Estas características variarán en el sufrimiento que imponen y las opciones que facilitan dependiendo del poder de negociación relativo de las tres clases. Pero incluso con esta variacion, en cada instancia del capitalismo, el andamio general de las instituciones definitorias de la economía será como se indicó más arriba. ¿Cuáles son las implicaciones de todo esto para la educación?
Si una economía tiene a 2% reinando, entre el 18 y 20% administrando y definiendo, y cerca del 80% obedeciendo, entonces los nuevos reclutas de cada año en el sistema educativo deben ser preparados para ocupar su posición designada en una de esas tres clases. Los reclutas deben ser preparados para ejercitar determinadas funciones, para prestar atención a determinadas responsabilidades, y para ignorar las distracciones. Esto es cierto para aquellos que van a regir, para quienes tendrán gran poder pero no el mando, y para los que abrumadoramente obedecerán.
Una palabra útil para toda esta preparación educativa es canalización. Cada nueva generación es dividida en segmentos para luego ser canalizada hacia su destino. El sistema educativo toma a la población entrante y la procesa de manera que para cerca del 80% de sus miembros la tendencia a impactar en los sucesos es reducida a casi nada, la confianza es semi eliminada, el aprendizaje es mantenido mínimo y estrecho, y las principales habilidades aprendidas son obedecer y soportar aburrimiento. Como Bertrand Russel aptamente resumió, "Los hombres nacen ignorantes, no estúpidos; se convierten en estúpidos por la educación."
6 de mayo de 2008
Parecon y la educación (4 de 9)
Etiquetas: estrategia - Publicó persona.vitrea a las 09:00
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