31 de mayo de 2009

Matar al deseo con su objeto

La analista me dijo que no había explicado porqué abandono, sino cómo lo hago. Qué secuencia de acciones me llevan desde un punto A en que emprendo algo hasta un punto B en el que lo dejo de hacer, pero no porqué hago lo que hago que me autosabotea y me impide concretar. Luego me habló de hábitos como el de capturar mis gastos o el de escribir a diario, y de cómo si bien son actos "concretos" no tienen como finalidad alcanzar ninguna meta final, ningún beneficio tangible a corto o mediano plazo. Me ofendió un poco que desvirtuara esas acciones sin objetivo materialmente concreto y a plazo fijo, porque hay muchas actividades en que una vez iniciadas nunca acaba uno de aprender y de crecer en ellas. Pero de momento las dejo de lado (sin pretender dejarlas de hacer ni sólo día), para enfocarme en ese "porqué" que no respondí.

Muy bien, de las actividades que yo elegí, y que tenían un plazo fijo. De letras hispánicas por ejemplo, con sus clases una vez a la semana, sus lecturas y trabajos entregables, sus exámenes, su tesis y su graduación. Si me sé con la madera, la cultura y la capacidad: ¿por qué no le seguí?, ¿por qué no la terminé?. No fue porque me sintiera superior a mis compañeros o maestros, no fue porque me sintiera incapaz o indigno. En la sesión de la semana antepasada la Dra. me dijo que estaba yo enamorado del discurso (como si no fuera digno de enamorarse dél), tras una breve conversación de síntesis que se dió después del diván le dije que me daba la impresión de entrar dentro desa categoría definida como histeria, pero no con la acepción se usa popularmente (para designar una alteración tremenda del estádo de ańimo), sino como me la había platicado una amiga también psicóloga: con la historia de un niño que primero jalaba con entusiasmo una cuerda al final de la cual estaba atado un carrito (su objeto del deseo) y conforme éste se acercaba el niño se angustiaba, hasta que en algún momento dado, mejor dejaba de tirar de la soga y se ponía a llorar (ya no estoy muy seguro del final).

Noté que la mención de dicha historia le despertó varias emociones a la Dra, se entusiasmó y me platicó más facetas de la histeria, como algo fascinante y, desde el punto de vista del análisis, sumamente denso y fructífero. En efecto, lo que sucede ahí es que uno está enamorado del deseo, no del objeto del deseo, lograr obtener dicho objeto supone la muerte del deseo, y por lo tanto es mejor abandonar la persecución y mantener al deseo intacto. Pero eso supone algo más profundo, algo más turbio, algo más íntimo... ¿Creo yo que de verdad el objeto no es importante?, ¿No será que al rechazarlo (por matar este al deseo) también esté rechazando alguna parte de mi ser?, ¿Que en realidad tenga miedo?, ¿Que en realidad no crea en mi capacidad para poseer al objeto? Hoy mi exploración se queda aquí, al borde (pero, ¿al borde de qué?). Otra tarea que me dejó fue preguntarme por qué escribo, el por qué de los temas que elijo, y esa trataré de responderla en otra entrega.

30 de mayo de 2009

¿Ser asceta sin serlo tanto?

El sábado pasado me compré una báscula para pesarme y monitorear el descenso de kilos durante los próximos meses. El peso reflejado ahora es 20 kilos superior al que recuerdo haber tenido en mi juvenil mejor momento, esto es, en aquel punto de mi tiempo en que la imagen que me reflejaba el espejo me hacía sentir seguro y capaz de ligarme prácticamente a cualquier chica que se me parara enfrente. Curiosamente en ese entonces mi ideal eran cuatro kilos menos a los que pesaba y me sentía gordo, pero ahora creo que esa ya era una exageración. ¿Será una exageración bajar 20 kilos a estas alturas?

Hoy supe de un general gringo al que designaron como el comandante en jefe de las operaciones en Afganistán, un tal Lt. Gen. Stanley A. McChrystal, que según cuentan es un asceta más que espartano de hueso colorado: duerme un par de horas por día, hace ejercicio de manera estúpida, consume una comida frugal una vez al día "para no aletargarse", y mantiene un nivel de actividad que me parece imposible, al menos sin drogas de algún tipo. Pero no, cuentan que este ejemplar de hierro no se mete nada; el autor del fotoblog bagnewsnotes lo compara con el general que se vuelve loco en la genial Dr. Strangelove de Stanley kubrick; por lo que no creo que contamine con nada sus precious bodily fluids.

Ahora bien, no sé es si quiero llegar a ese grado de obsesión, digo, controlar algunas facetas controlables de la vida cotidiana es algo hasta cierto punto sano, Savater habla de la templanza como una cualidad (o virtud) en declive, y me parece grandiosa la defensa que hace de los distintos placeres de la vida como actividades que quién se sabe medir reivindica, contra el modo en que las desvirtuan los que no saben ponerse límites, o lo que se alejan o abstienen completamente dellas. Mi intención es mantener bajo control algunos placeres "peligrosos", para poder seguir disfrutando dellos por mucho tiempo más, no tratar de engañarme y negarles el estatus de placeres que tienen, para convertirlos en una especie de enfermedad de la que cuidarme. Adicionalmente, entiendo que los y las generales gringos(as) de ese nivel no tienen familia ni relaciones interpersonales íntimas, todo sea por la patria. Yo como no soy ningún patriota puedo darme el lujo de "aletargarme" un poquito.

29 de mayo de 2009

Tarde del viernes reflexiva

Esta noche suena Bach, mi musa se rie mientras conversa por teléfono, y la oscuridad enmarca mi escritura en esta pantalla luminosa. Vengo del baño, de leer, de fumarme mi cigarro deste día, de ideas geniales que brotaron del mantra lector y (aunque me haya prometido no hacerlo) fueron olvidadas mientras otras ideas sugeridas por el texto fueron llegando. Recuerdo vagamente una que me hacía querer poner en el blog pedazos o citas de lo que actualmente leo, para lo cual tendría que cambiar el lugar de mi práctica y traerme el libro a la mesa de la cómpu; así como otra idea según la cual me las ingeniaría por medio de un no tan macabro plan para acabar la carrera con la ayuda de mi hermana. (La llamé inmediatamente después de terminada la oración anterior).

Pero también otro orden de ideas, superpuestas a las que milagrosamente acabo de recordar, una dellas tiene que ver con mi mención de la presencia en una conversación con Absorto. Otra con seguirme preguntando sobre mi falta de concreción (a lo que mi mente parecía responder: no preguntes, mejor concreta), y otras ocurrencias de las que ahora sí, ineludiblemente, ya no me acuerdo.

Recordé toda esas irrupciones mentales a mi lectura sólo porque como mi amada conversaba por teléfono, saliendo destar en el trono vine directamente al otro trono, este donde tengo mi panel de control para volar por el cyberespacio (y modificarlo). Si ella hubiese estado disponible para mí, yo me hubiera puesto a conversar con ella, tal vez le hubiera comentado de las genialísimas ideas que me llegaron, o quizá no... Es extraño, a veces siento que podría no compartir con ella, que me bastaría saberla sonriente y contenta para ponerme a hacer 'mis cosas'. Pero en muchos momentos estar con ella es tan rico que no me importa tanto dejar esas 'mis cosas' para más tarde. Y luego me pregunto que por qué no concreto...

28 de mayo de 2009

Parecon - Parte 1 (7 de 48)

Estructura de clases

Otra forma de ver los tipos de economía es por cómo sus instituciones dividen generalmente a las personas en grupos opuestos. Claro que en cualquier economía habrá diferencias en las circunstancias precisas que dos actores económicos cualesquiera tengan respecto a las instituciones económicas. Tú tienes un trabajo; yo tengo otro. Tú trabajas con esas herramientas; yo trabajo con estas herramientas. Tú tienes tal y tal ingreso; yo tengo este y este otro ingreso. Sin embargo dentro del espectro del sinnúmero de circunstancias precisas diferentes repartidas a cada uno y a todos los actores, las instituciones económicas también pueden diferenciar a las personas en circunscripciones relativamente grandes cuyos miembros comparten ciertas circunstancias críticas diferentes de aquellas compartidas por otras grandes circunscripciones. Respecto de la economía, llamamos clases a tales circunscripciones diferentes, donde una clase es un grupo de personas las cuales por las posiciones que ocupan de cara a la producción, distribución, y consumo, tienen unas circunstancias, unos intereses materiales y unas motivaciones que por ser suficientemente similares nos permiten hablar útilmente acerca de sus condiciones de grupo y tendencias de grupo como opuestas a las condiciones de grupo y tendencias de grupo de otras clases que a su vez comparten circunstancias, intereses, y motivaciones diferentes.

Por supuesto que no todos en una clase económica tienen exactamente la misma situación o las mismas inclinaciones que todos los demás en esa clase. Los albañiles van a lugares de trabajo diferentes de los frecuentados por los meseros. Los capitalistas de farmacéuticas poseen propiedades diferentes que los capitalistas de automotrices. No obstante, el foco del análisis de clases es que las circunstancias y condiciones que todos en una clase tienen en común son suficientemente extensas y sus implicaciones para los comportamientos de las personas son suficientemente importantes como para que sea útil resaltar a la clase colectivamente al tratar de entender las dinámicas en general de la economía.

