He intentado sin éxito llevar el ritmo necesario de lecturas para mi carrera. Yo que me las doy de gran lector no he podido con la tarea. Y no he podido con la tarea porque tengo curso psicoprofiláctico los martes y sábados, asisto a clases universitarias los lunes, tengo psicoanálisis los miércoles, estoy viendo de mudarme con mi musa a un lugar más grande dentro de a lo mucho una semana y eso requiere de cierta atención, planificación, compras, etc. Para colmo en el trabajo me presionaron a tal grado tanto la semana anterior como esta, que perdí dos días de universidad, y me temo que si vuelvo a faltar no tendré oportunidad de pasar el semestre.
De cualquier modo, he conservado un alto ritmo de estudio en lingüística y próximamente publicaré aquí mis trabajos universitarios al respecto. No serán tremendas investigaciones filológicas ni nada por el estilo, sino típicos cuestionarios de primer semestre, que se deben responder con amplitud limitada, basándome en lecturas designadas en el plan y la guía de estudios. Por otra parte, también me he documentado acerca las técnicas de relajación y respiración durante la durísima y tremenda labor de parto que mi musa vivirá dentro de máximo cuatro semanas, pero muy probablemente sean tan sólo quince días. Mamma mia che paura. Seré papá, y no aún sé ni como cargar a un bebé...
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