Del miedo al odio al lado oscuro

Mi hermana me regaló un libraco enorme de un desconocido evidentemente francés: Jean Delumeau. Claro, desconocido para mi ignorante persona, porque es un reconocido historiador especializado en el cristianismo. El miedo en occidente, salió en 1978, acotado a los paises europeos en el periodo entre los siglos XIII y XVII, habla de todas las manifestaciones registradas del miedo.

La primera parte empieza con miedos generales: al mar, a lo lejano y lo próximo, a los maleficios, a los aparecidos, y a la noche. Luego se clava en el miedo a la peste, y el miedo durante la peste. Concluye con el miedo a las sediciones y revueltas. En la segunda parte, haciendo uso de cientas de citas de la época, comenta acerca del miedo al castigo divino y al fin del mundo, y más adelante, el miedo a Satán y sus agentes (idólatras, musulmanes, judios, mujeres y brujas).

A lo largo de toda su exposición se entiende que el miedo de los simples permea hacia arriba entre las capas sociales, y se manifiesta de regreso en forma de odio, satanización y represión de lo desconocido. ¿El hombre (con poder) no logra entender a la mujer?, entonces estas deben ser inferiores y hasta malévolas, hay que cuidarse de ellas, son brujas seductoras al servicio del diablo a las que hay que apalear como animales de carga, etc. ¿Qué produjo todo ese miedo/odio?: las carnicerías de la santísima inquisición. Gracias sean dadas al Señor.

El libro es bueno, el autor una eminencia y se entiende que ha navegado el pergamino. Hasta participó en una obra con Umberto Eco y otros dos historiadores (Conversations About the End of Time). El problema es que seicientas cuarenta páginas de documentos medievales con supersticiones, prevenciones, juicios, prejuicios y condenas de lo incomprendido, me parecieron demasiadas, pero yo no soy un entusiasta ni un estudioso de esa época, y si lo fuera mi tema serían los descubrimientos científicos u obras de alguna de las turas.

Debuggeando

La parte web de la aplicación ya cumple con el funcionamiento para el que se diseñó. El login ya valida el acceso, los formularios ya meten información, los reportes ya despliegan, se puede editar y borrar, etc. Ahora estamos en una fase delicada, que consiste en revisar cada parte, haciendo errores intencionales (pasarse del número de caracteres, poner mal una fecha) para verificar que la navegación será sólida y directa, y no habrá pantallas con errores indescifrables. En esta etapa siempre surgen grandes cantidades de tickets que registran las reparaciones pendientes.

Por otra parte, perdimos liderazgo. Rodrigo, quien tiene más visión, conocimiento y experiencia con las compus y los programas, el que mejor sabe desglosar un requerimiento, asignar sus componentes, y presionar/ayudar para que salga la chamba, cayó víctima de un mal que se complicó, y acabó siendo hospitalizado/operado la semana pasada: su vesícula se autodestruyó pero lograron extirpársela a tiempo. Ojalá se recupere pronto y regrese a nuestro lado, nos hace falta no sólo como cabeza del área de programación, sino también porque su personalidad es genial y su compañía estimulante.

Adicionalmente, ayer nos presentaron al nuevo director de operaciones. Se llama Javier pero no recuerdo su apellido. Necesitamos saber qué tanto interactuará con nuestra área, para afinar comunicaciones.

Una sola vida

La astrología tiene dos facetas en la actualidad: una sirve como mapa mental de los posibles peligros y oportunidades que se acercan al individuo según un cálculo anual, la otra es una adopción del esquema indú de reencarnación según el cual si eres malo te hundes y si eres bueno te elevas (en vidas sucesivas, hasta alcanzar otro nivel de conciencia y renacer en otro mundo mejorado).

La parte de la reencarnación es muy importante porque, ¿cómo explicarse una existencia condenada a la miseria, si no es por causa de un castigo temporal y con posibilidad de redención? Pero, ¿por qué se te castiga? Porque tu ser hizo daño en la vida anterior. ¿Es decir que eres culpable de lo que no sabes o recuerdas? En efecto, y además, tú fuiste tu propio juez, pero de eso ya nada tienes que resolver, ahora se trata de vivir esta vida con dignidad y aprender a construir sin dañar, de modo que a la próxima nazcas bajo mejores estrellas. Claro que para esta vida jodida que te tocó, el universo es taaaaaan generoso, que además nos dio pistas en las cartas astrales y los retornos solares, conocimiento del cual te puedes beneficiar.

¿Y si te sientes cansado y no quieres volver a nacer? Non puoi, c'est impossible, you can't, no se puede. Tu ser tiene una misión cósmica ineludible en esta realidad, y aquí reencarnarás hasta que la cumplas (parte de cumplirla es descubrir de qué se trata y no acumular karma negativo).

Le pregunté a mi papá, que cree en esas cosas, que ¿por qué le parece tan difícil imaginar que cuando uno muere se apaga el mundo individual mientras todo sigue? Porque carecería de sentido, me dijo. ¿Y si mi vida es disfrutar el hoy con mi musaprincesaamada, y dejarle alguna pista de mi pensar/ser a los hijos de mis amigos, mientras mantengo un frágil y complejo equilibrio político-emocional-espiritual-económico con mi entorno social? sin aspirar a más vidas ni más oportunidades, ¿carezco también yo de sentido?, ¿o tal vez de ambición?

Cómo ir organizando el parecon

En este momento hay seiscientos profs en huelga en un colegio demandando mejoras salariales mayores a las ofrecidas por sus empleadores. Este juego simula una posición de poder de un grupo (o nos dan más o se detiene la producción del conocimiento), mientras que afirma tácitamente la de los empleadores. ¿Por qué? Pues porque si las autoridades logran disolver la huelga con un 1% más de lo que ofrecieron originalmente, ganan y se mantienen con las riendas, mientras los huelguistas regresan a la sumisión de sus puestos sin haber logrado mucho.

Hay que ver también los objetivos. Nunca he sabido de una huelga que busque la quiebra o el cierre del lugar en que laboran sus miembros. Tampoco de alguna que busque derrocar a los dueños, gerentes o directores para cambiar profundamente la estructura administrativa o la de reparto del dinero (¡Entraría el ejército!). Casi siempre se clama por un aumento equiparable con la inflación u otros indicadores "justos", para dejar las cosas como estaban y regresar a lo conocido del viejo empleo, a la zona de seguridad.