Así ¿qué divide a las personas en clases? Como cualquier economista concuerda, el tener fundamentalmente diferentes relaciones de propiedad ciertamente divide a las personas en diferentes clases. La Historia muestra que la propiedad afecta dramáticamente las pretensiones que se tienen sobre el producto social, el impacto que se tiene en las decisiones económicas, y los intereses y motivos habidos. Así, en una sociedad capitalista las condiciones compartidas por todos los que poseen algunos medios de producción --ya sean farmacéuticas, automotrices, o compañías de computadoras-- le dan a los capitalistas circunstancias y motivaciones suficientemente similares como para que hablemos útilmente acerca de su comportamiento (en pos del lucro) colectivo. Fue el ser dueños de algunos medios de producción lo que hizo a los Rockefeller capitalistas y son sus motivos (buscar lucrar) compartidos que la propiedad induce en los capitalistas lo que provocó que Adam Smith escribiera que "las personas en el mismo comercio suelen juntarse, incluso para la alegría y diversión, pero la conversación termina en una conspiración en contra del público, o en alguna argucia para subir los precios".

Aún así, a pesar de su importancia, la propiedad no es la única base posible para la división de clases. En cambio, la división del trabajo de una economía o las implicaciones de rol de sus instituciones de distribución podrían también llevar a que algunas personas compartieran condiciones sistemáticamente diferentes de aquellas compartidas por otras, incluso con la misma situación de propiedad.

En el capitalismo, virtualmente cada analista serio llama a aquellos que poseen los medios de producción "capitalistas" y a aquellos que no son dueños de nada excepto su hablidad para trabajar y que deben vender esa habilidad por un salario que es pagado por hacer un trabajo repetitivo y sumiso, "trabajadores". Pero si vamos más allá de la propiedad como base para la división de clases, también podemos identificar a una "clase coordinadora" compuesta de aquellos que reciben un salario por sus labores pero que, a diferencia de los trabajadores, efectúan trabajos que tienen una influencia considerable sobre su propia situación económica y la de otras personas y sobre sus empleos que los empoderan debido en gran medida al monopolio de ciertas habilidades y conocimientos. Y podemos notar que la clase de trabajadores como los ensambladores, meseros, camionesros, intendentes, y la clase de los coordinadores como los gerentes, doctores, abogados, e ingenieros, se ven unos a otros con intereses opuestos. Y que cada uno también se opone a los capitalistas, aunque de modos distintos.

27 de mayo de 2009

Incongruencias de la congruencia

Cuando tomaba clases de piano sabía que si no practicaba diariamente, por lo menos una hora al día, mi habilidad no crecería, que habría ciertas piezas que se mantendrían fuera de mi alcance, y que nunca alcanzaría altos niveles de improvización. Porque como en todas las cosas, para improvisar y mejorar se requiere mucha práctica: sólo manejando a fondo y a la perfección las tablas y los básicos puedes usarlos luego a tu antojo, de lo contrario uno permanece acartonado y a lo más que se puede aspirar es a interpretar una que otra vez, y sin errores, algunas pocas (y siempre las mismas) piezas musicales.

Otro tema pero relacionado: al psicoanálisis le supongo cierta utilidad que tiene que ver con una especie de descarga emocional al estilo de la confesión auricular que usan los católicos pero sin la finalidad moralizante ni disculpabilizadora por medio de penitencias. Tengo la idea (y creo que no soy el único) de que el ser humano es el animal cuentista (o fabulador). Los individuos de nuestra especie debemos inscribirnos en una narrativa para "percibir" algún tipo de sentido. Por lo que al ir ante alguien a quien le pagamos para que nos escuche nos ponemos a platicar la trama en la que nos creemos (o estamos) inmersos, explicándonosla y entendiéndola mejor mientras la narramos.

Si además el/la analista es inteligente, agudo/a, y tiene muchos conocimientos y mucha experiencia de vida, nos puede señalar detalles que pasamos por alto o tomamos a la ligera, y hacernos ver que hay algo ahí que no habíamos visto, o no habíamos querido ver. Esos detalles son las llamadas incongruencias, aquello que desde el punto de vista narrativo (según un "principio de realidad") no funciona, o no tiene lógica, o suena inverosímil o absurdo.

Ahora bien, la doctora que me analiza alega que la función del psicoanálisis es (no una descarga emocional confesional sino) ayudarme a cazar las incongruencias, enseñarme a escucharme con la misma atención que ella me pone para que luego yo solo pueda descubrirlas.

Pero en su discurso yo encuentro una que otra incongruencia, por ejemplo: si se tratara de entrenarme para lograr hacer solo lo que de momento ella me ayuda a hacer, la meta final sería prescindir de su tutela. Entonces como maestra debería plantear un método de estudio, darme literatura, proponer ejercicios diarios, establecer algunos plazos, tener un modo transparente de evaluar mi avance, etc. Es decir, tendría que plantear el esfuerzo (como con el ejemplo de las clases de piano arriba mencionado) tras el cual yo podría ser capaz de adquirir el grado de maestro, al menos en cuanto a mi propio discurso.

No existiendo dicho plan de estudios, y sabiendo que represento para ella 2800 pesos al mes de ingresos a cambio de 4 horas de su tiempo, es decir, sabiendo que no hay un gran incentivo para acelerar mi aprendizaje en detectar mis propias incongruencias, me parece más congruente mi hipótesis fabulista y confesional, no que esté mal, sus cuestionamientos han sido como acercar una lupa a mi propio discurso, pero pongo en duda el que yo aprenda su método (adquirido después de años de carrera y maestría y tal vez hasta doctorado, además de los de vida y experiencia profesional) gracias a una sesión semanal, y por tanto que ese pueda ser el objetivo del análisis.

26 de mayo de 2009

Die Gedanken Sind Frei (10 de 16)

Hemos convertido a la libertad de las ideas en un instrumento de cambio social. Nos hemos vuelto lo que todos nuestros ancestros soñaron en convertirse. Personas que pueden tomar lo que es y hacerlo el método de la liberación. Hemos estado cantándolo por mil años:

Die Gedanken sind frei
Mis pensamientos florecen libremente
Yo pienso como me place
Y esto me da el poder
Ningún bachiller puede acotarlos
Ningún cazador atraparlos
Ningún hombre puede negarlo
Die Gedanken sind frei

En una red que da la vuelta al globo, construida de libertad y que no responde a ningún amo, la humanidad será por fin capaz de oirse pensar. Esto es lo que hemos soñado; esto es para lo que hemos construido; esto es lo que hemos diseñado; esto es lo que hemos codificado; esto es lo que hemos registrado; esto es lo que ya hay ahí afuera en uso.

Vivmos en medio de las herramientas de nuestro propio sueño, y este rico, brillante momento es el momento donde las ponemos en marcha y las convertimos deliberadamente en la lucha por la libertad en la que hemos esperado largamente prevalecer. Este es aún otro gran momento en la larga historia de la búsqueda de la liberación y la diferencia es que esta vez ganamos. ¡Libertad, ahora!

Muchas gracias.

[Aplausos]

25 de mayo de 2009

Postergar y abandonar: fórmula del "éxito"

Comentaba con la analista que he abandonado bastantes actividades a lo largo de mi vida. Cuando era niño mi mamá me hizo tomar clases de piano, luego en la pubertad clases de violín, no era muy talentoso pero tampoco era malo, con la pura clase semanal y tal vez media hora de práctica en casa (aunque a veces ni eso), aprendía y avanzaba y podía interpretar una que otra pieza nueva cada mes. De modo que mis papás pensaron que tal vez yo querría hacer de la música mi carrera y me ofrecieron ir a estudiar a Parma, privilegio que rechacé casi de inmediato. Luego, cuando empecé a ir a la universidad abandoné definitivamente la música, y si bien algunas veces desde entonces me he sentado frente a un piano y he interpretado las viejas melodías aprendidas durante la infancia, sé perfectamente que es algo que abandoné sin mirar atrás (hasta hoy).

Empecé la universidad en el 95 con la intención de ser ingeniero industrial y la abandoné a dos años de haber iniciado la carrera, preso de la ilusión de volverme millonario como vendedor de ilusiones en amway, actividad que por cierto (y por suerte) también abandoné (¡ay, no tan pronto como debía!). Cuando dejé la facultad de ingeniería fue según yo por entrar a otra carrera: cinematografía; a la que intenté ingresar tres años seguidos sin éxito, para después también abandonar ese esfuerzo, derrotado. Cuando mis papás descubrieron mi abandono ingenieril me pusieron un ultimatum que no acepté, y los abandoné a ellos. En el 2005 volví a los estudios, ahora con la pretensión de ser licenciado en letras hispánicas (llevaba 10 años inmerso en libros), para volver a abandonar tras el segundo semestre. Desde entonces he emprendido varios proyectos personales "para salir de pobre" pero sin muchas ganas, sin demasiado esfuerzo o compromiso, y he terminado abandonándolos también. Ante todo esto, la doctora me dejó con la pregunta: ¿porqué abandono?

Lo estuve pensando y me di varias razones para mis abandonos: la primera es porque la actividad no era algo elegido por mí, sino que se me había presentado como obligación o imposición de mis papás o la sociedad. La segunda es porque yo era conciente de que el esfuerzo que le estaba dedicando a la actividad era el mínimo necesario, o ni eso, y porque no estaba dispuesto a dar más. La tercera es por falta de resultados tangibles que me permitieran pensar en un futuro más prometedor en lo que sea que estuviera haciendo. La cuarta es por falta de tiempo debido a que ya había empezado a trabajar, y priorizaba dando preferencia a las actividades que me permitieran mantener el puesto en el que estaba y con ello el status Quo. La quinta es simplemente desidia, o preferir descansar y disfrutar del ocio o la buena compañía, y postergar la acción hasta que los esfuerzos originalmente necesarios ya no eran suficientes para lograr los objetivos en tiempo y forma, y el quehacer acumulado había llegado a proporciones abrumadoras y desalentadoras.

