2 de noviembre de 2012

Procrastinación invertida

Antes procrastinaba con el blog, es decir, tenía cosas que hacer con mi vida, cosas que en teoría tienen una prioridad más alta que escribir, y para no hacerlas me ponía a bloggear. Y así el blog se fue haciendo parte de mi vida, parte de mi forma de ser, una parte importante, tan importante que hoy en día sé que tengo que escribir, que es un compromiso personal cotidiano, una especie de deber propio, y entonces me pongo a trabajar en programas de software para no bloggear. Qué rara es la vida, antes bloggeaba para no trabajar o hacer las-cosas-importantes y ahora que ya oficialmente (al menos para mí) el blog es algo importante, procrastino al reves, para no bloggear.

Digo, esto que escribo no es algo que tuviera perfectamente conscientizado (o al menos no hasta ahora). Nada más me pongo frente a la pantalla del blog, veo la etiqueta que toca (vida, iDeas g, internet, reflexiones, estrategia, cómo, porqué, trabajo, lecturas) y me da una especie de pánico de ya no saber qué decir (¿será que ya no tengo nada que decir?) y prefiero darle la vuelta, ponerme a hacer otros pendientes, y conforme pasan los días y me atraso más y la presión se vuelve mayor, más pánico, claro, hasta que por fin tomo, aunque sea parcialmente (porque ni de broma voy a escribir todos mis posts atrasados de un jalón), al toro por los cuernos. Supongo que mañana o pasado me pondré a buscar una nueva traducción con la que compensar mis faltas y emparejarme con los posts.

¿Y de qué sirve concientizar esto, si una parte de mi quiere seguir escribiendo y practicando y jugando con las perras negras, pero a otra se resiste?, ¿será que me tego que librar del compromiso y dejarme fluir según me de la rechiflada gana? Sí, esa es la receta perfecta para no hacer nada... Pues no señor, así, con objetivo definido, con yugo, órele, a bloggear.

1 comentario:

Fermin Lobo dijo...

Excelente reflexion a mi me sucede lo mismo con frecuencia por ejemplo cuando me tocaba leer para examenes diseñaba paginas web, para no leer... pero hoy que tenia que acudir a hacer unos mandados-compromisos me pongo a leer para no hacerlos que raro, feo pero de algun modo atrayente es el modo de vida procrastinador no...