3 de mayo de 2012

Una maestra cruel, dice

Estaba viendo una película de pilotos negros en la segunda guerra mundial, titulada Red Tails pues según esto los aviones de esos valientes tenían la cola pintada de rojo. Está entretenida, y ves como van asignando a los pilotos misiones más y más peligrosas, hasta que les dan las misiones de los blancos; y finalmente se ven súper habilidosos contra los alemanes; que obviamente eran los mejores pilotos de su tiempo y tenían los mejores aviones. El drama sigue a un puñado de esos aviadores y las situaciones personales a las que deben sobreponerse, y la relación entre ellos, y como poco a poco se ganan el respeto y la preferencia de los bombarderos blancos, a quienes los cazas negros protegen mucho mejor que los cazas blancos. En una escena cerca del principio, por ejemplo, un negro intenta entrar a un bar de oficiales y le cierran el paso y lo desprecian bien gacho; pero ya que habían protegido un buen número de bombardeos, cerca del final pasan en frente de ese mismo bar y la tripulación de uno de los bombarderos, agradecida, los invita a tomar... Es una de esas películas que ensalza tanto el gringo-pride, como el african-american-pride. Tiene varios clichés un poco cagantes y repetitivos, como cuando uno de los negros hace el chistín ese de "si se enojan ustedes, se ponen rojos, si se enferman se ponen verdes, si les da miedo se ponen amarillos, ¿y todavía se atreven a llamarnos de color?"

Hubo una frase que me gustó y que me quedo: "Experience is a cruel teacher: it gives the exam first then the lesson" (La experiencia es una maestra cruel: da primero el examen y luego la lección). Claro que, pensando que eso lo dice un chavo de veintytantos que de cualquier modo carece de mucha experiencia que digamos, pierde un poquito de punch. Pero de verdad así es, si uno aprende regándola primero y luego reflexionando, va a haber muchos frentazos antes de que algo salga bien; sin embargo, primero estudiar y asimilar y aprender, con guía de un maestro y toda la onda, para después entrar al campo de batalla no garantiza los excelentes resultados que pretenden los defensores del estudio escolarizado. Supongo que todo depende de la materia, por ejemplo, según tengo entendido, en medicina lo meten a uno a los trancazos desde temprano para que la teoría y la experiencia se den más o menos simultáneamente... Pero hay muchas otras disciplinas en las que no es así, como ingeniería, o leyes (creo). Como sea, a mí la experiencia no me parece tan cruel.

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