En realidad la quinta razón es La Razón, aunque Letras hispánicas la elegí yo, igual que cinematografía, y los proyectos personales "para salir de pobre" también, y el esfuerzo original no era excesivo; no actué a tiempo y dejé que se me acumularan las tareas, y para cuando volteé hacia ellas ya se habían desbordado y re-emprenderlas hubiera requerido mi dedicación total y exclusiva. Así que, ¿por qué postergué?, ¿por qué dejé que se me viniera el mundo encima? ¿Es acaso que como el gran Ovidio: "veo lo que es mejor y lo apruebo, pero sigo lo que es peor"? Por otra parte, hay otras actividades en las que he sido constante y responsable (incluso aferrado, como queriendo demostrarme que no soy tan fácil de vencer): como este blog, como mi captura de gastos personales, como mis ganas de compartir diariamente con mi musa, como mis lecturas, como lograr fumar tan sólo un cigarrillo al día sin permitirme ni uno más.

¿Cómo hacerle para aplicar esa misma 'disciplina' a otras actividades más redituables social o económicamente? ¿Porqué para unas cosas sí he podido pero para otras no? ¿Qué quiero ser, hacer, lograr y conseguir, y cuáles son los requisitos? ¿Estoy dispuesto a hacer el esfuerzo necesario de principio a fin?

24 de mayo de 2009

Semiotizando, y nostalgia estudiantil

Estoy por terminar el capítulo 2 del Tratado de semiótica general, o A Theory of Semiothics. Lo estoy disfrutando mucho. Claro que esto puede deberse a que es como la cuarta vez que lo leo, y a que tras irme empapando poco a poco, a lo largo de los años, del tema, me he vuelto un aficionado empedernido. Es abrumadora la cantidad de autores citados y de obras previas en las que se basa Umberto Eco. Yo he leído tan sólo un poquito de lo recopilado por los alumnos de Saussure, algo de Roland Barthes, casi nada de Noam Chomsky, un libro de Greimass, y creo que párenle de contar. Además de que mucho dese bagage, por no ser comprendido cabalmente en su momento lo fui olvidando, o se quedó en mi cerbro en estado de incubación por años.

Ahora estoy agarrándole la onda a un porcentaje mucho mayor. Empieza proponiendo un modelo elemental de comunicación en el que habla de una hipotética presa hidráulica y del trabajo hecho por un ingeniero imaginario para obtener, a distancia segura, información sobre algunos niveles pertinentes del agua. De ahí surgen dos partes que son el cuerpo del estudio, la teoría de los códigos: en la que se explican las características formales que deben tener los códigos para permitir la comunicación de contenidos; y la teoría de la producción de signos, en la que explica como se usan los códigos y como se reformulan con el uso. De hecho es un poco como el huevo y la gallina, los códigos son el soporte de los mensajes producidos (incluso de aquellos que rompen las reglas de codificación), y los mensajes producidos le dan a su vez forma al código, modificándolo permanentemente.

La disección es una forma de estudiar los fenómenos, hacer discreto al continuo, dividirlo, y eso es algo que los humanos hacemos todo el tiempo. Creo que tengo una mente privilegiada y me hubiera gustado poder dedicarla al estudio y la generación de tesis y publicaciones por medio de becas y otros subsidios; hubiera estado bueno dedicarme a la lectura seis horas diarias (de 9 a 15), y tres horas diarias (de 17 a 20) a escribir y ordenar los conocimientos recién adquiridos. El filtro para ser acreedor de tales beneficios también imponía sumisión y humildad ante un modelo autoritario y por lo tanto no pasé a través dél. De cualquier modo, incluso si no puedo retomar la universidad ni titularme, le sacaré algo de provecho a este cerebrito, seguiré obteniendo placer y satisfacciones de un par de mis hábitos favoritos: la lectura y la escritura.

23 de mayo de 2009

Miedo, Incertidumbre y Duda (o FUD)

En la oficina cunde el desánimo. Nuestro entrañable compañero Choco dejó de trabajar en la compañía, se fue a otra empresa donde le pagarán más y se dedicará a hacer aplicaciones para la www, lo cual me parece sensatísimo puesto que es algo en lo que tiene gran experiencia, y lo que hacía con nosotros sólo le servía si hubiera permanecido en donde de momento yo sigo trabajando. Previamente a su huida le hicieron una buena oferta económica para que se quedara, probablemente mejor de lo que recibe en donde ahora labora, pero ya le hacía falta un cambio, además de haber entrado a una empresa que por su tamaño creo que será menos susceptible a los vaivenes de la crisis económica en curso.

Por otra parte, existe la impresión en el equipo veterano de desarrollo de que estamos haciendo vaporware, es decir que estamos haciendo algo que nunca verá la luz. ¿Por qué?, pues porque existen demasiadas incógnitas por resolver aún, y porque requeriremos procesar varias veces, y en tiempo real, una cantidad de datos brutal. Esto dará como resultado que quizá logremos hacer que funcione el prototipo, pero los que estamos desarrollandolo sabemos que si se quiere poner la aplicación en producción para volúmenes considerables de usuarios, se necesitará tal cantidad de hardware que no será económicamente viable, o al menos ese es el temor que tenemos.

El uso de los recursos de manera demasiado arriesgada, más el manejo poco cuidadoso, poco ético y poco profesional de clientes que representan buenas ganancias, más el no querer entender que a veces un desarrollo tomará varios meses (y no solamente un par de semanas), más una gerencia que no marca ni desglosa las metas con claridad ni se acerca a supervisar a los empleados, más una dirección bicéfala contradictoria, más nuevas y cada vez mayores restricciones disciplinarias, es lo que nos tiene a los trabajadores temerosos y desanimados, con lo que no me extrañaría que gran parte dellos (¿de nosotros?), y muy probablemente los mejores, sigan el ejemplo del Choco dentro de no mucho tiempo. Podría estar equivocado pero lo dudo. No he sido yo el que se ha dedicado a sembrar el FUD (Fear Uncertainty and Doubt), sino las acciones mismas de quienes dirigen el timón deste barco.

22 de mayo de 2009

¿Bloggear los problemas parejales?

¿Porqué es que en últimos posts he escrito algunos detalles sobre mis problemas de pareja? Antes los omitía porque no habían sido tan traumáticos, porque mi musa se metía con asiduidad de fan al blog y yo quería evitar malos entendidos (autocensura), y porque me parecían cuestiones particulares poco dignas de mención. ¿Qué ha cambiado?, pues que he temido seriamente el final del mundo con mi amada, que me he sentido abrumado y desbordado por la situación, que ella ya ni me lee (o lo hace muy de vez en cuando), que en cierto sentido me tiene sin cuidado que vea si he resentido nuestra interacción (y hasta me gustaría que lo leyera), y a que quise dejarme una constancia a mí mismo para que si en unos meses o años releo estos exabruptos, y mi mentalidad y situación han cambiado pueda reflexionar al respecto, y tal vez saber qué conocimientos o experiencias me hacían falta para entender mejor lo que me ha sucedido últimamente, y lograr actuar serenamente.

La analista me ha dicho que su trabajo es acerca de escuchar incongruencias entre mi discurso y mis acciones (a partir de las narraciones que hago de los eventos que vivo). Un ejemplo que me puso: si yo sabía que mis empleadores son medio gangsters y usan mi nombre de manera chueca para engañar a otra compañía con cuyos ejecutivos me habían presentado como trabajador designado para ellos, pero para la que no hago absolutamente nada, y otro indivíduo efectúa las labores a mi nombre; es decir, si ya sabía que carecen de ética y toman decisiones muy arriesgadas, ¿por qué me extrañó y me hizo sentir ofendido saber que me espían?, es más, ¿por qué no lo sospeché desde antes y tomé medidas para protegerme, anticipándome a sus cochinadas?, es más, ¿porqué publiqué en el blog lo sucedido, con pelos y señales?, ¿buscando qué?, ¿evitar o provocar las represalias que personas con mala leche seguro me impondrán?

Tal vez sea que no me importa y que tengo calculados todos los riesgos... No, no es así, me he dejado llevar por las vísceras y muy probablemente, si es que tenía probabilidades de crecimiento ahí, me he autosaboteado. ¿Será que al publicar sobre mis broncas con mi amadísima princesa también esté cumpliendo este mismo patrón?, ¿qué resultados espero? No lo sé. Lo que sé es que con este ritmo de publicación estas evidencias quedarán enterradas en los textos que se vienen y las probabilidades de que alguien más (pero alguien que tenga influencia o que incida en mi vida) lea los últimos posts son mínimas. O al menos eso espero. ¿Borrar algo?, ni pensarlo.

21 de mayo de 2009

Cómo hacer las paces (¿sin morir en el intento?)

La verdad es que el último día que nos peleamos mi musa y yo, volví a cuestionar la postura según la cual ella encontraba mejor y más conveniente la hostilidad y el antagonismo que me demostraba, que llevar la fiesta en paz y/o defender sus comentarios por medio de la razón (la cual creo esgrimir con cierta habilidad). Lo que me hizo recibir como premio variados insultos y más hostilidad, así como una sensación de "ya valió madres" que no me pude quitar hasta ya entrada la noche.

Todo empezó cuando a la hora de la comida le comenté que en el trabajo habían puesto el nuevo firewall, y que me parecía lo más estúpido de este mundo por todo lo que menciono aquí, y que por lo tanto ya había empezado a enviar ridículums y a buscar trabajo en otras partes. Pues bien, ella se inflamó con mis comentarios y sin más argumentos que: "pues yo pienso muy diferente que tú" empezó a echar chispas y centellas por la mirada y las expresiones corporales, sin lograr poner en palabras coherentes el porqué de su alineación y su complicidad con mis opresivos y poco visionarios jefes.

