Por todos estos años, yo estaba viéndolo del modo equivocado -- Creía que las voces estaban ahí porque yo era un verdadero inútil y porque siempre estaba atrasado en todo. Pero eventualmente, después de demasiado tiempo, empecé a darme cuenta de que estaba de hecho bastante avanzado, cuando me comparaba con la persona promedio de mi edad. Lo que no quiere decir que creyera que era una persona inusualmente buena o valiosa de ninguna manera. Aunque solamente en la medida bruta de "Cantidad de madres acabadas hasta ahora", se había empezado a acumular evidencia de que había estado logrando terminar con una cantidad mayor al promedio de madres. Estaba apareciendo como la evolución de mi carrera, el dinero y las cosas materiales acumuladas, innumerables proyectos concluidos aquí y alla cerca de mi casa. Por todos lados hacia donde volteara, veía algo en lo que había pasado algunas horas. Este blog ya casi llega a mil entradas. La barda tiene ya otros 80 pies. En resumidas cuentas, todas las cosas en las que supuestamente era un inútil y siempre era regañado. Si todas esas madres de verdad estaban siendo hechas a buen ritmo, ¿entonces cuál era el problema? ¿Por qué los regaños?
Eso me llevó a una revelación: Esas voces regañonas no son la medida de tu falta de valor o de logros. ¡Son un componente indispensable de una persona exitosa! (Aquí estamos nuevamente definiendo estrechamente "éxito" como el lograr concluir un montón de madres, lo que algunas veces lleva a la riqueza monetaria). Si no tuvieras las voces regañonas, nunca te sentirías obligado a hacer ninguna de las cosas más difíciles en la vida, y por lo tanto nunca llegarías a ningún lado.
Antes de darme cuenta de eso, el único modo de ser feliz es estar trabajando afanosamente en algo. Es dificil disfrutar lo demás. Pero una vez que descubres su verdadera intención, puedes finalmente hacer amistad con las voces, y estar agradecido por ellas. Van a seguir metiéndose y haciéndote desvelarte ocasionalmente, como me están haciendo en este instante. Pero se vuelve un buen tipo de mutuo entendimiento. Sé que la vida es mejor cuando tenemos un equilibrio entre trabajo y juego, ya que los retos y los apuros son ingredientes clave de la felicidad. Pero hacer amistad con las VRE podría permitirle a los workahólicos deslizar la balanza al menos en alguna medida alejándose de la modalidad "trabajo".
para terminar con un ejemplo paralelo, podrías haber empezado a ser visitado por las Voces Regañonas de la Frugalidad (VRF). Esas son las que cuestionan cada una de las compras que piensas hacer. Te recuerdan que siempre hay un mejor propósito para cada dolar que llega a tus manos, y por lo tanto ocasionalmente le quitan lo divertido a las cosas en las que de verdad se tendría que derrochar. Puedes pelearte con las VRFs, o puedes hacerte su amigo y agradecerles. Esas pequeñas amigas se asegurarán de que nunca te metas en problemas financieros por el resto de tu vida, y en conjunto con las VRE garantizarán virtualmente muchas riquezas, eventualmente. El reto es entonces aprender cuando cerrarles el pico el tiempo suficiente para disfrutar un helado o hasta un buen hotel de vez en cuando, mientras que le permites a su poder natural guiarte el resto del tiempo.
Acepta a las voces regañonas y prospera.
¡Feliz Lunes!
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