¿Cómo debería organizarse un movimiento que fortaleciera a los grupos no poderosos, y sustrajera el reconocimiento a las élites? En principio debe ser un movimiento que ni siquiera trate con los jefes, algo que el grupo haga para beneficio propio, de manera horizontal. La idea no es hacerlos más fuertes para mejorar las posibilidades en la siguiente huelga, sino para ir rompiendo la dependencia económica que hace que se hagan esos simulacros de negociación entre poderes desiguales. Una vez rota dicha dependencia, los individuos participantes podrán decidir más según su conciencia y su moral que según el tiempo que les quede de alimento para sus familias en el refrigerador.

relación maquínica

¿Quién es el blog? Sé que me expreso incorrectamente, puesto que es un mecanismo para publicar en la web. Pero me he percatado que tengo una cita diaria con él (¿o debería decir con ello?), que explico cosas en este medio, que después me obligo a cumplir (como el ir de compras y refactorizar la tabla de gastos). ¿Es un ente que me compromete?, ¿un impulso?, ¿un capricho?

Otro ejemplo, en el post de Lecturas futuras y presentes dije la lista de libros que leería para referir aquí, dentro de poco empezaré el Ulisses. El libro de Delumeau ha sido largo y tortuoso. Así, aunque también leí otros libros, he seguido el programa que me puse con anterioridad aquí, en el blog.

¿un mecanismo, un lugar, un ente? Esto, aquí, él. Guattari en su teoría maquínica lo pondría como un engrane de una máquina autopoiética en la que me empalmo, que me confiere cierto grado de realidad y cordura social, etc.

Inicio de captura del 2007

Después del éxito obtenido en la captura del 2006, no hice nada más. No he iniciado la captura del 2007 en parte por falta de dedicación, y también porque siento que hay campos ambiguos en mi hoja de cálculo de captura, que quiero modificar para el 2007 para detallar mejor.

En el de Marca, por ejemplo, a veces hay confusión entre el nombre del producto y el del fabricante, como en el caso de los platanitos fritos Sunshine de Sabritas, ¿debo poner Sunshine o Sabritas?

Otro campo ambiguo es el de Presentación o unidad, que se ha vuelto caótico y diversísimo. Esto porque ahí se ponen: pieza, bolsa, frasco, lata, envase, empaque, sobre, garrafón; junto con las unidades, kilo, gramos, miligramos, mililitros, litros, onzas, etc. Creo que ese lo subdividiré en tres o cuatro nuevas categorías: empaques, unidades, cantidad/unidad y piezas/empaque.

Otra ambiguedad existe en el campo Lugar, ya que puede ser el establecimiento o la dirección, por lo general nombro a la tienda (pero cuando he viajado, he puesto la ciudad).

Total que primero debo terminar de refactorizar mi tabla de captura, y luego empezaré a vaciar la información.

Reabastecimientos periódicos

Por falta de tiempo dejamos que se vaciara la alacena. No sólo la alacena, sino también el refrigerador. Ya no tenemos ni servilletas (ayer saqué las que vienen con los cafés a domicilio), ni pañuelos faciales. Supongo que estaremos tocando fondo también en los jabones y limpiadores... Por lo que hoy será necesario ir de compras.

La estrategia que nos proponemos llevar a cabo consiste en a) levantar inventario de lo que hay (y ver para cuanto alcanza lo que queda), b) hacer una lista de lo que necesitamos comprar no perecedero y plantear cuanto queremos que nos dure, c) generar un plan de alimentación quincenal o mensual, para hacer la lista de los perecederos, d) hacer una expedición al supermercado.

Como la preparación previa será ardua, quizá vayamos hasta en la noche... Me gustaría lograr una planificación que me permitiera un gasto a la quincena en verduras, uno al mes en perecederos empacados y uno trimestral en todo lo químico. El objetivo: disminuir al mínimo mis gastos diarios.

En la mudanza de los sitios

Hoy copié todos los archivos que tenía en Dinamarca a una máquina llamada Lonana, en riccimaq. En ese equipo tengo dos discos de 400GB, así que sin mayores problemas saqué TODO del carísimo hosting de 80 Euros al mes.

Las razones de mi elección de ese proveedor fueron: a) el ancho de banda que permitía servir el sitio en flash de axevice a n visitantes simultáneos, b) la instalación del GNU/Linux de mi preferencia (ubuntu), c) cuenta de ssh para administrarlo a distancia, y d) infraestructura a prueba de fallos.

En riccimaq el ancho de banda es minúsculo, pero por el momento no necesito uno mayor, el único problema ahí es que como no hay la redundancia que en dinamarca, la ip cambia cada que se va la luz o Telmex resetea sus DNSs, y tengo que restablecerlo manualmente en el sitio de mi proveedor de redireccionamientos.

La cosa no acaba ahí, aunque ya tenga los archivos en Loana, debo moverlos a Rayuela, la máquina que la hace de servidor web. Una vez hecho eso, debo configurar los sitios en el apache y el mysql. Cuando termine esa parte debo redirigir el nombre de los sitios hacia la ip que tenga riccimaq.

Luego, a falta de ip fija, debo pensar muy seriamente en un mecanismo que le indique automáticamente al sitio direccionador de nombres cuando la ip en riccimaq cambie. Tengo aproximadamente quince días, luego vence en Dinamarca el hosting y ya no volveré a contratarlo (Nota: sería amable de mi parte avisar a los de panic-magazine --antes picnic-- de estos cambios).

Filmografía personal aumentada

Las últimas tres semanas he visto ocho películas: tres con D, una en el cine con los cuates de la oficina, y cuatro yo solo en la compu del trabajo. Mi amada y yo vimos Sexto sentido y The sunshine boys (con el Woody tan sólo de actor) el mismo día que las rentamos. Las dos nos parecieron mediocres, la primera trata del espíritu de Bruce Willis ayudando a un niño que ve fantasmas, mientras que la segunda es una comedia de tensión situacional acerca de dos ancianos ex-actores cómicos (los cuales se odian tras años de trabajo juntos), que intentan reunirse nuevamente para un último acto. Los papás de mi dulce musa nos prestaron algunos días después la de Pídele al tiempo que vuelva, con superman actuando como un pésimo planificador de viajes en el tiempo, que termina iluminándole-jodiéndole y viceversa, la vida a una persona hermosa. Dramón que no causó el efecto programado en nosotros, porque preferimos nuestra vida juntos en presente a la añoranza del instante perdido.