Así que, según la dinámica en que en este post me propuse no seguir entrando, le pregunté sus motivos para que mis ideas al respecto fueran tan mal recibidas, sin que ella supiera responderme algo que se acoplara a mi caso específico (desarrollador de tecnología de supuesta super vanguardia-innovación-creatividad). Al no poder argumentar de manera contundente, se volcó contra mi persona, contra mi habilidad verbal "nada productiva", contra mis hábitos de lectura, contra una imagen de mí que me era desconocida y me parece 90% falsa: la de un irresponsable que prefiere rascarse la panza a trabajar, etc.

Entonces cuestioné más a fondo, sin permitirme explotar nunca, sobre los asuntos que menciono en el primer párrafo deste post, y el resultado fue el acabose.

Entonces, ¿cómo es que en la noche me invitó a la cena de cumpleaños de su papá?, ¿cómo es que cuando regresamos al depto quiso conversar conmigo casi como si nada hubiera pasado? Yo por supuesto acepté la fingida armonía reinstaurada porque se parece a aquella que aspiro, pero no dejé de hacerle notar que me encontraba todavía con PTSD, y que tendríamos que hablar-aclarar-descifrar, más adelante, sobre el asunto.

20 de mayo de 2009

¿En el ojo del huracán?

Con mi musa parece que ha pasado la tormenta, o quizá tan sólo lo peor della, o también podría ser que me equivoque completamente y justo ahora esté en el ojo del huracán sin saberlo. Varias personas me instaron a la paciencia y otras a la acción, dentre las que me sugirieron actuar hubo principalmente dos vertientes: 1. someterme a los designios y la voluntad de mi caprichosa princesa sin chistar ni rezongar, y 2. romper relaciones definitivamente y así "darle una lección".

¿Cómo puede ser que yo no fuera ni todo paciencia, ni todo sumisión, ni todo terminación, y de todos modos me haya mantenido con cierto grado de éxito cerca della? Veamos, recapitulemos: no estuve ni estoy dispuesto a ceder mis espacios personales pero cedí la barba y la cabellera (que ella no me pidió); llegué a pensar y a decir en voz alta que me daba por vencido y que mejor ya me iba de su lado (y en su momento de verdad tenía la intención de largarme e hice mis maletas), pero reconsideré y no llegué a hacerlo porque algo en mí me ha mantenido alejado hasta ahora de la irreversibilidad de ciertas determinaciones; no dejé pasar ni una ofensa sin evidenciarla y reclamar (lo que me acarreó el doble de pleitos que si me hubiera aguantado y/o quedado callado) pero tampoco exploté frente a los insultos que recibí por mis reclamos. De algún modo me mantuve a flote: "quiero estar contigo y lo haré excepto si me pides lo contrario de manera amistosa, serena y firme" ha sido, por lo general, mi mensaje hasta ahora.

Supongo que en este caso fue más cuestión suya que mía, mi voluntad está dirigida hacia la armonía y la buena vida, y a la convivencia agradable a su lado. Lo que no quiere decir que sean aceptables negociaciones en las que yo tenga que elegir entre ella y mis actividades individuales predilectas, sobre todo cuando no están en contraposición más que porque ella ha desarrollado una animadversión irracional hacia las mismas. Ahora me parecen tan absurdas las sugerencias de ceder en todo "si quería salvar la relación" como las de que mejor me fuera porque "la podredumbre ya había hecho irrecuperable cualquier pedazo de nuestra vida" juntos. Pero me parecen así porque ahora hay calma. Si sucediera que de hecho me encuentro en el centro del huracán y las hostilidades vuelven al amanecer, me amarraré al mástil y esperaré lo peor de lo peor con la frente en alto y daré la cara a mi destino sin más vacilaciones.

19 de mayo de 2009

Parecon - Parte 1 (6 de 48)

Las economías

Si examinamos todos los enfoques modernos a los asuntos de la propiedad, distribución, división del trabajo, remuneración, y toma de decisiones, podemos agrupar utilmente a las economías en algunos tipos amplios que resumen flexiblemente sus similaridades y propiedades esenciales.

  • El capitalismo tiene propiedad privada; distribución de mercado; divisiones de trabajo corporativas; remuneración por propiedad, poder, productividad; y dominio de la toma de decisiones por parte de la clase capitalista.
  • Los dos socialismos (de mercado y centralmente planificado), tienen propiedad pública o estatal, distribución de mercado o centralmente planificada, divisiones de trabajo jerárquicas, remuneración por productividad y/o poder, y dominio de la toma de decisiones por la clase coordinadora gobernante.
  • El Bioregionalismo, que es la meta de algunos activistas ambientalistas, tiene propiedad pública, intercambios descentralizados por medio de distribución cara a cara, y en su mayoría divisiones de trabajo cooperativas, además de la carencia de una definición clara de otras características (al menos hasta donde hemos sido capaces de descubrir).
  • La Economía participativa como es propuesta en este libro combina propiedad social, distribución planificada participativamente, estructura de comité, conjuntos de trabajo balanceados, remuneración por esfuerzo y sacrificio, y auto-administración participativa sin diferenciación por clases.

Nótese que dos instancias cualesquiera de un tipo de economía pueden diferir mucho. Las variaciones pueden ocurrir en todo desde su nivel de desarrollo, hasta la población, los recursos disponibles, estructuras específicas (como un sistema especial de banca), la distribución de poder entre las clases en competencia u otros sectores, características que derivan de una historia racista o sexista o formas políticas especiales. De este modo el capitalismo toma diferentes características en E.U. de las que tenía en la antigua Suecia, la vieja Sudáfrica, y en el Haití de la actualidad. El socialismo de mercado también puede diferir en su implementación, como vimos en la que fuera Yugoslavia y la vieja Hungría. El socialismo centralmente planificado es diferente en Cuba de lo que fue en la vieja Unión Soviética. El Bioregionalismo Verde y la Economía Participativa están aún sin implementar en la historia, pero por supuesto pueden también tener características diferentes en instancias diferentes.

Sin embargo, pese a la posibilidad de diversas instancias cualquier instancia de cualquier tipo singular de economía retendrá las características definitorias de ese tipo. Entender las propiedades generales de las economías capitalista, socialista de mercado, socialista centralmente planificada, bioregionalista, y participativa nos dirá por lo tanto mucho sobre cualquier instancia particular de cualquiera de estas, incluso sin saber todas las características secundarias de ese país.

18 de mayo de 2009

Los beneficios de no ser los derrotados

El problema que enfrentan Obama, y los E.U. como país, con lo de las fotos de las torturas a sus prisioneros, es una situación que puede verse desde distintos frentes:

1. Primero que nada se supone que los E.U. son mayoritariamente una sociedad plural, abierta, honesta y liberal, y desde ese punto de vista debería ver y reconocer sus propios crímenes contra la humanidad para poder cambiar de dirección, si es que el camino que llevan no se asemeja a los ideales que les enseñan a sus niños en la escuela. Ya quien quiera permanecer en la negación pues muy su problema. Desde esta perspectiva la información debería ver la luz, y la verguenza apoderarse del espíritu de los cínicos gobernantes gringos, y con ella tal vez llegaría un poquito de humildad a sus corazones y de comprensión a sus egocéntricos cerebros, todo lo cual seguramente ayudaría a que ese país se integrara nuevamente al mundo desde una perspectiva multilateral y pacífica que es hoy por hoy inconcebible.

2. Por otra parte, es sabido que tienen tropas en más de 700 bases militares fuera de su territorio, ¿que qué hacen ahí?, pues claro que defender al mundo civilizado y a la democracia, y como han hecho su trabajo tan bien, a pesar de proponer sistemas de administración pública superiores los que usan los bárbaros incivilizados aspirantes a tiranos despóticos que quedan (y abundan) en el mundo, "los malos" odian al país de las barras y las estrellas más que nunca, e "inexplicablemente" tienen cada día más y más adeptos. Entonces mostrar fotos donde "los buenos" son unos malditos puede provocar que "los malos" tengan argumentos para convencer a más zombies de unírseles en su lucha cósmica contra la libertad de mercado y de religión. Por patético que parezca desde la perspectiva 1, este argumento es el que está siendo usado por el actual ocupante de la casa blanca para impedir que la evidencia de los crímenes del país que preside sea desclasificada.

Con esto podemos concluir que si Alemania nazi no hubiera perdido la guerra, y después de Hitler (quien se habría retirado tranquilamente a su casa de campo) hubiera quedado alguien electo "democráticamente" como gobernante de los teutones, posiblemente nunca hubieran salido a la luz imágenes de los campos de concentración ni de las pilas de cadáveres de los hebreos asesinados industrialmente durante el periodo de 1934-45. Con lo que seguramente no se hubiera fomentado el tan negativo espíritu anti-alemán de la posguerra, y el gobierno germánico no habría tenido la limitante de tener que actuar de ahí en adelante con cierta hipócrita apariencia de culpa para ser aceptado en un mundo "civilizado". Probablemente, además, hasta hubieran podido seguir masacrando judíos por otros 30 o 40 años, y la "comunidad internacional" no habría inventado al estado de Israel para azotar a los árabes y quitarles sus reservas de hidrocarburos.

Pues sí, puros beneficios, qué lástima que perdieron tan estrepitosamente los nazis. Afortunadamente los gringos no serán derrotados, así ni Obama ni ningún otro gobernante de los E.U. tendrá que hacer madurar a sus súbditos con imágenes que les "quiten" la venda de los ojos, y estos seguirán convencidos de su inocencia, combatiendo a "los malos" por muchas décadas más. Ese es el privilegio de no haber sido derrotados, aunque tampoco se pueda decir que hayan obtenido la victoria.

