Pero si criticar es pararse en una tarima, ¿qué pasa con la autocrítica? Supongo que si el que critica se siente superior, el que ejerce la autocrítica de verdad es superior, y en ese sentido y con afán de ser balanceado, pongo a continuacioń uno de los comentarios con autocrítica:
"Entonces de donde toman el derecho de tratar de idiota a otro? Yo comparto 100% lo que piensa usted. Tiene que haber un cambio de conciencia. Lo que pasa es que no podemos forzarlo. Porque caemos en algo sectista, Tengo mucho tiempo de ser vegana y cada día que pasa me molesta más la postura de muchos veganos. Cuando me comparan con los testigos de jehová que tocan puertas, no puedo nada más que bajar la cabeza, porque se de muchos veganos que pasan el día completo tratando de convertir a otros. Así no son las cosas, al menos no en mi caso. Y tal vez con esto me echo a mil veganos encima, tal y como sucede cuando alguien de equis religion piensa fuera de ese canasto. Siento que hay mil maneras de acercar a la gente al veganismo, y no de esa manera. En este mensaje queda muy claro que muchos veganos si se sienten superiores. Uno no debe tratar de idiota a nadie. Piense como piense."
Por fin alguien del grupo que piensa chingao. Y no alguien que por formar parte de un colectivo cierra los ojos a las estupideces de otros de los miembros. No sólo uno no debe tratar a nadie de idiota (a menos que desee provocar alguna reacción), sino que nadie tendría que estar cuestionando la integridad moral o ética de quienes no comparten sus gustos gastronómicos, o su sensibilidad para con otros seres.
En este caso, mi postura es la siguiente: igual que una corporación no es una persona, igual que la madre naturaleza no es una persona, los animales no son personas. Otorgarle derechos a los animales, la naturaleza o las corporaciones no tiene sentido porque los derchos tienen de contraparte a los deberes.
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