Los compañeros oficineros organizaron (tras jugar mucho Ghost Recon) que fuéramos al cine a ver John Rambo. Resumen: meter a unos activistas humanitarios desarmados a zona de guerra - 4 malos muertos; sacar a los activistas humanitarios restantes tras la captura/tortura - 6 buenos y unos 300 malos muertos. Moraleja, los activistas deben quedarse en casa o causarán desastres tremendos aunque minimizados por suceder entre orientales tercermundistas. Producción estandar (mala) de propaganda del "invencible" guerrero americano.

Rodrigo ha estado bajando películas distópicas que me he puesto a ver para relajarme. La primera que vi trata de una chica punk (Tank girl) que derrota a una gran corporación monopolizadora de agua, el mundo es un gran desierto y los malos muy crueles, la película tan mala que mencionarla me apena. Stalingrad narra la historia de algunas tropas alemanas enviadas a combatir en la destrucción de esa famosa ciudad que nunca fue tomada. Le dernier combat es la primera de Luc Besson: quedan pocos sobrevivientes tras algún cataclisma y ninguno de ellos puede ya hablar, muestra la forma en que logra sobrevivir el personaje principal a un medio hostil, sin ninguna esperanza de comunicación. Silent Running es la historia de un sujeto enamorado de la flora que hay en su nave espacial invernadero cuando la tierra ya no cuenta con vegetación, y su lucha para salvar a las plantas de la destrucción ordenada por el alto mando.

Las últimas tres me parecieron excelentes, la de Stalingrad, si bien no es propiamente distópica (en cuanto a un futuro que se nos volteó) es cruda y cruel, la guerra es infernal; la de Le dernier combat es minuciosamente internacional por su carencia de diálogos, y no necesita proveer explicaciones de nada de tan bien hecha; la de Silent Running es setentera y se le perdonan los pinchi-efectos, los anuncios de marcas gringas y la visión tecnológica obsoleta, porque el drama humano también está buenísimo. Fue periodo de bonanza fílmica, ¿que otras veré próximamente?

En el medio evo

En el baño de la oficina leí las instrucciones para formar un ejercito medieval que están en un librito llamado El arte de la guerra, de Machiavelli. Quién, por medio de su alter-ego Fabrizio Colonna, explica a sus jóvenes huespedes imaginarios la mejor forma de organizar un ejército, que en aquel entonces le hacía falta a Florencia. Era con formaciones de infantería a la romana mezcladas con suizos con picas largas y una caballería ligera. En lugar de tropas de mercenarios (preferidos por la mayoría de las ciudades de ese entonces), debía formarse la fuerza con habitantes locales.

Explica las distintas facetas para lograr una armada "invencible": la selección de las milicias, el entrenamiento, la disciplina, cómo dar batalla, marchar, acampar, asediar y defenderse. Me gusta cuando habla de la caballería: los caballos no son animales estúpidos, dice, no se van a estrellar contra las picas, por lo que repelerla con infantería bien preparada es fácil.

Aún cuando desdeña sin mucha razón a la artillería, según lo poco que sé de esa época, me parece un libro muy sensato. Claro, en papel se pueden ganar todas las batallas, teóricamente, pero en la vida real depende de muchos más factores. Es información histórica interesante, que funcionará tal vez en la actualidad sólo para batallas entre granaderos y civiles sin preparación bélica, pero es obsoleto para la guerra de nuestros tiempos, en la que con un par de ametralladoras y algunas granadas, acabarían en minutos con las disciplinadas legiones de Machiavelli.

El 264

Me tocó hacer un reporte de productividad de unos agentes telefónicos. Productividad es igual a saber qué hacen durante el periodo que están conectados. Cuánto tiempo se ausentan, cuanto están recibiendo llamadas, cuanto haciéndolas ellos, etc. Para lo cual se usan dos tablas, una de eventos y una de llamadas. Esa información se extrae de la combinatoria de cuatro marcadores temporales.

Por ejemplo, si quiero ver el reporte para la fecha X, hay un meta-periodo desde las 00:00:00 hasta las 23:59:59 del día X, necesitamos todas las llamadas y eventos que: a) empezaron antes del periodo y terminaron dentro del mismo, b) todo lo que empezó y terminó dentro del término reportado, c) todo lo que empezó ahí pero terminó después, y d) todo evento o llamada que empezó antes, y terminó después. Mientras escribo esto, me doy cuenta que la cláusula c está incompleta en el programa hecho hasta ahora y al rato tendré que refactorizarla.

Éste es el último ticket que falta de la interfaz web, acabado este detalle habremos terminado esa aplicación que ya "nos tomó demasiado". Ya hay una serie de proyectos encima (iba a decir en puerta, pero en verdad ya los tenemos encima), que necesitamos desglosar y producir para ayer. Que el santo, que bendito sea por siempre, se apiade de nosotros pobres programadores recién estrenados en java.

De lecturas requeterepetidas

Diana y yo volvimos a El péndulo de fucault. Nos divertimos, continuaremos con el de H. Zinn más adelante, creo. ¿Por qué volver a leer los libros?, ¿no debería la memoria retener todos los datos y hacer que uno pudiera evocar sin mayor esfuerzo los pasajes, el órden, las conexiones, la tensión, los desenlaces, etc?

Pues no, la memoria, o al menos mi memoria, no funciona de ese modo. Para mí, cada vez que leo uno de mis libros favoritos es un mar de descubrimientos. Aunque sea la octava vez que lo hojée. Entiendo mejor lo que se dice, cómo se dice, y así poco a poco me formo en la mente una idea de la obra. Como un escenógrafo que como espectador desde la platea ve una obra de teatro e imagina con bastante claridad los artilugios que están detrás, moviendose y adornando en el mundo representado, al tiempo que disfruta el drama.

