¿Semana de anticipación?

Ayer viernes tenía que entregar un sistema de alta de promociones completo y con dos módulos, y según yo, ya lo tenía listo desde el viernes anterior. La semana pasada, pues, creía haber terminado ya toda la funcionalidad y el lunes estaba probando y debuggeando. Me sentía orgulloso y contento por haber acabado antes de tiempo, y me disponía a demostrarlo a los jefes. Ellos por supuesto estaban contentos con mi noticia de la finalización de mi micro proyecto, y agendaron la revisión para el martes. El martes no pudieron, así que fue para el miércoles. Cuando presenté mi trabajo empezaron a pedir cambios, a decir que hacía falta un sistema de autorización de las promociones para que alguien valorara si podían salir al aire o no, a pedirme que le pusiera otro diseño gráfico que ya había elaborado el diseñador, a señalar supuestos errores (que no eran tales, pues así me habían pedido que fuera la aplicación) y a pedirme que los reparara, etc. Mientras tanto, los primeros días de la semana estuve haciendo mejoras y cambios solicitados por las distintas estaciones de radio a otras páginas, y al final, ayer viernes, terminé con lo que me pidieron mis jefes, pero ya no fue con una semana de anticipación, sino que sólo fue a tiempo.

La lección que saco desto es que si quiero entregar a tiempo debo terminar lo que yo considere fundamental desde una semana antes de la fecha de entrega, pues vendrán cambios, mejoras, correcciones, reparaciones, etc. Si quisiera adelantarme una semana tendría que terminar dos semanas antes, etc. También, por lo tanto, y por lo mismo, si pretendo terminar el día de la entrega siempre quedaré mal, porque ese día pedirán cambios, y eso recorrerá automáticamente la fecha de entrega, pero con respecto a las entregas no hay modo de explicarles a los altos mandos que cada desviación de la ruta marcada conlleva un ajuste de tiempos.