17 de mayo de 2009

Die Gedanken Sind Frei (9 de 16)

Así que el movimiento por el especto libre, como el movimiento por la impresión sin censura, es un movimiento para poner debajo de la ciencia al poder de todas las mentes humanas disponibles. Como la guerra contra la censura en Europa del oeste, la guerra por el espectro libre es una guerra por la libertad de las ideas en su sentido más valioso: las ideas que cambiaron a la sociedad extienden la vida, hacen mejor la existencia humana. Nos hemos acostumbrado tanto a la idea de que el poder para comunicarnos los unos con los otros es algo que debemos comprarle a alguien más que estamos en peligro de olvidar cuanto depende, a lo largo de la historia de los seres humanos, de la virtud inherente de la comuniación irrestricta.

Entonces a partir de esas partes: software libre, hardware libre, cultura libre y espectro libre, construimos una sociedad de justicia, de igualdad, de libertad. No de la creencia de que si nosotros de algún modo obligamos a los aristócratas a irse, la sociedad posterior se volverá perfecta; no de la creencia de que hay alguna clase que necesita ser liqudada --y luego imaginamos que los seres humanos pueden cambiar--; no es un sueño sobre "ningún lado", sino un intento de mover lo que tenemos dentro de nuestros departamentos, dentro de nuestros trabajos, dentro de nuestras escuelas, hacia un mundo más grande en donde eso pueda empezar a cumplir su perfectamente legítimo, necesario, inevitable, trabajo de liberación.

16 de mayo de 2009

Haré caso a la loquera

Decidí no echar en saco roto las preguntas de la analista con respecto a mi apariencia. El disfraz es sólo eso, un disfraz, un atuendo, pero tiene partes que me crecen y que cuidé mucho, y por lo tanto desarrollé un poco de apego hacia ellas (mientras que otras han crecido precisamente por descuido). Si algunos pocos cambios pueden ayudarme a cambiar en otras cosas, y esas cosas a su vez me permiten restablecer un lazo con mi musa, valdrá la pena. Ahora bien, ¿y si los cambios no me ayudan para nada en ese grandioso objetivo de relaciones diplomáticas?, no importa, no lloraré por el disfraz perdido (habrá algo más importante que llorar), y de cualquier modo estaré usando uno nuevo.

Así pues, el sábado pasado me rasuré la barba, y hoy pretendo cortarme la greña que ya me llega más abajo de media espalda. Además me compraré una báscula y empezaré una dieta para bajar cerca de 15 kilos en los próximos doce meses. Probablemente también me ponga a hacer ejercicio, y con eso de que llevo ya dos meses de fumar sólo un cigarro al día y he logrado mantener al mugroso vicio a raya, seré un especimen casi saludable. Además, creo que nos mudaremos a otro lugar dentro de no mucho, independientemente del estado de las cosas entre nosotros haré el esfuerzo y buscaré y encontraré algo que complazca a la princesa. Adicionalmente, me gustaría de verdad pararme en la universidad y solicitar nuevamente el plan de estudios de letras, asesorarme con algún director de carrera y dedicarme a terminar mis estudios y graduarme. De algún modo el blog son horas de vuelo, es práctica, pero el título podría legitimarlas y ayudarme a conseguir un empleo en el mundo de los textos... Mientras tanto le voy dando poco a poco a proyectos personales, estoy por terminar un sitio web e iniciar el que le prometí hace más de cuatro años a mi papá.

15 de mayo de 2009

Dos y medio, pero chiquitos

A primera vista pareciera que tras el Diccionario Filosófico me dediqué más a la lectura que antes, pues terminé dos libros y empecé otro. Pero por desgracia no fue que tuviera más tiempo para leer, sino que los textos fueron mucho más breves. Por ejemplo el de La libertad como destino, con una presentación de un tal Alberto González Troyano (quien se nota que ha estudiado lo suficiente al autor presentado) de la página 9 a la 33, y luego el texto pronunciado en la Feria del Libro de Sevilla 2004 por Fernando Savater de la 35 a la 61. Claro que llamar "libro" a una publicación de 61 páginas, de la cual sólo 26 fueron del filósofo de mi inteŕes, es un poco abusivo. Pero cualquier lector podrá constatar que en la parte dedicada a los legales dice claramente que: "Este libro no podrá ser reproducido, ni total ni parcialmente, etc". (¿no estaré incurriendo en un delito al mencionar esas dos oraciones?)

El otro libro que leí se titula Borges: la ironía metafísica, de 114 páginas, cinco capítulos y un apéndice. En él Savater habla de lo que representa Borges para él, y de cómo cambió la faz de la literatura. Pero sobre todo, de cómo entendió y usó a la filosofía, de cómo empleó en sus cuentos los temas filosóficos por excelencia, y de cómo el famoso y genial autor ciego consideraba los sistemas filosóficos como literatura con la cual jugar seriamente, más que sistemas serios de comprensión del mundo. La primera edición salió en 2002, y obvio que con los temas de la memoria, las bibliotecas, los laberintos, etc, tenía que salir en una de esas El nombre de la rosa, de Umberto Eco. Con esta ya van dos menciones que le leo a F.S. del enormísimo filósofo italiano, y sé que ambos son fans de Borges.

Finalmente me dio tiempo de empezar nuevamente el Tratado general de semiótica, y lo estoy devorando y entendiendo magníficamente. Me entusiasma haber llegado ya a un nivel en que no se me escapa ninguno de los conceptos desarrollados.

14 de mayo de 2009

Fiscalizar el trabajo, no el ocio

En la oficina compraron e implementaron un nuevo firewall, para lo cual quitaron el que yo había instalado, que estaba hecho en software libre y permitía restringir el tráfico de manera similar al recién instaurado, del mismo modo permitía obtener reportes parecidos del uso (y abuso) de la red. Quiero suponer que el que hay ahora es más fácil de usar, o tiene muchísimas más características que el que yo había puesto, o que ofrece más garantías, o algo así. Y lo quiero suponer porque no he visto la interfaz de administración, es decir que no lo sé de cierto. De cualquier forma, a diferencia del anterior, empezaron a usar el nuevo para cerrar puertos de distintas herramientas como los mensajeros instantáneos al mismo tiempo que para impedir el acceso a variadas páginas web que son obviamente de entretenimiento o esparcimiento.

Cualquier empresario a la antigüita, que conozca las mañas que desarrolla casi cualquier empleado, verá lo anterior con buenos ojos. De hecho, pensará que las restricciones son totalmente ne-ce-sa-rias para aumentar la productividad de sus empleados. Pensará que los recursos de cómputo no deben ser usados más que para el trabajo, sin permitir ninguna desviación o distracción.

Yo no soy empresario sino empleado, por lo tanto proveo de argumentos en contra de esa visión arcaica, que bien podrían ayudar a los patrones a entender mejor la situación.

  1. Si bien los dueños tienen todo el derecho (por ser quienes los compraron) de definir qué se ve y qué no se ve en sus computadoras y por medio de sus canales de comunicación, cerrarle el acceso arbitrariamente a varios medios a los empleados "de confianza" que sí están efectuando su cuota de trabajo cotidiana, es visto como una agresión por estos últimos.
  2. Descubrir si un empleado hace bien o no su trabajo se hace fiscalizando y supervisando las labores, para lo cual tenemos herramientas de sobra (trac-subversion), y si hiciera falta más presión bastaría con que la gerencia se paseara entre los trabajadores cada dos horas para ver los avances de cada uno, sabiendo exactamente qué tarea tenía asignada cada empleado, y cuanto debía haberle tomado; de modo que creo que se debe controlar el trabajo, no el ocio.
  3. Muchos de los recursos utilizados para resolver los problemas que se nos presentan están en las páginas bloqueadas, o accesibles por medio de algún conocido gurú desde el mensajero. Por lo que si bien el bloqueo impide que uno "eche novio" también obstaculiza que podamos resolver algunos problemas en tiempo y forma.
  4. Los desarrolladores tenemos los medios para saltarnos las restricciones establecidas, no por nada hacemos los programas que otros usan. Manejamos las máquinas como nuestras herramientas cotidianas de trabajo y sabemos utilizarlas para combatir los límites que nos quieren poner. Con la agravante de que en lugar de ponernos a trabajar, usamos el tiempo para ingeniárnoslas en romper las barreras impuestas, por supuesto en detrimento de la productividad.
  5. El trabajo de desarrollo de aplicaciones se hace con algunos breves momentos de inspiración, y muchos de talacha; pero la inspiración suele encontrarse durante o después de algún periodo de relajación u ocio, y la talacha está inserta en mucha investigación y consultas en la web; por lo que impedir ya sea ocio como el libre navegar también va contra la productividad.
En resumen, creo que si mis empleadores fiscalizaran el trabajo, y solamente el trabajo, y se enfocaran en las metas y en ver cumplidas las unidades, bloques, y/o módulos solicitados a los empleados, sin tomar en cuenta nada más, obtendrían mejores resultados que ahora, cuando lo que quieren es obstaculizar sin éxito el "no trabajo". Y aunque yo ahora soy empleado, creo que si fuera empresario así procedería, revisaría las metas del día, de la semana, del mes, asignaría cuotas de trabajo por trabajador, e iría cada hora con cada empleado a ver cómo van, qué necesitan, qué están haciendo, etc. Haciendo esto, detectaría a los que se retrasan constantemente y hablaría con ellos, pero todo siempre desde el trabajo esperado y claramente estipulado, no desde las páginas de ocio visitadas, ni desde las conversaciones efectuadas por chat.