Tampoco me funciona leer la misma obra una y otra vez sin pausas entre las lecturas, porque todavía está muy fresca en mi memoria. Las que son mis favoritas entran en ese círculo después de una primer lectura conmocionante. Pero de ahí a la segunda o tercera, se intercalan varias más de otros libros. A mí me sirve volver a los libros que me han shockeado positivamente porque gracias a mis nuevos descubrimientos (que indican hasta cierto punto mi crecimiento), también veo la misma "vieja" historia desde otro punto de perspectiva, y tal vez convivir con los ya amados personajes más de cerca, anticipando emocionado sus aventuras y previendo desolado sus desventuras.

Significados elásticos

En un principio, pensé que las categorías: reflexiones, cómo y porqué iban a reflejar una crítica, una propuesta, y una justificación de mi propio trabajo y modelo productivo. No me había dado cuenta que proponer cada nueve días es excesivo, igual que justificar propuestas. Yo lo veía más fácil. En términos autopoieticos, como un modelo con tendencia al auto-perfeccionamiento (que no a la perfección). Ahora dudo.

Estas tres categorías han sido más elásticas y tortuosas que esa idea inicial, suelen dificultárseme porque todavía no sé hablar exponencialmente: escribir de lo que escribí. Además, como bien lo dice Óscar no resultan atractivas. Ya por ser un ejercicio ocioso de autoavunculogratulación o por mi falta de habilidad para explicar las propias estructuras gramaticales y discursivas.

Siendo honesto, si tuviera que cumplir con proponer, propondría seguir igual que hasta ahora, con un calendario, tema por día, frases-idea para despejar el siguiente ciclo, y voluntad de anticipación. ¿Pero un post nomás para decir esto?, ¿y cómo lo justifico al día siguiente? ¿todo parece ir bien y nada ha sido cambiado?, ¿y por cuantos ciclos? esta carencia me obliga a proponer un cambio. Sin embargo será hasta el próximo ciclo, primero debo pensar.

¿Inteligencia voluntaria?

La inteligencia, según la wikipedia es un término sombrilla que agrupa varias habilidades relacionadas entre sí como son: la capacidad de razonar, de planificar, de resolver problemas, de pensar en forma abstracta, de comprender ideas, de usar el lenguaje, y de aprender.

Inteligencia viene del latín intellegere que significa entender. Por lo tanto ser inteligente (como entendimiento) es arguiblemente diferente de ser listo (capaz de adaptación al medio), y de ser astuto (capaz de adaptación creativa).

Las definiciones abundan. Para mí es una cualidad social de la especie (un hombre aislado por mucho tiempo, no se vuelve más inteligente) directamente relacionada con el lenguaje y potenciada por las demás herramientas comunicativas y productivas al alcance de los individuos. Por lo general cada ser humano puede entender razones y argumentar las propias con mayor o menor habilidad. Descarto los límites bajos (enfermos mentales) y desconozco, y tampoco creo en, límites superiores "milagrosos" (niños que nazcan sabiendo hablar, o que hablen perfectamente 20 idiomas a los 4 años de edad).

Dentro de un espectro muy amplio, el entendimiento se da según la experiencia vivencial de cada quien, así como dependiendo de la apertura hacia ideas que contrasten con las propias fijaciones. Por lo que creo que es imposible determinar márgenes de edad precisos. Es así como encontramos a personas de 50 años que siguen dando tumbos inconcientes mantenidos por mamá, simultáneamente a adolescentes sabios totalmente independientes. La inteligencia es como una planta que todos tenemos en la mente, pero ¿qué tanto se puede usar la voluntad para cultivarla y ampliarla?

Análisis del consumo

Después de pasar algunas horas capturando y extrayendo el condensado de noviembre y el de diciembre, y depurando los que ya tenía de los meses anteriores, saqué las siguientes tres simples gráficas con respecto al periodo mayo-diciembre del 2006, año que terminé de meter a una hoja de cálculo a principios de esta semana, son sólo unas muestras pero dan una idea de los análisis posibles con mi data personal (clic en las imágenes para acercar):



Por lo pronto tengo todo 2007 archivado en papel, esa información también tengo que pasarla a una hoja de cálculo o BD, y luego extraer los datos "relevantes". Va a ser interesante comparar un año con el otro, igual que un mes de un año contra el mismo mes del siguiente año, etc. Hay muchos datos que registré que no usé para estas gráficas, en ellas se muestra solamente la lana gastada por categoría (y sub-categoría). Ni el empaque, ni la caducidad, ni la frecuencia por tipo de producto específico, se toman en cuenta. Ahora bien, ese pico en noviembre se puede acercar más viendo las subcategorías que hay en Varios:



Aquí notamos que fue en Electrónicos, y en efecto, durante noviembre de ese año, mientras que fui a visitar por última vez a Francesco, compré la laptop desde la que ahora escribo estas líneas, además del ipod video, el micrófono para el ipod, y un disco duro nuevo para mi ya difunta ibook. En ese mes se me fueron casi 19Kpesos. Esto hace que todo lo demás se vea plano, pero si le quito el pico la gráfica queda así:



Mucho más claro. Como considero al cigarro un vicio lo puse en esa sub-categoría, podemos ver mi infructuoso intento de dejar de fumar de julio a noviembre. También que sólo me compré ropa cuando fui con Valeria a Boston para su cumpleaños. En cuanto a la sub-categoría mascotas, le compraba de vez en cuando las croquetas a la gata que teníamos en picnic, y como desde junio de 2007 no trabajo ahí, creo que pronto la aboliré. Pero, ¿cómo usar la información colectada para planificar mi consumo?, he ahí la cuestión.

servicios (casi) póstumos en web

D y yo extendimos la idea del documento de passwords. No sólo lo extendimos, sino que tenemos la semilla de una idea que podría ser un gran negocio en la web. Podría ser la nueva herramienta de seguridad para los que "saben demasiado".

Todos hemos visto alguna película en la que una persona tiene información comprometedora documentada con respecto a algún gangster o político, se entrevista con su enemigo y lo disuade de matarlo ofreciendo a cambio su silencio: "Si algo me pasa, los documentos han sido resguardados y a menos que yo de señales de vida cada x tiempo, se entregarán a la policía y los diarios". Son películas que suponen un orden de poderes separados y antagónicos en las que normalmente funciona este razonamiento: puse en marcha un mecanismo de difusión, el único que puede desactivarlo soy yo, por lo que ahora mi vida, y no mi muerte, tiene valor.

