Tengo el orgullo de haber sido informado por mi amada, de que a Loana le levantaron su primer reporte de la vida en la escuela. Le dijeron a mi musa que nuestra pequeña había estado pellizcando a sus compañeritos, los cuales ya hasta le tenían miedo los pobres. Me parece emocionante, porque hasta hacía poco, cuando otro pequeño llegaba y la agredía, Loana se dejaba y empezaba a llorar, pero ahora, dominante, ella es la que maltrata a los demás, a la que los otros niños temen.
Claro, unos días después uno de los pequeños oprimidos por ella se envalentonó y le respondió con un rasguño. En la escuela nos informaron del hecho, y de que "ya habían hablado con los pequeños para decirles que eso estaba mal y que no se hacía, etc". I mean, ¿quién habla así con bebés de menos de dos años?, de cualquier modo no creo que Loana les haya entendido, porque ahora, cada vez que la contrarío, además de gritar y lloriquear, me suelta unos pellizcotes en los brazos, el cuello y los hombros. Yo, aunque me duelen, ni me inmuto, la idea es que la indiferencia debilite ese patrón de conducta, ya que según esto reirle el chiste o regañarla podría reforzarlo.
Por otro lado, hace poco mi monstruela estuvo enfermita del estómago y resistió bien y no la dejamos deshidratarse, eso sí, se rozó de un modo nunca antes visto, y tardó una semana en recuperarse de sus heridas en el traserito. ¿Cómo hacerle para que otras personas (las empleadas de la guardería, por ejemplo), le pongan una atención parecida a la que le ponemos sus papás, detecten cuando hace del baño, y le cambien inmediatamente el pañal?
1 comentario:
Eso que haces de no responder se llama habituación es una buena estrategia el problema es que aprendera a que solo funciona contigo.
A esa edad los niños son como perritos, hay que contener la acción seguida de un no y con eso es suficiente pa que generalice.
Con contener no me refiero a que hay que madrear a la niña,
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