13 de mayo de 2009

Tones para los

Sucede que cuando algo me desconcierta me pongo a preguntar 'porqué' casi como un niño pequeño (mi amada diría que al estilo de la vieja KGB). Pues creo que porque veo (o reflexiono o sospecho) alguna incongruencia entre actos y discurso hablado (y discurso gestual, y estado de ánimo, y demás discursos) puedo empezar a preguntar, o que tengo algún derecho a saber. Y no es así. La confianza supone una narración y una credulidad, no un interrogatorio que las rompe. A veces preguntar es un sano modo de hacer dudar al otro para que piense mejor las cosas, pero esto sucede así sólo cuando es el otro el que pide ser interrogado, o cuando la relación es profesional, pero no cuando la interacción conlleva ciertas cargas emocionales profundas y estereotipadas. Interrogar en este último caso puede convertirse en una lucha de egos que saque a relucir lo peor de cada uno.

La analista en una de esas me preguntó que porqué preguntaba lo que ya sabía, y en un principio, ingenuamente sostuve que no era así, que si preguntaba era precisamente porque no sabía. Ahora bien, hay que conferirme enormes capacidades de observación y análisis para creer que yo sé lo que pasa en mi entorno inmediato con exactitud, así como en las mentes y corazones de mis seres queridos. Pero la analista me hizo ver que en haciendo yo alguna pregunta, era porque estaba haciendo hipótesis o conjeturas y "lanzando a mis sabuesos tras de ellas", pues bien, claro que era así. Pero eso no quiere decir que yo supiera de antemano la respuesta y sólo quisiera que mi musa lo reconociera, sino que sabía que yo no sabía, e igualmente que ella tampoco sabía, y que entonces podíamos empezar a inventar nuestras propias reglas y a definir caminos nuevos en lugar de transitar el viejo y maltrecho sendero sin haberlo cuestionado. Lo hacía con un mal modo, cierto, pero no con malas intenciones.

Ahora para mí, el problema radical está en mí. Es mi problema. Ya no debo preguntar para: a) demostrar que el otro tampoco sabe, b) obtener una respuesta que ya esperaba, c) reducir las probabilidades, d) comprometer o presionar. Sólo preguntaré bajo pedido y con mucho cuidado. Mientras tanto sigo en situación de emergencia sanitaria emocional y mental.

12 de mayo de 2009

Como mantener contenta a una mujer

De algún modo sé que ese título atraerá bastantes visitantes ingenuos al blog. Desdichadamente también sé que en cuanto se enteren de que mi conocimiento es igual o menor al dellos abandonarán este lugar inmediatamente. Claro, porque quien busca ese tipo de oración en google es un pendejo impolíticamente correcto que no puede hallarse en un ambiente refinado ni letrado. Tal vez la frase debería decir: "como mantener contenta a una persona", porque si no peca de sexista, y aún así se podría decir que una persona de sexo indistinto se caracteriza por ser inquieta, por andar por su vida insatisfecha de su mundo y de si misma, por buscar, en cuanto está contenta, motivos para no estarlo más, o para buscar otros modos de contentarse, etc. Y todo sin importar que la misma persona diga que busca con qué quedar conforme o con qué obtener la paz, pues ese quedar conforme u obtener la paz no ha de llegar jamás mientras viva.

Pero siendo sexista, hay tres factores que hacen que las personas de sexo femenino se inconformen más seguido que las de su contraparte masculina, 1.- la sociedad las encasilla dentro de un rol reproductivo que supuestamente debe dar "sentido" a sus existencias; 2.- estadísticamente son más listas que los hombres (no quiero decir que superen al sexo masculino en matemáticas o filosofía, donde creo que puede haber cierta igualdad, sino que lo superan en astucia interpersonal); y 3.- cada mes sufren trastornos hormonales que pueden llegar a ser sumamente dolorosos, sin que para ese castigo periódico haya alguna culpa o motivo de por medio, además de su sexo. Claro, puede haber otros factores particulares a cada individualidad, o a grupos minoritarios, o incluso otros universales de este género que se me escapan (por eso advertía en el primer párrafo que no soy ningún sabio en la materia ni tengo realmente ninguna respuesta). El hecho es que creo que estos tres factores hacen aún más difícil de lograr lo que dice el título deste post.

Existe otra razón adicional obviamente pasada por alto en el título, y es que nadie puede contentar o hacer feliz a otra persona sin que ésta coopere y quiera activamente estar contenta o feliz. Y fuera del breve periodo de enamoramiento con que se inician la mayoría de las parejas, donde hay toda clase de ilusiones y expectativas absurdas y todo es cooperación y complicidad permanente; creer que uno podrá mantener a la otra (o al otro) permanentemente ilusionado es soñar con ser un dios, o el mejor de los ilusionistas. Creencias que además subestiman la capacidad de la otra (o el otro) para inconformarse (al mismo tiempo que su inteligencia). Concluyo que no es mi trabajo hacer feliz a mi amada, ese es su trabajo y su responsabilidad (es su tiempo, su vida, y no hay vuelta hacia atrás para recuperar los momentos perdidos), mi trabajo es tal vez y dentro de mis posibilidades: no hacerle más pesado el sufrimiento, e intentar frecuentemente hacerla sonreir.

11 de mayo de 2009

Casi casi claudicando

He estado pensando muy seriamente en dar por terminado este esfuerzo bloggero. Por el nombre, se supone que es el infinito perpendicular porque representa una "permanente" alegría que llevo en el cuerpo-alma-y-mente gracias a estar con mi musa. Es decir, hacia el pasado (desde los cortoplacistas términos humanos) está un infinito, y hacia el futuro otro, esos dos, unidos en el medio por mi brevísima existencia, serían el infinito digamos que horizontal. Mientras que la vida, y mucho más los momentos de intensa alegría, son para mí otros tipos de infinito, unos que se inscriben perpendicularmente al otro, el horizontal, y desde el cual son menos que nada, pero desde la nada que representa en la eterna línea temporal mi paso por el universo, son algo, algo infinito en otro plano para mí.

En los últimos meses he tenido cuantiosos momentos de frustración y desesperación al intentar hacer llegar algún mensaje hacia mi amada y supongo que viceversa. Los momentos disfrutados se han reducido a nada. Cero. Esfumados por completo. Y todo apunta hacia un desenlace de alejamiento y temible olvido entre los dos. Pero también podría alegrarme, pues según un micropoema del Borges, "La meta es el olvido / Yo he llegado antes", o algo así... Por otra parte, tengo un compromiso con mis traducciones, ¿tendría acaso que pasarlas a otro blog?, ¿que dejar de escribir asuntos cotidianos y publicar sólo lo que me falta de Parecon? Bah, no lo sé, de momento seguiré aquí. ¡Ah!, grandísima tristeza mía, gracias por (al menos tú) hacerme compañía (música de melodrama azotado)... De algún modo mi esperanza sigue viva, qué absurdo que quiza tenga que matarla yo mismo.

10 de mayo de 2009

Parecon - Parte 1 (5 de 48)

Remuneración

El diccionario dice que "remunerar" significa "compensar por algo; hacer un pago por algo." Las normas y procedimientos de remuneración determinan qué bienes y servicios pueden las personas permitirse del producto social total. Algunas personas son remuneradas miserablemente por sus labores, tales como el hombre o la mujer que cocinaron los panqueques que desayunaste en la fonda local, o quien limpió los cuartos en el motel cercano. Algunas personas son remuneradas con enormes recompensas como Michael Jordan o un cirujano o un prominente abogado. Algunas son remuneradas no sólo por sus propias labores sino también por las de otros --a veces por las labores de miles o incluso decenas de miles de otros, tales como Warren Buffet y sus camaradas de capital.

La remuneración económica puede ocurrir de acuerdo con cinco amplios estándares. Podemos pagarle a la gente por:

  • Lo que la propiedad privada de cada persona produce, o el producto total
  • Lo que cada persona por sí misma produce, o el producto personal
  • Lo que cada persona puede obtener por la fuerza, o poder de negociación
  • Lo que cada persona dedica y los sacrificios que cada persona hace, o esfuerzo y sacrificio
  • Lo que cubre las necesidades de cada persona, independientemente de sus actividades
Dependiendo de qué normas de remuneración emplea una economía y las mecánicas exactas de su implementación, diferirá quien gana más y quien gana menos, igual que los comportamientos de la gente y por tanto la evolución de sus motivaciones y personalidades. La remuneración importa.

Toma de decisiones

¿Quién o qué establece cómo es organizado el trabajo, cuánto tiempo laboramos, qué bienes están disponibles, y a qué precios se intercambian los bienes? ¿Donde reside el poder sobre los resultados económicos? ¿Qué lógica justifica las distribuciones de poder existentes o alternativas? ¿Qué mecánicas impulsan la promulgación de relaciones de poder particulares? ¿Cómo es que la distribución del poder económico afecta los prospectos de vida de las personas? ¿Porqué es que algunas personas mandan mientras que otras obedecen, y son posibles otras relaciones? Existen muchos enfoques para la toma de decisiones económicas:
  • La toma de decisiones económicas puede dar el mayor voto a aquellos mejor preparados, mejor informados, y con la mayor experiencia previa o el mejor récord de toma de decisiones previas.
  • La toma de decisiones económicas puede dispersar el poder entre diversos actores y agentes de acuerdo con variados criterios aunque todavía distribuidos distintamente. Por ejemplo, las personas que poseen propiedades podrían obtener disposición sobre las mismas porque tienen los papeles que los acreditan como dueños independientemente de cualquier experiencia pasada.
  • La toma de decisiones económicas puede conceder más o menos voto a las personas dependiendo de si sus trabajos les dan más o menos control sobre información crítica de toma de decisiones.
  • La toma de decisiones económicas puede ser determinada por una norma singular específica, como que un actor tiene un voto y la mayoría gobierna o un enfoque de consenso.
  • La toma de decisiones económicas puede ser guiada por un rango flexible de normas para que las decisiones se hagan de forma distina dependiendo de la naturaleza de cada decisión y sus posibles implicaciones.
Y por supuesto, la toma de decisiones económicas puede combinar más de una de estas normas --por ejemplo, una economía puede tener una norma democrática o incluso participativa para la toma de decisiones entre aquellos que poseen propiedades o que tienen empleos de élite y empoderadores, mientras que al mismo tiempo excluya completamente de la toma de decisiones a quienes no tienen bienes y efectuan trabajos repetitivos y discapacitantes.