El servicio web que ofreceríamos sería sencillo. Por un lado recibiríamos documentos (papel y electrónicos) que resguardaríamos en algún bunker. Por otro solicitaríamos del suscriptor un listado detallado de a quienes entregar los mensajes y las pertenencias en caso de alarma. La alarma, sería un mecanismo que el usuario debería desactivar periódicamente (el periodo lo define el mismo usuario) por medio de una interfaz web tras una serie de passwords. Por supuesto el cliente recibiría mensajes en su buzón al acercarse la fecha de alarma para que acuda a desactivarla.

Para evitar errores o papeléo con actas de defunción, no investigaríamos: "No garantizamos que quien le envía este mail haya muerto, sino que nunca acudió a desactivar nuestro servicio".

Probablemente no sea tan atractivo para espías, periodistas o gangsters, que saben cómo funciona la movida y que los poderes se respaldan y compran los unos a los otros. Pero sí para quien se sabe en una ciudad violenta, y quisiera mandar póstumamente sus passwords a sus seres cercanos para que cierren sus cuentas y avisen a los spammers. Tal vez para los que no se atreven a decir lo que sienten a sus familiares y quisieran dejarles algo dicho, por si acaso.

Vencimientos varios

Hace poco vencieron varios nombres que tenía contratados. Uno era en el que pusimos el sitio web de axevice méxico el año pasado. Poco antes de que venciera pensé en renovarlo para extorsionar a axe y hacerme de un capitalito, mi plan era poner la foto de un gran falo como único contenido, para luego ofertar el nombre del dominio por al menos 100 veces lo que cuesta. Me entró la apatía, pensé que era meterme en problemas con una trasnacional (unilever) de a casi gratis y yo no sé nada de leyes así que ya mejor lo dejé así.

A final de febrero vencerá también el hosting de Dinamarca, el problema es sencillo: debo mover los sitios que tengo allá hacia otro servidor o pagarles más, y su rentita en Euros es una sangría a mi pobre bolsillo. He sido un desobligado en el mantenimiento de mi infraestructura web y no le saqué provecho, por lo visto no estoy listo para los negocios, pero mi trabajo y mis demás actividades no me han permitido más proactividad en ese frente. Creo que el mejor sitio para albergar mis pininos de sysadmin web será de momento el servidor del negocio de mi papá.

Todo se acaba, todo tiene fecha de caducidad. Por lo pronto tengo que revisar el vencimiento de los demás nombres y de-ene-eses, no vaya a ser la de malas y suceda algo catastrófico. Debo aprender a llevar el control de esas otras variables mientras manejo aquellas con que mantengo el status quo.

Formalización informal

El domingo después de nuestra boda ante la bóveda, Diana y yo organizamos una comida para presentar a nuestras respectivas mamás y nuestros respectivos papás. Realmente la habíamos organizado desde un par de semanas antes, la boda nocturna resultó una deliciosa coincidencia previa al compromiso. La cita fue en el Mercaderes, restaurant de calidad suprema: nos pasaron a un privadito y tuvimos casi de planta en la mesa a tres meseros, así como a un sommelier sugiriendo los vinos. Así fue la cuenta, pero el momento lo valió.

Yo comí un filete tiernísimo envuelto en pasta ojaldrada sobre una cama de crema de zanahoria, sublime. Mi papá ordenó los vinos y luego se arrepintió porque eran caros y quería cooperar con la cuenta (nosotros invitamos, nada que hacerle). La conversación fue amena y agradable, creo que todos salimos con un buen sabor de boca, literal y anímicamente. De ahí fuimos a dejar a los papás de Diana, luego los míos nos trajeron al departamento, entramos a llenarnos de caricias, cual debía ser durante la luna de miel, la cual más bien persiste indómita desde aquel 30 de diciembre glorioso en la historia de mi memoria y la memoria de mi historia.

Me gustan las ceremonias subrepticias que creamos mi musa y yo, son símbolos, signos, que para nosotros valen mucho más que los que venden las instituciones espirituales y legales de nuestros tiempos.

De El gran laberinto, de FS

En los primeros dos capítulos plantea la situación inicial (premisa de la aventura): un magimundo en el que a todos se les convoca al estadio para el partido del siglo, gratis, las personas entran pero no salen, el partido sigue por días y nadie parece querer regresar a sus casas. Fisco y Jaiko, los primeros héroes en aparecer, son chicos de catorce años que pasan su tiempo libre leyendo en la librería de Don Pantaleón, cómplice y consejero de los pubertos. Están preocupados por sus familiares que llevan días dentro del estadio y no dan señales de vida. Después de un rato deliberando deciden ir a buscarlos. Dejan entrar a los chicos al estadio y estos descubren algo horrible: los que entraron antes están embobados con los ojos fijos en la cancha sin que haya partido en ella, hay en cambio unos como mandriles que se mueven a cuatro patas. De repente uno de los hipnotizados grita gol, y al momento es despedido de las gradas/atraído hacia la cancha donde los mandriles lo devoran.

Se trata (como después se explicará) de los psicófagos, comedores de almas, los chicos preocupados por sus familiares y la renuencia de estos a irse de ahí, se encuentran después de un rato buscando la salida que parece inexistente, con los otros dos héroes de la novela: Sara y Arno (chica de unos trece y niño de aprox cinco) que también buscan la salida. En esas andan cuando una vendedora/bruja se les acerca y les dice cuál es su misión, si quieren rescatar a sus seres queridos, y cómo arreglárselas para salir. Les entrega una caja con ocho espacios para que ellos la rellenen con ocho letras, deben buscar las letras y luego volver al estadio a depositar la caja en un lugar cerca de la entrada. Los chicos logran escapar del "juego del siglo", y van a consultar a Don Pantaleón. Curiosamente este último personaje tiene un portal al mundo de los libros, en donde ellos pueden buscar las letras que necesitan.

Por medio del portal, que los transporta en un viento escarlata a libros y lugares distintos, en los capítulos siguientes viven varias aventuras durante las cuales Savater presenta algunos de sus personajes literarios e históricos favoritos, que dialogan con los jóvenes viajeros y los aleccionan. Los chicos casi siempre vuelven con alguna pieza del rompecabezas y algunas vivencias emocionantes. Al final la palabra era libertad, las letras se acomodan a la perfección en el estuche. Antes de salir de la librería, sufren el ataque de un psicófago en el que muere Don Pantaleón, y mientras Fisco y Jaiko distraen a la bestia, Sara y Arno corren al estadio a cumplir la misión.

