Ser atendido por especialistas

Conforme pasan los años, y los kilos, se me acumulan los achaques... Digo, no soy un anciano, al menos no en nuestros tiempos (si hubiera vivido hace 2000 años tal vez ya sería parte de los sabios de la tribu, pero en la actualidad estoy a la mitad de los años promedio de vida de mi sexo); pero ya me siento como un viejito en muchos aspectos de mi vida, así que ahora debo hacer un plan para ir a distintos especialistas para curarme y llevar una vida saludable o más sana.

Al primero que tengo que ir es al dentista: no me duelen los dientes, pero ya vi, revisándome en el espejo, un par de caries que si dejo que crezcan van a ser piezas perdidas.

Luego debo ir con un nutriólogo: yo puedo disciplinarme para comer menos, para comer poco, para no consumir algunos alimentos como dulces, pan, tortilla y demás. Sin embargo, no soy un especialista y la verdad ahora que tengo chamacos debo hacer las cosas responsablemente, y evitar desbalancearme más de lo que ya estoy, así que lo que procede es ir con el nutriólogo.

En seguida debo de ir con un gastroenterólogo, ya que hay días en que me duele el estómago, y padezco de acidez, reflujo, y hay noches en que me despierto y siento que me quema desde la garganta hasta la boca del estómago (o al revez).

Una vez revisado mi estómago, debo ir con el otorrinolaringólogo, porque tengo tos desde hace unos tres meses. Probablemente se deba a mi reflujo, pero podría ser que no, que fuera una alergia o algo pior. Así que debo hacer lo que pueda para detener esta tos que me acompaña desde ya un buen rato, y eso que no fumo.

Tras mejorar mi garganta debo ir con un podólogo, porque tengo uñas enterradas y esas me impiden correr, y empezar a hacer ejercicio, irme caminando (y en metro) a la oficina en lugar de en coche, y la verdad es muy doloroso y muy incómodo.

Ese tendría que ser mi propósito de año nuevo, y como en realidad no tengo presupuesto para médico, voy a empezar a hacer citas en el seguro social, y a exigir que me revisen y me curen, porque si no tengo dinero para ir al doctor es en parte porque en mi empleo me quitan como tres o cuatromil pesos de impuestos, entre los que van inmensas cuotas al IMSS.

Y no, no voy a ir a ver a ningún chochero, homeópata, acupunturista, reikista ni ninguno de esos charlatanes. Podrán ser personas bien intencionadas y creer en lo que hacen pero eso que hacen no funciona, y hay modos de demostrarlo.