Día en Boston

Hoy Armando y yo nos levantamos a las seis, o bueno, siete de aquí. Fuimos al aeropuerto y rentamos un coche. Salimos y buscamos y encontramos un Mall. Resulta que los malls son centros comerciales como Santa fé pero en más grande. Lo que estábamos buscando era un super para hacer algo de despensa (agua, fruta, y alimentos varios para no gastar tanto en comida todos los días), nos quedamos a desayunar en la sección de comida rápida (otra vez chatarra, lo mismo de toda la semana).

El camino de Manchester a Boston fue rápido y fácil, sólo se toma la 93 y se conduce el vehículo por esa autopista hacia el sur. Esa misma tomaremos mañana para ir a Tilton, en donde hay un outlet, aunque iremos hacia el norte, sin necesidad de salir de New Hampshire, estado sin impuestos (Massachusets cobra el 5%).

Llegamos como a las once. Hacía un calor infernal. Estacionamos el coche en un lugar que cobraba 9 dólares por todo el día (hasta las 12 de la noche). Salimos y caminamos y caminamos para conocer. Fuimos a una librería donde "para variar" me dio un fatídico ataque de compras, de ahí decidimos ir al museo de ciencias naturales (carísimo) en donde entramos a una función de cine en 3D: Tiburones, hermosa, aunque la había visto con Valeria en el acuario de Boston, cuando vinimos el año pasado a festejar su cumple. Visitamos el museo, y volvimos a comer chatarra en el fast-food del museo. En esta ocasión tomé video de ciertas cosas que me interesaban y que postearé más adelante.

En seguida fuimos al MIT, escuela tan bonita que me parece que si así hubiera sido la UNAM (yeah right, I wish) sí hubiera cursado la carrera (y eso que amo a la unam, creo que es una gran escuela), tiene un pasillo enorme que ellos llaman el "infinite corridor", donde hay letreros que hablan de "beyond infinite" o más allá del infinito.

Luego nos fuimos caminando por una calle que denominé "La condesa" de Boston, llena de restaurancitos fresas con mesitas afuera donde gente bonita estaba sentada viendo pasar a otra gente bonita que a su vez los veía consumir. Buscamos un bar para echar la chela en la zona irlandesa, y bebimos un par de vasos mientras deleitábamos la pupila con más gente bonita. Nos fuimos como a las 10 (hora de aquí) y escribo mientras viajamos de regreso a Manchester.

Anhelo llegar al hotel con conexión a internet y establecer contacto con Diana. A quién extraño infinitamente, y más allá.

Nota: En el estacionamiento olvidé mis cigarros, así que fumé hasta la noche.
Nota2: Estoy tronadísimo, con rodillas adoloridas de tanto caminar, cuerpo deshidratado del calor, e ingles rozadas (por lo menos no moradas ni azules :-P ).
Nota3: Llegué al hotel, me conecté, saludé a D y ella estaba igual de tronada, aunque por otros motivos: en su blog hay tal extensión de texto nuevo que sé que pasó la noche escribiendo (ya me lo confirmó). Tengo muchas ganas de leer lo que dice.