Misión cumplida. El psicófago de la librería desaparece, los chicos van a auxiliar al agonizante Don Pantaleón; y las personas empiezan a salir del "juego", un poco desconcertadas y aburridas, fastidiadas (sin demostrar ninguna emoción por haber sido salvadas). Con la muerte del librero y la salida apática de la gente volvemos en el capítulo final a la "realidad", por ejemplo, la vendedora/bruja dio cajitas y la misma misión por lo menos a otros ciento cincuenta, y no era para menos; y como el tío de Jaiko ya nunca salió del estadio, el menor tendrá que ir a vivir a casa de sus abuelos a otra ciudad. Corazón roto de Fisco, y cada uno a seguir con su vida.

Fernando Savater como novelista para adolescentes es excelente. Esta obra es bastante limpia: la situación como excusa de aventura, la aventura como excusa de lección, las lecciones y el final aterrizador como invitaciones a la reflexión y a la lectura, y la reflexión como reconsideración de la situación. Asimismo, en el planteamiento del magimundo y sus componentes, se delimita de tal modo que sólo un necio protestaría si alguna solución le pareciera demasiado fácil (como desactivar al estadio malvado y a todos sus macabros súcubos con sólo poner la cajita en un buzón y apretar un botón). Este libro además nos lo leímos por turnos Diana y yo, lo que lo hizo todavía más mágico.

Cambios fatales en la arquitectura

Estábamos en la fase final de la programación de la aplicación web, cuando hubo más cambios. Ahora ya no se relacionaba al usuario con un solo grupo, sino que tenía que ser con n grupos. Nuestra estructura con un campo de grupo_id en la tabla de usuarios ya no servía y tuvimos que hacer una tabla unión de usuarios_grupos que me dió grandes dolores de cabeza. No fue propiamente la tabla la que obstaculizó, sino el selector múltiple en la interfaz web. Me daba un error maravillosamente explícito: ""{0}": El valor no es una opción válida.", ¡Ah, java!

Sucedió pués que estuve buscando en la web alguna solución. Los pronósticos no eran alentadores, muchos se lamentaban del mismo error sin que se ofreciera una explicación/solución al problema, el mismo error aunque con otros términos entre los corchetes. Pero fui entendiendo que lo que estaba pasando es que no había compatibilidad entre el tipo de datos que mi formulario estaba mandando, y el del objeto que debía contenerlos (para después procesarlos en otro objeto). Así pues, hice un objeto más para contener solamente los datos de ese campo del formulario y empecé a experimentar. Todo lo anterior para recibir nuevos errores, pero ahora, alentadoramente diferentes.

Cuando un sólo error te ha mantenido bloqueado por cuarentayochohoras el que aparezcan cosas diferentes es esperanzador por decir poco. Finalmente descubrí que en los formularios de java server faces, el elemento selectManyList por lo menos, suele mandar ArrayLists de Strings, no de Integers, por lo que tuve que tomar los Strings y convertirlos, y luego reformatearlos para así poder usar el objeto que se comunica con la base de datos. Un pedote pero al final salió. La semana que viene se instalará el programa. ¡Que Alá sea misericordioso!

¿cuántos posts decía?

Oscar dijo en un comment: "Es curioso cómo una buena parte de tus posts tratan sobre cómo tener muchos posts.", y en un inicio me pareció poco preciso, ¿buena parte?, ¿qué tanto es buena parte?, pero como por lo general no echo en saco roto lo que él dice, debo asumir que sí, que hablo frecuentemente de cómo mantener el ritmo, de cómo "adelantarme" y hacer un "stock", de los que ya llevo, etc. Mea culpa.

Mea disculpa: "La cantidad es una cualidad en si misma", creo que dijo Jrushchov (vaya autoridad a quien me arrimo). Mi transcurrir por las lecturas me ha hecho ver que quienes considero grandes tienen una gran obra, cuantificable en volúmenes, artículos y textos publicados. La calidad los separa, es cierto, de otros que también han hecho mucho sin pensarle tanto. Aprecio y respeto a mis ídolos, también por su fertilidad.

Segunda disculpa: tal vez me he centrado en cantidades más que en cualidades al medir mi camino bloggero en los posts de las categorías reflexiones, cómo y porqué. Pero son textos de los que yo denomino "auto-reflexivos" y aunque podría omitir su publicación porque son más para mí que para otros (y con esto respondo al nuevo comentario que me dejó), hablar de mi propia producción bloggera es uno de sus propósitos. De cualquier modo, la observación fue recibida y se agradece.

Necesidad de retrospectiva

El síndrome de la pantalla en blanco fue vencido durante el ciclo anterior, gracias a las frases-idea que mencioné la última vez que usé esta etiqueta. Creo que empezaré a hacer lo mismo con los posts de categorías "autoreflexivas". La dinámica es buena, no he descansado ni un sólo día: aunque sean 30 minutos dedico a este hábito de escriba.

En general, creo que una vez empezada alguna actividad, si se toma el juego con la suficiente seriedad, al cabo de un rato sale más fácil. Quiero revisar, en un afán histórico, el camino que llevo, con lo que me leeré/corregiré próximamente. Tal vez de ahí salgan más ideas para estos últimos posts del ciclo que tanto trabajo me cuestan. Podría ser también que siempre sean difíciles, pues explicar lo que se hace y porqué no suele ser algo sencillo.

No cualquier título sirve

En este ciclo no adelanté. Me gustó la elección previa de temas, pues me dio más seguridad al momento de ponerme a escribir. Ya tengo las ideas frase colocadas en su sitio para la siguiente etapa, lo que me tranquiliza ligeramente. Digo que me tranquiliza porque mi objetivo es que The show must go on y cumplir el programa que me puse y practicar con las poco dóciles perras negras.

Originalmente puse las ideas frase en el campo de título de los posts. Luego cambié los títulos por algo diferente, pero ya irrevertiblemente relacionado con el tema expuesto. La elección del título suele ser de lo más difícil para mí.

