Chips de geolocalización

Anteriormente, es decir cuando estaba el PRI, un amigo me argumentaba que la policía mexicana era la mejor del mundo, porque con tal de sacar tajada estaba en todos los tejes y manejes de la delincuencia organizada, vamos, que no pasaba nada sin que ellos lo supieran y fueran con los perpetradores de cualquier cosa a pedir su mordida para quedarse callados. Pero de que sabían, pos sí sabían.

Es decir que si desaparecía alguien, y no volvía a reaparecer, no era por incompetencia de la policía, sino por su complicidad con los criminales. O al menos eso es lo que se me decía mi amigo, y por como se maneja la corrupción acá en México yo creía que así era. Ahora, sin embargo, con lo del Jefe Diego ya no estoy tan seguro. Es un personaje demasiado poderoso, demasiado rico y militante del partido en el poder, y a no ser que sus hijos lo hayan mandado desaparecer ellos mismos, para heredar antes (¿Qué tal que el viejo ex-senador los hubiera amenazado con desheredarlos y ellos hubieran actuado de modo similar a Cómodus que mata al emperador en la de Gladiador?), no veo cómo es que no ha reaparecido aún.

Recuerdo que hace no mucho un abogado amigo del Jefe Diego alegaba que esta era una desaparición política, y no un secuestro común. O sea que las mismas "autoridades" cometieron el delito, (¿pero por qué?) y ya no va a volver a ser visto don Fernández de Ceballos. Así pues, al final todo apunta a tres posibilidades: 1. Un inside job familiar, 2. Un inside job político, o 3. Nuestra polecía ya se hizo totalmente incompetente (sin dejar de ser corrupta). ¿Cuál será la buena?

Sé de chips insertables en puntos específicos del cuerpo humano, localizables vía satélite. Si yo estuviera en el gobierno propondría que esos chips fueran subsidiados y que cualquiera que se sintiera secuestrable pudiera ponerse uno a bajo costo. Con lo cual, los secuestradores serían atrapados a cada rato, y los secuestrados rescatados velozmente. Y quiero ver quién se pone a hacerla de secuestrador donde todos los posibles candidatos son localizables vía satélite en cualquier punto del territorio.