En cualquier caso, para llevar a cabo una u otra norma o combinación de normas de toma de decisiones, una economía tendrá instituciones asociadas y relaciones institucionales que conllevarán fuertemente en ellas mismas los tipos de información que cada actor tendrá a su disposición, la influencia que cada actor tiene sobre los resultados, la participación de cada actor en las elecciones, y la subordinación de cada actor a las elecciones que otros actores hagan. Así, por supuesto la lógica y las estructuras económicas de la toma de decisiones importan.

9 de mayo de 2009

Contundencia en proyectos personales

El sitio web del negocio de mi papá lo hizo el gran Choco hace más de seis años. Fue hecho en php4, y las únicas dos funcionalidades que hay son meter por medio de checkboxes los artículos de una galería a una lista, y luego mandarla a una dirección de correo electrónico para su posterior cotización. El diseño está chafón, y ya en su tiempo no era muy revolucionario, pero como un esfuerzo personal no estuvo mal. De cualquier forma, hace como dos años que le prometí a mi viejo padre hacerle un sitio nuevo con la tecnología que he aprendido a usar en estos últimos años. El hecho es que por desidia y por distintas circunstancias no he hecho nada excepto "madurar la idea".

Tampoco he hecho varios proyectos que me llegaron "por fuera", y que luego le encargaron a otras personas porque yo dedique mi tiempo a otras actividades que me eran más atractivas (como el blog, por ejemplo). Digamos que empecé o apalabré unos 10 tratos, de los cuales no acabé uno solo. Ahora me propongo terminar algunos de esos pendientes.

Debo mejorar mi rendimiento personal para con proyectos propios más allá de mis hobbies, ser más contundente, o nunca podré dejar de ser empleado. Ser empleado es un poco como la esclavitud en la época de los romanos, salir de ella era posible comprándote por una lana a tu dueño, o cumpliendo con un gran deber como ir a la guerra, pero luego de comprarte tenías que lograr sobrevivir sin dueño, y muy pocos que no fueran ya ricos y/o extremadamente mañosos y/o industriosos lo lograban.

8 de mayo de 2009

Die Gedanken Sind Frei (8 de 16)

El hardware libre y el software libre son dos tercios de la plataforma para la cultura libre pero sin ancho de banda, las cajas se quedan paradas. Debemos recapturar para todos la propiedad común del espectro electromagnético. Cada sistema legal en su base está deacuerdo en que el espectro es común que pertenece a todos, y cada sistema legal niega como realidad práctica lo que propone como principio. Cada sistema sigue manteniendo que el gobierno debe controlar cómo es usado el espectro. Algunas veces muy explícitamente con el propósito de permanecer en el poder; algunas veces como declaración de alguna misión civilizadora con la creencia de que el gobierno y sólo el gobierno puede determinar en verdad acertadamente quién debería hablarle a las masas por los intereses de la expansión del conocimiento; y algunas veces, como en mi sociedad, por pura venalidad: "Nosotros, los políticos, hemos recibido sobornos de ustedes, los dueños de los medios, y reflejaremos fielmente los intereses de nuestros amos, quienes nos han puesto aquí". Pero cualquiera que sea la razón, ya sea venalidad o lujuria de poder o una creencia desorientada en la superioridad de la sabiduría estatal acerca de quién debería hablarle a los muchos, la adjudicación del espectro es un mal al cual le ha llegado su tiempo.

[Aplausos]

Esto es bastante más complicado que los problemas que resolvimos al liberar el software. Más complicado que el problema que enfrentamos al mantener el harware libre. Mucho más complicado que el problema de inducir a menores con doce años de edad a compartir música y ayudar a liberar la cultura. Pero no está fuera del alcance de nuestro poder dadas las bases de lo que ya tenemos. Necesitamos soñar sueños no utopistas para lograr ancho de banda para todos en términos equitativos. Ya poseemos el código funcional y la validación conceptual: es llamado WiFi. Es el intento de usar un pequeño, no particulamente deseable trozo del espectro, para modelar la posibilidad del acceso al espectro electromagnético de manera auto-organizada, no jerárquica, descentralizada, equitativa, y estamos mostrando cual es de hecho la alternativa. Aquellos de nosotros aquí que trabajamos en este tema somos capaces de mostrar a poblaciones por todo el globo el futuro sin cuentas de teléfono. El lugar donde ya nadie paga por hablarle a nadie más por zip, por tick, por impulso, por minuto. Podemos construir esa gruesa malla que nos abarque a todos y añadir a expensas comunales los largos trechos de porciones de comunicaciones que unan a esa malla, y podemos ofrecerle a las personas igualdad de comunicaciones. El Sr. Murdock estará desepcionado. A Deutsche Telekom se le rompería el corazón. Lástima.

Puesto que lo que está en juego es exactamente ese momento en el cual hacemos que el aprendizaje sea abierto. Como el reconocimiento de que la ciencia misma puede estar basada sólo en impresos que estén al alcance de todos los científicos. Del mismo modo en que la ciencia occidental dependió en el siglo XVI del movimiento por la libertad de pensamiento --¿qué proposición más noble podríamos tomar para nuestro movimiento que las simples palabras "e pur si muove" con las cuales Galileo señalaba la relación intrínseca entre la libertad de pensamiento y el progreso científico?-- Del mismo modo en que la revolución científica en el Oeste dependió primero del intercambio libre de información, así es ahora. En la próxima generación confrontaremos nuevamente el reconocimiento de que sin un movimiento por la libertad del pensamiento la ciencia está atada a la propiedad privada. ¿Acaso alguien que inspeccione la industria farmaceutica contemporánea o la venidera revolución genética duda de mí? Sin el libre intercambio de ideas, la ciencia es sierva de la desigualdad. Y es la ciencia, la habilidad de conocer, la habilidad de enseñar, la oportunidad de aprender todo lo que cualquier mente humana puede razonar: es la ciencia la que sigue en la raiz del desarrollo de nuestras sociedades.

7 de mayo de 2009

La influencia de la influenza

Ante la contingencia sanitaria leí y oí un poco de todo: que si es un ataque extraterrestre para destruir a la humanidad y quedarse el planeta sin mostrarse nunca a sus víctimas, o que si se aparecerán en sus platillos voladores con la cura y la vacuna hasta que la población haya sido mermada a la décima parte de lo que es hoy, amonestándo a quienes queden por haber sido tan reproductivos; que si es un castigo de Alah, para señalar el parentezco de los infieles con el animal más sucio y despreciable que existe, además de por los crímenes cometidos por occidente hacia el islam; que si es un compló de los gringos-mexicanos-ingleses-israelies-colombianos y otras cepas, para tapar la crisis económica y aprovechar la ventana de oportunidad brindada por el pánico para tomar medidas de emergencia y quitar derechos y posibilidades a las poblaciones (a lo Shock Doctrine); que si es otro compló, pero este de parte de los chinos-rusos-bolivianos-venezonlanos-cubanos y otras cepas, para destruir a la libertad y la democracia. Que si fue un accidente de seguridad de un laboratiorio gringo o uno de cria intensiva en una granja cercana a Perote, Veracruz; que si es una conspiración templaria iniciada desde tiempos inmemorables con los druidas célticos y controlable desde el umbilicus mundi por medio de las corrientes telúricas, etc.

Me parece que la teoría del origen de la crisis en Perote es plausible, sobre todo porque sé que las autoridades que regulan a los grandes industriales son corruptas y negligentes, y que los enormes productores de carnes porcícolas (¿o porcinas?) están dispuestos a corromper a los políticos de turno para disminuir gastos y tirar sus cochinadas (valga la redundancia) en donde les sea más cómodo. También me parece que los políticos del bloque fanático pro-libre-mercado no necesitaban crear la crisis para aprovecharse della, lo cierto es que sí hubo una ventana de oportunidad y seguramente la aprovecharon para hacer más transas de las que aparentan.

Por otra parte, me parece muy sospechoso que hayan sido tantos los extranjeros infectados, siendo tal vez de todos los infectados foraneos el aeropuerto internacional el único punto en común. ¿Me dirán que todos esos se metieron al metro, o fueron a un concierto o evento, o visitaron granjas Carroll?, Otra duda, ¿por qué nunca se dijo de qué colonias provenían los infectados, en qué delegaciones trabajaban, etc?, Digamos que hubo siete brotes en la Cuauhtémoc, ¿porqué no ir ahí, al lugar de vivienda o de trabajo de los recién enfermos y poner en cuarentena y hacerle pruebas a todos los circundantes en cierto radio, en lugar de cerrar todos los restaurantes de la ciudad?, ¿porqué no trazar la ruta por la que el infectado pasó para avisar a quienes la hayan transitado al mismo tiempo? El manejo de dar la alarma, pedir a todos que se quedaran en casa, y mantener las puertas abiertas de las clínicas para que cualquier hipocondriaco con tan sólo uno de los cinco síntomas se presentara a pedir socorro, inflando así la estadística de casos "probables" que atestaron los hospitales y ayudaron a que el pánico se expandiera, ¿fue la mejor estrategia para combatir la epidemia o para infundir miedo? Ah, y ya ni mencionar el relajito de las cifras de infectados confirmados y muertos relacionados, que fueron enormemente podadas, según mis fuentes no oficiales que prefirieron permanecer en el anonimato por miedo a represalias gubernamentales y corporativas :-P

6 de mayo de 2009

Un libro menos (¿o más?)