Por otra parte, temo que para proseguir narrando lo de mi consumo para la categoría de estrategia debo llevar a cabo trabajo postergado y acumulado por un año. La otra alternativa es investigar más a fondo con respecto a las cooperativas. Preferiblemente atacar los dos frentes simultáneamente. ¡Ay!, tanto por hacer y tan poco tiempo.

Modificaciones del consumo

El primer corte que hice fue en octubre del 2006. Después de haber capturado minuciosamente cada uno de los gastos que salían de mi cartera desde el cuatro de mayo del mismo año. Hice un análisis muy simple, cuanto había gastado por categoría y sub-categoría. Los número arrojados fueron obvios, pero muy entusiasmantes por ser un principio de resultado, datos que me ayuden a planificar.

Resumen: ganaba 10000 cerrados al mes, al final del semestre había gastado 68254. Un déficit de 8254. En alimentos en general desenbolsé 11366, en transporte 10150 (salía tarde, tomaba taxis), en renta fueron 19529 (tomando en cuenta que pagaba mi parte del departamento donde vivo y mi parte del ex-departamento de mi hermana). Con todo, me divertí, en mi categoría de cultura (libros, entradas-a-lugares, música) gasté 6298. Mi gasto en cafés y capuccinos fue de 3551 y el de los cigarros 2641...

Conclusiones: 1.- Si quiero ahorrar un poquito (algo sumamente sano) necesito moverle al modus vivendi en algunos de mis gastos. 2.- De esta data pueden sacarse muchos más indicadores, que yo por impericia todavía no sé. 3.- Debo saber qué preguntas hacerle a mi data para que me ayude a planificar las compras. 4.- Necesito más conocimiento e investigación.

Así que seguí colectando la data manualmente, dia con día, hasta que de sólo pensar en capturarla toda algún día me daba miedo. Muchas horas acumuladas que podían haberse evitado con un hábito diferente. En fin, el fatídico día ha llegado, ya capturé noviembre y estoy por acabar diciembre, claro, me lo tomaré con calma, mientras iré pensando que preguntas he de hacer. La información de mis compras, me ha llevado poco a poco a modificar algunso hábitos, pero no he comparado desde aquel entonces y ya tengo otro año por registrar. La tarea del científico es agotadora.

Llevar la cámara y recordarlo

Ha habido una serie de situaciones y eventos que mi amada y yo hemos disfrutado muchísimo. Tanto que nos hubiera gustado registrar el momento de diversos modos: grabando audio, tomando fotos, o incluso haciendo algún video de lo disfrutado. Pero nos hemos atarugado al salir de casa, olvidando el equipo necesario para inmortalizar tales instantes. Peor aún, desde que D tiene celular nuevo siempre hemos llevado los instrumentos requeridos con nosotros, sin recordarlo ni actuar en consecuencia mientras pasa el tiempo disfrutado. Por lo que nos propusimos como propósito de febrero nuevo, llevar y recordarnos constantemente que tenemos con nosotros lo que hace falta para registrar nuestras andanzas: usar la tecnología que de por sí cargamos.

Por otro lado, aquellos momentos que disfrutamos infinitamente pero que sólo guardamos en la memoria mental, adquieren a veces proporciones retrospectivas míticas. Creo que por toda la emoción que estábamos sintiendo, mi musa y yo, recordamos que nos dijimos cosas hermosas el primer día que nos vimos, y no lo pongo en duda ahora ni mucho menos, pero estoy seguro que si pudiera oir el diálogo de hace dos años, descubriría muchos errores y muletillas en mi habla, una mayoría de momentos de franca estupidez y titubeo, y alguna que otra oración rescatablemente agraciada, que probablemente fue simultaneamente flecha de cupido. Tal vez por ello sea que se graba lo ensayado en lugar de lo cotidiano. ¿Lograremos recordar y sacar los instrumentos durante los momentos mágicos? He ahí el dilema...

Social Networking y los datos abiertos

El fenómeno de las redes sociales es lo de hoy. Recuerdo que en un principio rechazaba todas las invitaciones, pero un día acepté abrir una cuenta en hi5. Me inscribí también en facebook, lovehappens y tickle, cuentas abandonadas casi inmediatamente. Se trata de sistemas en línea que: vinculan a individuos desde el punto de vista de sus "amigos" (o más bien conocidos), permiten que el usuario personalice con su imagen preferida su espacio virtual personal, que se comunique con sus contactos por medio de mensajes internos, y que publique diversos tipos de contenido multimedia. En sus últimas versiones, te informan también de los cambios y novedades que tus "amigos" hacen en sus cuentas.

También digo que es lo de hoy porque hace poco descubrimos que una sobrina de Diana, de 12 años, tiene una cuenta y entre sus "amigos" están registrados también todos los demás miembros de la famiglia. Yo soy un paranóico con mi información y trato de dar los menos datos personales posibles en cualquier sitio web al que me inscribo, por lo que percibo un gran riesgo de seguridad al abrir esa información a todo el mundo. Con que algún tunante se pusiera a investigar tantito el hi5 de una persona no cuidadosa (la mayoría), tendría datos suficientes para aparentar ser de confianza y atacar, ya sea a aquel que haya investigado, o a sus contactos. Supongo que ahora que empiecen a darse extorsiones, solicitudes de ayuda falsas o secuestros fingidos, debido a la info publicada irresponsablemente en los sitios de redes sociales, habrá una mayor preocupación por la seguridad.

Por lo pronto es la fiesta, todos entran y saludan, lucen sus diseños, contactan a sus viejos conocidos para invitarlos, y publican fotos y videos personales. Por si fuera poco, Google acaba de sacar orkut, un motor de red social, en el que puedes reunir, administrar y relacionar las distintas redes a las que ya perteneces. Parece que se dijeron, ¿para qué competir con ellos?: mejor englobémoslos. Y la fiesta sigue, total, pregunta recurrente en slashdot: ¿Qué podría salir mal?

Boda ante la bóveda

Subimos en caravana el cerro, tres coches en la noche del sábado al domingo. De repente pasamos el último poste de luz, la última casita iluminada, y seguimos adelante hasta llegar a las orillas del "guerrero muerto", vallecito cruzado por un riachuelo adonde arribamos finalmente a pie. Abrimos las cervezas y el vino, algunos tambores y un par de guitarras empezaron a sonar, y D y yo nos pusimos a contemplar la zona iluminada por la luna más allá del riachuelo desde debajo del árbol que nos cobijaba. No se veían las estrellas, o más bien, se veían entre gruesas ramas. En lo que concluía el caos del acomodo susurré a mi amada que fuéramos al otro lado del riachuelo a observar las estrellas. Ella estaba por proponerme lo mismo.

