Teatro y comida lujosa

El 10 de octubre fue el n cumpleaños de mi abuela. Así que al sábado siguiente fuimos al teatro. La obra: Orrggasmooossss... Comedia ligera y vulgar que explota los estereotipos que se reciben a diario en chistes de mail. Actúan tan sólo una pareja. Formato: uno de los dos empieza a platicarle al público una "anécdota", o mejor dicho, un comportamiento típico y recurrente del otro, que en ese momento entra a escena y se pone a actuar según lo narrado por el primero. A partir de ahí, el narrador se integra como personaje del sketch sin dejar de hacer comentarios y gestos a sus confidentes (el público) de "¿no les dije?, ¿ya vieron?, etc". El humor es típico de quien se asume fatalmente definido por su sexualidad (con ciertas variaciones) y se mira con cinismo y complacencia. Cada breve chiste es de entre dos y cinco minutos; una hora y cuarto de chistines con respecto a relaciones de pareja mal planteadas.

Al día siguiente fuimos a comer a un restaurant terriblemente bueno llamado La taverna del león, de la Chef que salía en canal once, Mónica Patiño. Me pareció demasiado rebuscado. Me cagó que ofrecieran el pan de a rebanada (de entre una variedad de panes), se me hizo ligéramente ridículo el que llevaran los platos tapados y los destaparan juntos (todos los meseros, garroteros y pinches al rededor de la gran mesa), y sobre todo el precio... Ordené de lo barato, no pedí vino, y aún así quedé desbalanceao de presupuesto esa quincena...

En la comida, como de costumbre en comidas con mi familia, dije algo que molestó muchísimo a D (ya ni recuerdo qué). Normalmente en esos casos ella es muy prudente y solamente me pone una carita de furia y odio mal contenidos. Por lo general yo interpreto ese gesto como hostilidad y respondo como un espejo lupa, con agresividad, severidad y antagonismo multiplicados. Ahí es cuando todo se rompe y no queda piedra sobre piedra porque ni D ni yo nos quedamos callados o damos el brazo a torcer, y entonces salen los ultimatums y los trapitos de otros altercados anteriores. En esta ocasión, en ambos hubo fuerza para envainar de vuelta las espadas y seguir departiendo, ojalá lo logremos más seguido.