol (durante los cuales Loana permaneció a la protectora sombra de una sombrilla, recibiendo la brisa que afortunadamente soplaba en ese momento) que ya no había boletos para el de las trecetreinta y que teníamos que comprar lugares para salir a las catorce. Los asientos costaron 145 pesos cada uno, lo que se me hizo un abuso porque no incluían servicios a bordo.

Como faltaba aprox una hora para irnos fuimos al centro cultural del bosque, atrás del auditorio, a sentarnos en unas bancas con sombra, pero a una de las familiares le dieron ansias porque pensó que también habría fila para subir y regresamos rápidamente a hacer presencia debajo del cálido chorro luminoso que nos dejó a todos bañados y olorosos (además acabé con el rostro, el cuello y los antebrazos acamaronados, de tanta luz refrescante que recibí). Llegó el vehículo, nos subimos, nos entregaron unos audífonos para oir la descripción de los lugares donde pasaríamos, en seis idiomas (bueno, había seis opciones a elegir, no que lo narraran simultáneamente en seis lenguas en la misma pista de audio). Apenas entramos al turibús Loana fue víctima de un súbito ataque de somnolencia que la dejó fuera de combate y no le permitió disfrutar de la hermosísima ciudad de los palacios.

El tour duró dos horas, Auditorio, Reforma, la Condesa, la Roma, Reforma, la Alameda, Bellas Artes, Reforma, Chapultepec, Periferico, Reforma y Auditorio. Mis audífonos dejaron de funcionar a mitad de la Condesa, me di cuenta porque los de mi musa seguían dándole datos indispensables para ganar un juego de Maratón, y ella me hacía comentarios al respecto que yo apenas podía entender. Me pasó uno de sus auriculares y al poco rato también dejó de funcionar, con lo que entendí que el del problema era yo y mejor disfruté del viaje sin mayores descripciones. Al bajar vi pintada en el rostro de todos una mueca de aburrimiento que contradecía las afirmaciones de que el paseo había estado buenísimo y/o muy interesante. Yo me reservé el derecho a opinar, pero mi opinión se resume en el siguiente enunciado: no vuelvo a subirme a una desas madres ni de a gratis.