Del otro lado del riachuelo es un claro, ahí nos acostamos los dos sobre el pasto a ver el cielo. A nuestros pies la luna surgía entre las siluetas de los árboles, por encima de nuestras cabezas estaba la subida rocosa tras la que resplandece todas las noches el monstrito federal. El espectáculo infinito de las estrellas ante nosotros, con una profundidad inmaculada, y los dos tiritando agarrados de la mano nos empezamos a decir palabras dulces. De los árboles a nuestros pies, las voces y guitarras de nuestros amigos porfin prevalecían armoniosamente sobre el caos, y entonces decidimos en ese momento regalarnos nuestras almas y declararnos marida y marido, mujer y hombre, esposa y esposo, una y uno, amada y amado, amante y amante, querida y querido, querer y querer, libre y soberanamente unidos en complicidades y rivalidades. Nuestro notario y juez fue el cielo estrellado, y confirmó nuestra unión con dos estrellas fugaces, que vimos conmovidos mi musa y yo.

Después de ese breve y sonriente infinito volvimos con los amigos a cantar y beber. En la madrugada regresamos al defectuoso, y después de comer algo en un restaurante chino del centro, pasamos a dejar a los cuates que aprovecharon que teníamos vehículo para volver con nosotros. Luego conversamos cariñosamente un rato más y nos dormimos. Al día siguiente había un compromiso inaplazable y había que descansar. Lo que fue, ya no puede no haber sido, y esa boda de noche se queda conmigo.

Libertad gritada Vs reflexionada

Hace poco, en el trabajo ordenaron tortas e hicieron una dinámica de "integración grupal": llevaron una película de acción (como cuando algún papá pone el partido de fucho para "convivir" con sus chamacos). El nombre de la cinta es irrelevante, trata de un tal Artorius (Arturo), capitán de un diezmado cuerpo de caballería "de élite" que todavía en el siglo V custodiaba el muro de Adriano para los Romanos. En el cuento los caballeros están a punto de obtener su Libertad después de quince años de servicio recién cumplidos, pero llega un obispo y les encarga una última misión. La película es malísima, los personajes tienen fija la idea de Libertad y la reclaman y hacen berrinche (sin rebelarse) mientras afrontan a peligros y enemigos hasta que por fin se las dan (la Libertad). Todo diálogo la nombra. Al final, una vez recibido el tan deseado descargo para volver a sus familias de infancia, prefieren permanecer heróicamente y morir en batalla bajo el mando de su antiguo capitán, el cual, ya que los romanos se marchan, ha decidido hacerle frente al ejercito sajón invasor para defender a los woads, pueblo céltico nativo del que proviene la chica con la que finalmente se casa. Al final final (es decir durante la boda), entre vítores y clamores de Libertad a todo pulmon, el pueblo lo nombra contradictoriamente monarca: el Rey Arturo...

Bah, el uso excesivo, contradictorio y justificador dado en ese churro a la palabra "libertad" es ridículo, son producciones como esa las que me hacen entender que se desdeñe sarcásticamente a quienes hablan de ese complejo concepto. Sin embargo no por ello es un campo semántico desdeñable, la susodicha palabra representa algo mucho más profundo que las ganas de hacer o no alguna actividad, habla de lo humano y su desapego a lo meramente-instintivo.

Por otro lado, acabo de leer El valor de elegir, libro generoso, razonado y razonable en el que también se habla de la Libertad, aunque con sensatez inversamente proporcional al del bodrio visto en la oficina. Confirmo con cada obra de Fernando Savater, mi afinidad con sus temáticas y sus reflexiones. El texto tiene dos partes: Antropología de la libertad (palabra que casi no usa), en la que habla sobre el humano como ser práxico (que actúa), sobre la elección, las incertidumbres, lo voluntario e involuntario, las razones, la conciencia, etc; y Elecciones recomendadas (ámbitos en los que ejercer la libertad), parte en la que se pronuncia por la verdad, el placer, la política, la educación cívica, la humanidad y lo contingente. Un libro que recomiendo ampliamente y al que volveré seguido para digerirlo mejor.

Los tickets infinitos

En el trabajo tenemos una aplicación llamada Trac para dar seguimiento a los proyectos. Una vez que recibimos el encargo de un desarrollo, estudiamos a fondo el requerimiento. Luego lo dividimos en componentes y entregables. Los entregables, o milestones, los subdividimos a su vez en tickets. Así, por ejemplo para el entregable Fase 2, componente Web, dimos originalmente de alta unos 60 tickets.

Ay, pero ojalá una vez segmentado el proyecto todo fuera cumplir con los susodichos tickets, sin embargo es distinto. A veces, para poder cerrar uno, se deben abrir quince. La mecánica es más o menos así: para la sección de grupos (de usuarios) se necesita de: 1.- Tabla de grupos con botón de edición para cada uno, 2.- formulario de nuevo grupo, 3.- formulario de edición de grupo con botón para eliminarlo, 4.- botón de borrar grupo, y 5.- página de confirmación de la eliminación.

Es decir que el ticket Sección de grupos, se convierte en cinco otros. Pero resulta que la mejor solución para limitar un tipo de dato en los formularios, es usar un dropdown-menu (ddm), entonces los ítems 2 y 3 de la lista anterior se subdividen en: a) hacer método para generar ddm de tal información, b) integrar el método a tal formulario de grupos.

Pongamos que hasta ahí todo funciona, de repente otro formulario relaciona a los usuarios con un grupo (como estaba previsto), lo que provoca que ya no se pueda borrar al grupo, error aparatosísimo de la base de datos cuando lo intentas. Entonces surgen: i) modificar método borrador de grupos, ii) definir a qué grupo van a parar los usuarios desgrupados, iii) advertir al momento de eliminar un grupo las consecuencias que tendrá en los usuarios que le pertenecen, etc. Total, he estado cerrando y cerrando tickets, pero el proyecto no avanza al ritmo necesario y ya tenemos que entregarlo. Así pues, angustia.