Terminé el Diccionario Filosófico de Fernando Savater, discurrí por una linea argumentativa riquísima y diversa que se detiene a considerar y compartir reflexiones sobre variados temas, decía la última vez de "lecturas" que había llegado hasta religión; pues luego seguí con Rilke (Rainer Maria), Rousseau (Jean-Jacques), Russel (Bertrand), Santayana (George), Shopenhauer, Seducción, Spinoza (Baruch), Stevenson (Robert Louis), Templanza, Teresa, Universalidad, Venenos y finalmente Voltaire (Francois-Marie Arouet) (1) y (2).

Me gusta cuando Savater hace biografía de algún autor y/o pensador, ofrece mucho contexto en pocas líneas y luego desglosa y expone el pensamiento y/o la obra del/la biografiado/a de manera breve y completa, dirigiéndonos hacia los puntos destacados de tal pensamiento y/o obra y a su importancia en el contexto actual, etc. Nada imparcial, (no tenía por qué serlo) pero siempre certero, etc.

Mientras tanto en la oficina supe cómo los objetos tetradimensionales que atravezaran nuestro universo tridimensional se nos aparecerían como tridimensionales (así como una esfera que atravezara un plano bidimensional, sería vista como un círculo que crece y decrece por los flatlanders), y que el espacio-tiempo es en realidad unosolo y no dos, ni tres, ni cuatro.

En otros asuntos, las dos campañas mediáticas más evidentes son la política y la epidémica. A ver cual tiene más éxito. Tanto cubreboca azul o blanco me parece moderadamente macabro para campaña de colores corporativos y partidistas.

5 de mayo de 2009

¿Espiar a los empleados?

El día que me dijeron que se estandarizarían los sistemas operativos del changarro bananero para el que trabajo, a windows (sin especificar si XP o Vista), me molesté muchísimo y me puse a lanzar diatribas con algunos amigos vía chat. Soy un usuario de GNU/Linux convencido de que en el ambiente laboral no le pide nada a los sistemas privativos, quizá como consola de juegos se quede corto comparado con windows, así como en ambientes de diseño gráfico comparado con apple. Pero para programar, documentar, escribir, calcular, proveer servicios de seguridad, así como casi todos los servicios web sensatos que se puedan imaginar es superior, no, no está a la par, se la mata a los demás. Con la ventaja adicional de que es software libre, esto quiere decir que es un sistema que soy libre de usar, estudiar, modificar y compartir con mis amigos y colegas sin incurrir en ningún delito por ello.

En mis exhabruptos por chat asumí una postura totalmente antagonista a mis empleadores. Le comenté a mis amigos que denunciaría a la empresa por usar todas las licencias pirata de los productos de microsoft y adobe, y, que como yo estaba haciendo algo perfectamente legal y "ético" al denunciar las malas prácticas de mis empleadores ante las empresas afectadas no debía haber represalias, y que si las había, iría también al seguro y denunciaría la otra transa que hacen de declarar mucho menos de sueldo que lo que en realidad le pagan a sus empleados, con lo que finalmente pagan una aportación minúscula a la institución de salud pública para los trabajadores y al fondo de pensiones (y se clavan el resto). Todo eso lo dije, sin pensar en tener que hacerlo, porque de algún modo sabía que todavía podría defender ante la dirección mi uso de GNU/Linux, y tal vez dejándolo como último recurso si veía que me querían obligar de verdad.

Al día siguiente la empresa ya tenía un plan de regularización de las licencias, y habían designado a varios encargados de revisar la legitimidad de las mismas. Me pareció rarísimo todo, pero como había compartido mis diatribas con varios compañeros de la oficina pensé en algún "traidor", nadamás. La verdad tenía que pensar más mal. Desde ese día dejé de ser tan bien visto por los jefes, quienes empezaron a hablar mal de mí frente a otros "leales" compañeros que sin entender bien porqué me dijeron que había cierta repentina saña en mi contra en los altos mandos.

La semana pasada me contactó por chat mi primo de italia para preguntar como estabamos todos, esto por las noticias de la gripe porcina, y hasta me hizo varios chistes fonéticos respecto a los funghi porcini, fue una sabrosa y breve charla bastante aligeradora. Media hora después me mandó llamar el director para preguntarme si hablaba italiano, porque dizque estaban presentando a un cliente una cotización y en ella le decían que en la empresa también manejábamos el italiano...

Fue extraño, a partir dese momento estoy algo tenso, adquirí la convicción de que me espian las comunicaciones, y que al viejo estilo de la STASI, se toman muy en serio las palabras dichas a la ligera. Por eso ahora debo buscar chamba y/o esperar ser despedido "justificadamente", lo cual, a no ser que se diera con una abultada liquidación, no les ahorraría el pleito del seguro. Ya veremos cual de las dos llega primero.

4 de mayo de 2009

¿escuchar = entender = acuerdo?

Hace no mucho fui culpado por mi musa de que no la escuchaba. Situación que me dejó de a seis, porque por lo general cuando ella habla la escucho con atención y la dejo terminar, y analizo internamente los detalles de lo recién expresado para poder responder con ingenio o cordura. Me ofendió bastante esa acusación que me pareció injusta. Posteriormente salió el "no entiendes", porque por lo visto no estaba haciendo el esfuerzo necesario para buscarle un significado más hondo a sus palabras y actos, y como yo no cedía en mi forma de interpretar lo que estaba escuchando y viendo, me dijo finalmente que no me importaba lo que ella sentía. Total que ahora soy sordo, tonto e insensible.

Otro día, le platicaba por chat el incidente a Rodrigo, y él nuevamente quizo hacerla del abogado del diablo. Entonces me dio una interpretación de lo que había pasado, y remató con una metáfora que la verdad me pareció ligeramente estúpida. Entonces yo le expliqué porqué no me parecía correcta su idea, y resultó que tampoco estaba escuchando. Carajo, pos no, estaba leyendo su enunciado (pero escuchándolo con el oido de mi mente). Dejando de lado estos detalles, medio me retracté y expliqué, según yo a fondo, las implicaciones de la metáfora sin rechazarla, "¿ahora estoy escuchando?" le pregunté, y me respondió que eso parecía. Muy bien, así terminó el chat ese día.

Pues bien, me parece que está habiendo una gran confusión semántica entre los conceptos: escuchar, entender, y estar de acuerdo. Es decir, si al momento de responder a una oración, lo que digo tiene que ver con lo que se me acaba de mencionar, quiere decir que lo escuché; si puedo explicar lo que se me acaba de decir en varios términos y desde distintos matices, quiere decir que lo entendí; y si con todo, habiendo escuchado y entendido, no estoy de acuerdo, y además explico porqué no estoy de acuerdo, me parece una necedad (¿o negación?) regresarlo todo a los momentos previos de la escucha y del entendimiento. Por lo tanto dejo aquí algunas definiciones con las que tal vez mis interlocutores no estén de acuerdo, pero la institución del castellano sí.

escuchar
1. tr. Prestar atención a lo que se oye.
2. tr. Dar oídos, atender a un aviso, consejo o sugerencia.

entender
1. tr. Tener idea clara de las cosas.
2. tr. Saber con perfección algo.
3. tr. Conocer, penetrar.

de acuerdo
1. loc. adj. Conforme, unánime. Estar, ponerse de acuerdo.

3 de mayo de 2009

Desmentir y compartir responsabilidad

Cuando niño, veía los pleitos de mis papás constantemente. Mi mamá era super azotada y violenta, mi papá se limitaba a desmentir, y mencionar la igualdad de responsabilidades en algunas dinámicas destructivas, y a esquivar (sin mucho éxito) lámparas o platos arrojados hacia él (sin mucho tino). Claro que mi papá lo hacía subiendo el tono de la voz, pero él nunca le puso un dedo encima a mi mamá, y eso me quedó claro desde el principio.

En la actualidad me veo seguido en la necesidad de desmentir y remarcar la igualdad de responsabilidades, todavía alzando la voz algunas veces, es curioso que repita los patrones de conducta observados durante la infancia.

¿Porqué desmentir?, porque si llegan y me dicen que lo que yo quiero es intimidar o someter (por mi súbita subida del tono de voz) sé que no es cierto, sé que se está diciendo una estupidez, que me lastima esa visión de mí por falsa o miope, y se hace necesario que yo provea otra interpretación. O al menos así es como lo veo. Ya después, más calmado, sé que estuvo mal alzar la voz, que aunque no lo hice con los fines "denunciados" lo hice, y eso permitió que se denunciaran esos inexistentes objetivos. También sé que si yo me comportara siempre ecuánime sería síntoma de que todo me da igual.

¿Porque mencionar la igualdad de responsabilidades?, pues porque si se me está acusando de valemadrismo hacia la relación con una sentida actitud hostil, sin aceptar disminuir la intensidad del conflicto, la indiferencia hacia ese viejo y maltrecho impulso que era querer compartir amablemente el destino se vuelve recíproca. Porque precisamente, no hay incondicionalidad, yo estoy aquí porque me gusta su compañía no por ninguna culpa o condena, pero últimamente, ¿de verdad me gusa?

¿Cómo hacerle para debatir sin encenderme nunca?, ¿para reclamar sin ofender?, ¿para solicitar sin que del otro lado se pretenda demostrar un abuso?, ¿para no destruirnos mutuamente, o lo que queda de nosotros? (si algo queda), ¿para volver a compartir?, ¿para seducir a la otra parte? Lo ignoro, de momento estoy bloqueado, pero definitivamente me encantaría saber.